Adán Ramírez Serret
¿Qué pasa cuando alguien cercano, querido, muere? Cuando una parte de nuestra vida, de nuestro ser se evapora de un momento a otro, ¿cómo enfrentar el hecho absurdo de que alguien próximo a nosotros, de hecho idéntico, con capacidad de pensar y sentir, desaparece en el lapso de unos segundos? Algunos, como escribe Jérôme Ferrari (París, 1968), en su más reciente novela, A su imagen, caen, o intentan estar, en la cómoda posición de la resignación; ni modo, se fue y la vida es así; pero la gran mayoría de seres humanos no nos conformamos con olvidar, y reconstruimos lo más fiel posible, a aquella persona que se ha ido para siempre.
A su imagen cuenta la historia de una joven corsa que pierde la vida en un accidente en la carretera. Debe volver a su casa tras trabajar tomando fotos en una boda, pero se encuentra con un amigo, se va a tomar un trago hasta las cinco de la mañana, vuelve al hotel, no tiene sueño, decide volver a su casa a esa hora y termina ahogada en el fondo de un barranco.
Así comienza la novela, con aquella muerte, e inicia la reflexión sobre la muerte en los pensamientos durante el funeral, de la persona que más la entendió, y quizá, quien más la quiso, su padrino.
Es el espectacular inicio, como una especie de liturgia, pues cada capítulo está precedido por distintos versículos y oraciones de la misa de difuntos y otras oraciones. El padrino de Antonia, un hombre que se convirtió en creyente, en cura para salvar su vida emocional, comienza a recordar a Antonia, su pasión por la fotografía y cómo fue él quien la incitó a que se volviera fotógrafa, regalándole una fina cámara.
La reconstrucción de Antonia se va transformando en una reflexión sobre el fotoperiodismo: ¿cómo narrar la violencia?, al recordar al célebre fotógrafo, Patrick Chauvel en sus incursiones en la guerra de Libia, en donde ve y fotografía a hombres en el momento de morir.
El vínculo entre Antonia y este fotógrafo, viene a partir de voyerismo, pues la primera foto que satisface a Antonia, es una que le hace a un chico que le gusta y se atraviesa un hombre, y el chico lo golpea y ella retrata el momento. Siente una gran excitación cuando revela la foto y ve captado el momento preciso de la violencia. Le impacta tanto esta foto, que se hace novia de este chico explosivo, que se hace líder del FLNC, el movimiento nacionalista corso.
El ejercicio de ir y venir, por la historia de Córcega, por la guerra de Libia, en Trípoli, y por los diferentes momentos de la vida de Antonia, dan la impresión, precisamente, de ir revelando una fotografía, la de la imagen de Antonia, que en sus relieves, define la historia de un país y el hecho doloroso de una muerte temprana.
A su imagen, es también, la relación entre la fotografía y la literatura, una reflexión sobre la nostalgia de un hecho, una imagen congelada en el pasado a la que nunca se puede volver, y una puesta en escena de la literatura, que mediante palabras intenta reconstruir, siempre de manera fallida, la desaparición absurda de una persona, de la que tan sólo quedan imágenes, pensamientos y palabras en las mentes de quienes la quisieron.
Jérôme Ferrari, A su imagen, Barcelona, Libros del Asteroide, 2020. 224 páginas.
