Ciudad de México, 11 de octubre de 2017. La Selección Mexicana de futbol concluyó una gran eliminatoria rumbo al Mundial de Rusia 2018, al que clasificó con tres fechas de anticipación, de la peor manera: una derrota que le arrebató el récord de puntos, el invicto y que revivió todos sus fantasmas.
Tras perder 3-2 con Honduras el martes, el “Tri” llegó a 21 puntos y aunque sumó cinco más que su inmediato perseguidor (Costa Rica, con 16) tampoco pudo lograr la mejor marca de una selección mexicana en el Hexagonal de la Concacaf, las 22 unidades con el argentino Ricardo La Volpe rumbo al Mundial de Alemania 2006 (22 unidades).
La actuación de los dirigidos por el colombiano Juan Carlos Osorio, invictos en duelos eliminatorios hasta la noche del martes, había contrastado con los últimos dos procesos mundialistas, donde México sufrió e incluso tuvo que ir a la repesca en la previa de Brasil 2014.
“Nos da tristeza”, aseguró Osorio sobre haber perdido el invicto y el récord. “vamos a analizar y tratar de mejorar a futuro, la principal deficiencia es que no tenemos capacidad de alargar el marcador”, explicó.
“Ridículo”, fue el titular del periódico “El Universal” sobre el partido ante los hondureños. México volvió a cometer los errores de los que se le acusó en los momentos determinantes, como ante Chile en la Copa América Centenario 7-0; ante Alemania 4-1, y Portugal 2-1, en la Copa Confederaciones y ante Jamaica 1-0, en la Copa Oro.
Osorio realizó nueve cambios entre el triunfo 3-1 del viernes pasado ante Trinidad y el encuentro en Honduras, la gran mayoría debido a sus clásicas “rotaciones”, ya que el equipo presentó apenas una baja por lesión, la de Hirving Lozano.
El combinado mexicano, que ganaba con tranquilidad al medio tiempo por 2-1, se vio sorprendido por un rival que era inferior futbolísticamente pero que necesitaba los puntos y no supo controlar el partido.
México sufrió la remontada, perdió 3-2 y dejó muy mala imagen en el complemento. Además, los medios locales aseguran que la baja de Javier “Chicharito” Hernández, que pidió un permiso especial para ausentarse, habría sido en reclamo por las rotaciones que realiza el técnico colombiano.
“El aspecto emocional es muy importante cuando se juega con un equipo que necesitaba ganar, es una situación que en cualquier deporte” influye más que cualquier otra cosa, justificó Osorio al final del partido.
Sin embargo, la actuación de México se revalorizó después de la eliminación de Estados Unidos, el otro “gigante” de la zona, en casa de Trinidad después de un proceso donde tuvieron dos técnicos y consiguieron apenas 12 de los 30 puntos disponibles.
“Aprendimos mucho de esta eliminatoria, sin lugar a dudas es muy difícil, porque la Sudamericana, por ejemplo, es complicada, pero se juega en canchas mucho mejores”, señaló Osorio, criticado por no asumir ninguna responsabilidad cuando las cosas no van bien.
México usará la próxima fecha FIFA de noviembre para empezar la preparación al Mundial. Visitará en sus respectivos países a las selecciones de Bélgica y Polonia, ambos cabezas de serie para el Mundial y posibles rivales directos en Rusia.
El estratega sudamericano manifestó que tiene en mente a 35 jugadores con posibilidades para competir por un lugar en la convocatoria final para el Mundial. “(Todos) van a competir por un puesto, tienen el talento y la capacidad”, dijo.
Con más dudas que certezas, los de Osorio intentarán revertir las críticas a pesar de la buena eliminatoria: en México clasificar al Mundial es apenas el primer paso.
Nota de DPA/ foto de Selección Nacional de México (Facebook).
