Confía el obispo Rangel en que continúe en secreto el diálogo con las comunitarias

Se debe aprovechar el momento “psicológico” de campesinos que se dedicaban al cultivo de amapola y quienes se dedicaban a su cuidado, que no yo tienen qué hacer...

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26 agosto,2019 5:12 am
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Se debe aprovechar el momento “psicológico” de campesinos que se dedicaban al cultivo de amapola y quienes se dedicaban a su cuidado, que no yo tienen qué hacer por la baja en el precio, plantea
Iguala, Guerrero, 26 de agosto 2019.  El obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, confió en que continúe el diálogo que había dado a conocer la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, con policías comunitarias, aunque de manera más secreta y no se haga público, con el fin de poder pacificar a Guerrero.
Agregó que se debe aprovechar el momento “psicológico”, de campesinos que se dedicaban al cultivo de amapola y “de policías comunitarios, que custodiaban el trasiego de la goma de opio”, que al caer su precio ya no tienen qué hacer, para que se puedan integrar a la sociedad civil, a la sociedad normal.
Al mediodía, el obispo Rangel Mendoza encabezó la homilía del mediodía en la iglesia de San Gerardo María Mayela, a la que acudió el alcalde morenista, Antonio Jaimes Herrera.
En declaraciones al término de la misa, el obispo reveló que en pláticas que tuvo con cuatro jefes del narcotráfico, hace poco más de un mes, uno de ellos al que recientemente mataron, “al famoso Teniente”, le platicaron que definitivamente este año ya no se sembró la amapola, pues hasta hace dos años todavía costaba 35 o 40 mil pesos el kilogramo de goma de opio, y el año pasado cayó a 3 mil 500.
Dijo que por esta razón “ahora están desempleados los campesinos y no tienen qué hacer. Los mismos policías comunitarios, que custodiaban el trasiego de la droga, ya no tienen qué hacer. Por lo que yo digo que hay que aprovechar este tiempo y este momento psicológico, donde esta gente ya no se puede dedicar a eso, pues que se puedan integrar a la sociedad civil, a la sociedad normal”.
Advirtió que entre los “capos mayores”, la situación de violencia y otros delitos, como el robo y el secuestro, podrían incrementar, aunque entre mucha gente sencilla, empleada por poco dinero, que ya no quieren meterse en esto.
“Al ya no haber el tráfico de la amapola se van a dedicar al secuestro, a la extorsión, a los asesinatos y a los robos. Ojalá que aquí, como lo han dicho varios políticos ahora, que el gobierno ponga mano dura y esto se pueda evitar”.
Rangel Mendoza subrayó que “no son muchos jefes, ni muchos grupos, aunque se decía que en Guerrero había 18 (grupos del crimen). Ya están por lo menos dos eliminados, entonces quedan 16, ellos saben quiénes son y dónde viven, y pues que vayan por ellos”, dijo en clara referencia a los gobiernos estatal y federal.
Consultado sobre la estrategia que había anunciado la titular de Gobernación, Olga Sánchez, insistió en que el diálogo es un instrumento muy bueno para conocer cómo piensa la otra persona, cuáles son sus razones o en qué tiene la verdad la otra parte.
Dijo que le dio mucho gusto cuando Sánchez Cordero dio a conocer que abriría el diálogo con las policías comunitarias, lo cual fue frenado por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
“Yo creo que con tantos problemas que tiene ahorita el presidente, con tantas broncas que tiene, por ejemplo el aeropuerto de Santa Lucía, de los empresarios que no quieren cooperar en el Tren Maya; es decir, tiene muchos frentes abiertos, que yo podría decir con un refrán ‘el ratón ya no quiere queso, sino salir de la ratonera’”.
“Yo creo que López Obrador, de una manera inteligente no se quiso poner un problema más, sino que creo que este diálogo va a seguir, aunque no se haga muy público. Pero tiene que seguir con las policías comunitarias y con otros grupos, aunque de una manera más secreta, ojalá que siga para poder pacificar a Guerrero”.
Lamentó que sigue la violencia en todo el estado y últimamente en Chilapa. Confió en que con la detención de Zenén Nava, a quien no mencionó por su nombre, “las cosas se tranquilicen un poco más”.
“Pero ustedes saben que cuando detienen a un cabecilla del narcotráfico, siempre se dispara la violencia. Espero que esto pase rápido”. Asimismo, pidió que se investiguen bien los recientes asesinatos que hubo en ese municipio, “de esos asesinatos que hubo últimamente. Yo simplemente les invito a que investiguen bien el porqué fueron esos asesinatos, posiblemente fue por algo muy distinto, algo muy diverso, y a ver si es que dan por qué se dieron esos asientos”.
Confió, además, en que por lo menos en lo que corresponde a su diócesis, las cosas se vayan tranquilizando día a día, y que se cuide y se respete la vida en todo sentido.
Texto y foto: Alejandro Guerrero

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