Un nocaut en el primer asalto le devuelve poder de convocatoria a Deontay Wilder en la división máxima del boxeo. Busca un combate multimillonario contra el inglés Anthony Joshua,
Nueva York, 19 de mayo de 2019. Deontay Wilder sacó una derecha potente, demoledora, dormilona, amenazante.
El estadunidense adelantó que luciría en este combate, que daría espectáculo, que todos sabrían de su poder, y fue así. El campeón de peso Completo del CMB –Consejo Mundial de Boxeo– liquidó en el primer asalto a su compatriota Dominic Breazeale.
Apenas habían transcurrido dos minutos del primer asalto cuando el llamado The Bronze Bomber (El Bombero de Bronce) sacó una derecha dirigida al rostro del contrincante. Dominic sintió el poder en el lado izquierdo del mentón y de inmediato se fue a la lona.
Los aficionados en el Barclays Center de Brooklyn se levantaron de sus asientos y gritaron. Estaba noqueado Breazeale. El réferi le dio al cuenta de protección. Dominic se levantó, pero en muy malas condiciones. No lo dejaron seguir.
Ese tremendo nocaut en el primer asalto le devolvió poder a Deontay en la división, pues venía de un empate en diciembre pasado ante el británico Tyson Fury, además de que busca un combate millonario unificatorio con el inglés Anthony Joshua, quien es el poseedor de los cetros de peso Pesado de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), Organización Mundial de Boxeo (OMB) y Federación Internacional de Boxeo (FIB).
“Sacamos la mano y logramos el nocaut. Sabía que podía hacer daño y lo hicimos, estamos listos para lo que sigue”, puntualizó Wilder al final del pleito.
Joshua tendrá acción en junio también en Nueva York ante el púgil de sangre mexicana Andy Ruiz, y se vislumbra que si sale con la mano en alto entonces los aficionados podrían frotarse las manos para verlos por fin frente a frente a finales de 2018.
Texto: Agencia Reforma
Foto: Twitter @BronzeBomber
