Con goles de Renato Ibarra y Federico Viñas, las Águilas ganan 2-0 en la vuelta de semifinales para empatar 2-2 en el global. Avanzan por su mejor posición en la tabla al duelo por el título, que jugarán los días 26 y 29 de diciembre, cuando los regios regresen de su participación en el Mundial de Clubes en Qatar
América empieza a ilusionarse con la 14. Ya está en la final y reta al Monterrey. Una gesta más a la colección de las Águilas, imponentes ayer en un abarrotado estadio Azteca, en donde con goles de Renato Ibarra y Federico Viñas vencieron 2-0 (2-2 global) a un aterrado Monarcas, que les dio la clasificación por mejor ubicación en la clasificación.
Pero la realidad es que ése fue el criterio de desempate, pero futbolísticamente el América borró a un asustadizo Morelia.
Eso sí, sin merecerlo Monarcas parecía llevarse el gran botín cuando al 71’ José Ortiz anotó tras un tiro libre, pero el VAR intervino para anular la jugada que había dejado frío al estadio Azteca.
Porque al América le hierve la sangre. No es una exageración hablar de lo ambicioso del equipo de Miguel Herrera, tanto que en los primeros minutos todos los jugadores de la banca estaban de pie y hasta la figura Nicolás Castillo la hizo de balonero para reanudar lo más rápido el juego.
Morelia solo existió en los primeros minutos, cuando Miguel Sansores y Rodrigo Millar coquetearon con el gol, pero de ahí en fuera todo fue un recital azulcrema, un disparo apenas desviado de Guido Rodríguez, un mano a mano de Henry Martín en el que el visitante se salvó gracias al portero, una sensación de gol en cada jugada hasta que Luis Ángel Mendoza perdió la pelota, el americanista Andrés Ibargüen encabezó un contragolpe bien culminado por Renato, con un disparo ligeramente desviado por Efraín Velarde, al 37’.
Fue todo para Renato, que salió en camilla debido a una lesión y por eso se perdió el centro de su sustituto, Roger Martínez, para que Viñas marcara el segundo al 44’.
Monarcas, en el complemento, estaba aterrado. No podía pasar de la yarda 20 (según las marcas que aún quedan del juego de la NFL). Sería más fácil enumerar a los jugadores temerosos que a los que le pusieron personalidad. El portero Sebastián Sosa arrancó de una patada un buen pedazo de césped molesto por la pasividad de su capitán Aldo Rocha.
El visitante se salvó en un remate de Henry y luego agradeció al VAR el que le anularan un gol a Roger Martínez. El técnico Pablo Guede tampoco arriesgó pese a que requería un gol para obligar a marcar dos al rival, así que hasta el 83’ hizo cambios ofensivos, ya cuando el reloj era un enemigo más, ya cuando solo un milagro que estuvo cerca de consumarse en un cabezazo de Aristeguieta al 95’ hubiera evitado que el América rete a Monterrey en la gran final, el 26 de diciembre en el estadio BBVA y el 29 en el estadio Azteca.
Se contiene El Piojo para no ser expulsado
Pese a meterse a una nueva final de Liga con América, Miguel Herrera reconoció que por controlar más su temperamento en la banca ha provocado que no disfrute tanto los partidos.
“Soy pasional, así vivo el futbol, difícilmente dejaré de serlo. Hoy (ayer), por ejemplo, sinceramente no me sabe tanto el partido porque estoy muy tranquilo en la banca para no cometer un error, para saber qué tengo que estar en la cancha con mis muchachos.
“Después caen los goles y brinco de emoción, me da mucha felicidad. Estoy contento, yo sigo haciendo mi trabajo, lo que se me pide y trato de hacerlo lo mejor posible. Tengo un grupo de trabajo extraordinario, mi cuerpo técnico es el mejor de México”, explicó Herrera tras avanzar a la final del Apertura 2019.
Herrera destacó que las Águilas son un equipo experto en manejar escenarios de desventaja, algo nada ideal pero que forma parte de la esencia de la institución.
Además, Herrera destacó a Monterrey y Antonio Mohamed, sus rivales en la final del Apertura 2019.
“Se sufre mucho, pero tengo un equipo dispuesto a darlo todo. Obviamente estaríamos más tranquilos si pasáramos las fases más cómodos, pero este es el sabor del equipo.
“Monterrey es un gran equipo, tienen a un gran técnico. El Turco es mi amigo, es un gran técnico, extraordinario ser humano, llegó de relevo a Monterrey y lo metió a la final. Pasa como octavo pero con ese plantel no importa”, sentenció.
Texto: Édgar Contreras / Agencia Reforma / Foto: Tomada de internet
