José Ramón Aysa Neme indica que para el año entrante se tiene comprometida una primera inversión de 800 millones de la federación, pero falta conocer cuánto aportarán el estado y el municipio
Acapulco, Guerrero, 21 de septiembre de 2020. El director de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Acapulco (CAPAMA), José Ramón Aysa Neme, pidió comprensión a los ciudadanos pues dijo que el rescate y saneamiento de la paramunicipal no será inmediato.
Afirmó que CAPAMA “ha estado abandonada su recuperación en infraestructura, se han estado teniendo cambios y cambios en las áreas técnicas y la gente valiosa se relega por amistades en una administración y se cambia por otra y no se permite la especialización del personal”.
Indicó que hay técnicos en la paramunicipal, pero “los tengo que reestructurar, tengo el ofrecimiento de apoyo de la parte federal, estatal y la cooperación de la presidenta Adela Román en lo que le toca al municipio para lograr tener los fondos”, pero se necesitan cinco años.
En entrevista con El Sur, Aysa Neme indicó que para 2021 se tiene comprometida una primera inversión de 800 millones de parte de la federación, pero falta conocer cuánto aportará el estado y el municipio, también es necesario asegurar con la Secretaría de Hacienda que para los siguientes años se mantenga la inversión para el saneamiento del organismo hasta completar los 5 mil 500 millones de pesos que se requieren, 4 mil millones para infraestructura y mil 500 millones para pago de adeudos y reingeniería administrativa.
Convocó a los ciudadanos a estar conscientes que ese dinero, los 5 mil 500 millones de pesos “no están en la mesa, no nos los van a regalar, aun contando con ellos se requiere de (cinco años) para llevar a cabo la construcción y eso con un plan trazado para ir realizando cada uno de estos caminos, ese es el gran reto”.
Destacó que la valoración que se hizo de la inversión que requiere la CAPAMA ya fue aceptada por la federación por estar apegada a la realidad.
Lamentó los comentarios que se han hecho de que no se roben el dinero, que no rasuren la inversión, pues explicó que se trata de una inversión multianual y dependerá de las condiciones del país.
Indicó que la inversión para el rescate de la infraestructura de la CAPAMA será dirigida por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) y la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y se integrarán las aportaciones del gobierno del estado y del municipio.
Aysa Neme indicó que la CAPAMA está en quiebra pues sus ingresos mensuales son de 30 o 40 millones y los gastos operativos a los que tiene que hacer frente son de hasta 70 millones de pesos debido a que hay sentencias de pago por adeudos heredados a las que deben abonar mensualmente.
“Se ha ido deteriorando y ya no tiene márgenes de maniobra, antes se iba posponiendo la reparación de una estructura, cambiar una instalación ya obsoleta y actualmente llegamos a un tiempo en el que ya no se permite dejar de atender cada uno de los asuntos que tiene”.
También invitó a reflexionar la importancia que tiene la CAPAMA para Acapulco, pues si no se maneja adecuadamente no habrá desarrollo turístico y económico, lo que impacta en el municipio y en todo el estado.
A pregunta expresa sobre si los cambios constantes de directores en el organismo será posible concretar el proyecto de saneamiento de la paramunicipal con una inversión multianual, Aysa Neme opinó que se debe establecer una agenda en esa dirección porque “es un proceso largo y debe tener siempre las voluntades”, del gobernador y el presidente municipal.
Agregó que “ahorita hay soluciones, pero podría llegar haber una carencia total en el agua” si no se establece la agenda y se cumple el propósito de sanear la infraestructura y la administración del organismo.
Recordó que el agua es un recurso de importancia mundial “y es muy importante hacer conciencia en Acapulco de esta parte del agua para lograr tomar esa agenda, no basada en un director con voluntad como lo estoy yo o la presidenta municipal Adela Román que tiene la voluntad, sino como una urgencia de los ciudadanos para llevar a cabo la reestructura de un organismo tan importante que da un servicio sumamente vital”.
El Inegi y la realidad
El director de la paramunicipal sostuvo que de acuerdo con el Inegi el 98 por ciento de la población de Acapulco tiene “cobertura” del servicio de agua potable, pero la realidad es que hay “miles” de protestas de ciudadanos que demandan el servicio y sólo el 70 por ciento de la ciudad “históricamente no ha tenido problemas de dotación de agua”.
