Fotonota: Misiles rusos impactaron ayer en Kramatorsk, en el este de Ucrania, en una ciudad que es una base clave de las operaciones militares ucranianas, en medio de advertencias de Kiev de que Moscú está iniciando una nueva ofensiva en la guerra de 11 meses.
El ataque se produjo horas antes de que se esperaba que el presidente Vladimir Putin de Rusia reuniera apoyo interno para su invasión de Ucrania en un discurso en el aniversario del triunfo soviético sobre los nazis en Stalingrado, una batalla decisiva de la Segunda Guerra Mundial y que muchos los rusos lo ven como un símbolo del heroísmo en tiempos de guerra, según información de The New York Times.
Los ataques rusos se están intensificando en Kramatorsk, un antiguo centro de comando para el ejército ucraniano y un escenario para la defensa de Ucrania de la ciudad de Bakhmut, que Rusia está más cerca de capturar después de meses de brutales combates. La caída de Bakhmut sería la primera victoria militar significativa de Moscú desde el verano, aunque ha tenido un costo enorme en vidas rusas y ucranianas.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski dijo que una gran acumulación de tropas rusas en las partes ocupadas del este de Ucrania, junto con un fuerte aumento de los ataques de artillería en el este, señala el comienzo de una nueva ofensiva rusa. El miércoles por la noche, al menos tres personas murieron y más de una docena resultaron heridas cuando un cohete se estrelló contra un complejo de apartamentos de cuatro pisos en Kramatorsk, convirtiendo gran parte del edificio en ruinas humeantes.
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