Chilpancingo, Guerrero, 22 de abril de 2022. Unos 80 integrantes de la sección 12, del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación para Adultos (SNTEA), marcharon en la capital para exigir respeto a su contrato colectivo de trabajo, el cual “ha sido violentado”.
A las 3:30 de la tarde, los manifestantes llegaron a las a oficinas del Instituto Estatal para la Educación de Jóvenes y Adultos Guerrero (IEEJAG), a las cuales pertenecen, ubicadas en el centro de la capital, y portaron lonas en las que se leían sus demandas, entre ellas, el pago de prestaciones.
Después, el contingente avanzó en marcha por la avenida Ignacio Ramírez, subieron por la calle Antonia Nava de Catalán y llegaron de nuevo al punto de partida.
El secretario general de la sección 12 del SNTEA, Ausencio Venegas Munivez, informó que exigen el respeto al contrato colectivo de trabajo, el cual “ha sido violentado” y que beneficiará a 198 trabajadores.
Contó que desde el 25 de junio de 2021, el Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA) les adeuda el pago de prestaciones laborales desde el inicio de la pandemia.
“La directora general del INEA, Teresa Guadalupe Reyes, no se ha dignado a dar cumplimiento al pago de los trabajadores. Ese es el reclamo en todo el país. Ni hacer revisión de las cláusulas del contrato colectivo de trabajo”.
El dirigente solicitó a Teresa Guadalupe Reyes que atienda al Comité Directivo Nacional, en las mesas de negociación por la revisión contractual; que otorgue el pago de prestaciones del convenio con fecha 25 de junio de 2021; incremento salarial y capacitación para los trabajadores del SNTEA.
“Ese dinero no llega del INEA para que la directora del IEEJAG, Haydee Mares Galindo, pueda entregar este recurso a los trabajadores”, precisó Ausencio Venegas.
Los manifestantes también solicitaron que la institución autorice los movimientos escalafonarios en el país y estado.
Los trabajadores llegaron nuevamente a las oficinas del IEEJAG y dijeron que van a estar en comunicación con el Comité Directivo Nacional, para saber si hay una respuesta por parte de las autoridades federales. Después, se retiraron del lugar.
Texto: María Avilez Rodríguez / Foto: Jesús Eduardo Guerrero
