Trata el presidente a esa organización como si fuera del crimen organizado y la señala de “fan-tochería y prepotencia”. Tras pregunta sobre el fenómeno, se lanza contra el mundo “del lujo barato, de las alhajas, las trocas, la ropa de marca” que es “falso, efímero”.
Ciudad de México, 1 de febrero de 2020. Como un “desafío de fantochería y prepotencia” que debe dar “vergüenza”, calificó el presidente Andrés Manuel Lopez Obrador la presentación de 19 niños armados como policías comunitarios por la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias de los Pueblos Fundadores (CRAC-PF) en la que se agrupan 16 comunidades del pueblo nahua, de las más pobres y marginadas de Guerrero.
En la conferencia matutina de ayer, un reportero de un medio digital de Acapulco le preguntó sobre las garantías que solicitó la Comision Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para los infantes que recibieron adiestramiento para defensa de sus familiares y pueblos de grupos delictivos, y tras que la CRAC-PF dijo que continuarían ese entrenamiento, el mandatario respondió que la Secretaría de Gobierno (Segob) ya está atendiendo este asunto.
Luego el presidente hizo una larga exposición sobre la estrategia de su gobierno para enfrentar al crimen organizado y la adicción a las drogas, como si aplicara a la CRAC-PF, la organización de indígenas nahuas a la que pertenecían los 10 músicos que fueron asesinados y sus cuerpos mutilados y calcinados, crimen atribuido por la Fiscalía General del Estado a una célula del grupo delictivo Los Ardillos.
López Obrador dijo que la federación está atendiendo las causas que originan la inseguridad y la violencia, “en la estrategia, lo básico es el mantener la integración familiar, que no se rompan las familias, que haya bienestar, que se fortalezcan valores culturales, morales espirituales, que se atiendan a los niños y a los jóvenes”.
Reconoció que la estrategia sigue en un proceso, sin embargo, al final se podrá ver “cómo nos va en esta competencia para quitarle a la delincuencia organizada la posibilidad de que usen a niños y que usen a jóvenes, que no se convierta como era antes a los jóvenes en un ejército de reserva para el crimen porque estamos abrazando a los niños, a los jóvenes, atrayéndolos, quitándoselos con opciones, con estudios con posibilidades de trabajo”.
Reveló que tiene información de que en el reclutamiento “(las bandas) están enganchando cada vez a jóvenes de menor edad”.
Consideró que los grupos delictivos están desesperados porque “les vamos a ganar, y nos va a ayudar toda la gente, vamos a fortalecer a la familia como institución fundamental para la seguridad social. A pesar de los pesares, mantiene valores, eso es básico y se va a realizar”.
Indicó que se van a mejorar los libros de texto rumbo a la valoración de los principios, “vamos a insistir en que sólo siendo buenos podemos ser felices, parar esa mancha negra de egoísmo de triunfar a toda costa, del lujo barato, de las alhajas, las trocas, la ropa de marca, todo ese mundo falso, efímero, que no tiene que ver con los valores. La verdadera felicidad es estar bien con nuestra conciencia y estar bien con el prójimo”, pues la desintegración familiar y la pérdida de valores ha generado muchos problemas.
Ya más específicamente sobre los niños de la CRAC-PF a los que se adiestra para usar las armas en defensa de sus pueblos, el presidente señaló que “cuando veo esas cosas, digo, está bien porque es una especie de desafío, de demostración de fantochería, de prepotencia, que también existe en los actos de la sociedad, la prepotencia no solo es de los políticos”.
Y subrayó que “formar a niños con armas y tomar un video… este es un acto prepotente, no tiene nada que ver con la bondad, ni siquiera con el poder porque el poder es humildad”.
Consideró que “esos desplantes de prepotencia no sirven, no significa nada, hacen ruido, por eso me lo estás preguntando, no de mala fe, sino las redes sociales y demás, pero vergüenza les debería de dar hacer eso, no se les va a aplaudir por eso”.
Texto: Redacción / Foto: José Luis de la Cruz
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