Aysa Neme explicó que la falta del servicio de agua potable es “itinerante” pues en ocasiones el problema del desabasto de agua ocurre por una fuga, como sucedió en la Progreso, donde la colonia tiene el servicio, pero hay una parte que no debido a las fugas, otro problema son quienes manipulan las válvulas o los ciudadanos que intencionalmente modifican la red.
El director indicó que la situación actual de la CAPAMA es similar a la que atraviesan muchos organismos operadores de agua en el país, pero la “gran ventaja” que se tiene es que las fuentes de abastecimiento del agua, “ese es un problema menor, pero es mayor en el esquema social”.
Agregó que el reto de las constantes manifestaciones por la falta del servicio de agua potable es que deben atenderse de una en una y revertirlas a procesos positivos para que se dé respuesta satisfactoria a los vecinos y estos contribuyan con el pago del servicio al organismo.
“Lo que encuentro es un Acapulco donde la gente dice ‘me llega mi recibo, pero no tengo el servicio’ y algunos de muy buena fe así lo hacen y algunos utilizan ya esa forma para sacar alguna ventaja en el pago y el tema no es no contamos con buena infraestructura, dice la gente y por eso a los funcionarios no se les exige un servicio de calidad para los ciudadanos, mi objetivo es romper todo esto para que se de un servicio de calidad para que los ciudadanos sean consiente de lo vital del líquido y pueda pagar con gusto el servicio”.
De acuerdo con el Inegi, dijo el director, la red del servicio de agua potable es del 98 por ciento en el municipio, pero “se nota que hay un reclamo de la sociedad muy marcado por el reparto del agua”, por lo que “el siguiente paso es meter orden” para que el 98 por ciento de la población que cuenta con la red, reciba agua “con un buen servicio”.
“El problema que tenemos de agua, es un problema complejo en su parte social, obsoleto en su parte de infraestructura, pero afortunadamente con una solución técnica porque existe el agua y hay el agua necesaria”.
Sostuvo que la CAPAMA tiene más agua de la que necesita el municipio, pero en el proceso de la distribución, debido a las fugas y tomas clandestinas se pierde el líquido; puso como ejemplo que las tuberías de distribución rápida tienen “hoyos y miles de mangueras”.
Del problema de las aguas residuales y los escurrimientos a la bahía de Acapulco y en la zona Diamante, el director indicó que se trata de regularizar todos los colectores que conducen aguas negras para que no tengan desbordamientos que afecten a la bahía.
La quiebra
José Ramón Aysa informó que recibió la CAPAMA en quiebra, “este organismo recibe menos dinero del que necesita para operar cada mes”, los gastos mensuales son de 60 o 70 millones y los ingresos son de 30 a 40 millones de pesos, lo que representa un déficit de 30 a 40 millones de pesos “que redunda en un mal servicio”.
Indicó que se arrastran adeudos por mil 500 millones de pesos con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), con el Instituto de Seguridad Social de los Servidores Públicos del Estado de Guerrero (ISSSPEG), con la Conagua, con el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), con el sindicato, juicios laborales ya perdidos con sentencias para pago, créditos demandados.
El mal servicio a la población se manifiesta en que no puede atender correctamente las fallas en la infraestructura, sólo aplican parches momentáneos que pueden presentar otra falla, no se paga puntualmente el servicio de energía eléctrica.
Pidió a los ciudadanos que si reciben el servicio que paguen por éste a la paramunicipal, pues el 70 por ciento de la población que sí recibe el servicio no es puntual con sus pagos.
Para el saneamiento financiero de la CAPAMA, informó el director que se tienen mesas de trabajo con los distintos organismos públicos con los que se tienen adeudos para buscar qué mecanismos ayuden a la disminución de la deuda porque “no puede haber condonación”.
En las mesas de trabajo federales participan las secretarías de Hacienda, Gobernación, Sedatu, Conagua y CFE y en lo local con el ISSSPEG.
Aysa Neme indicó que debido a los adeudos con el ISSSPEG en la paramunicipal hay 300 trabajadores que no se han jubilado por la falta de pagos.
Del amparo que ganó la CAPAMA para que la CFE no corte el suministro de energía eléctrica por el incumplimiento de pago por el consumo de energía, el director explicó que el mismo está condicionado a que la paramunicipal haga abonos a la CFE.
Indicó que lo que se abona a la CFE son de 6 a 7 millones de pesos cada mes, porque si pagan todo lo que corresponde por consumo de energía eléctrica, la paramunicipal se quedaría sin margen de maniobra.
Texto: Daniel Velázquez / Foto: Jesús Trigo
