Ciudad de México, 28 de diciembre 2017. El panorama para la inflación se ha tornado más complejo e incluso, su desaceleración llevará mayor tiempo que lo estimado, según la minuta de la reunión más reciente de política monetaria del Banco de México (Banxico) divulgada este jueves.
Según el informe, para la mayoría de los cinco integrantes de la Junta de Gobierno del Banxico, la trayectoria de “desinflación” enfrenta retos considerables, sobre todo por la depreciación que ha visto el peso frente al dólar de Estados Unidos –que se ha llegado a cotizar hasta en 20 pesos con 30 centavos.
El peso mexicano ha ingresado en una nueva espiral de volatilidad, asociada en gran medida a la incertidumbre en torno a la actual renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y a la normalización de la política monetaria en Estados Unidos.
“Dados los choques que la han afectado de manera reciente, todos los integrantes consideraron que el balance de riesgos para la inflación se ha deteriorado y es al alza”, explicó el documento de la reunión del pasado 14 de diciembre.
El Banxico estima ahora una convergencia más lenta de la inflación hacia su objetivo permanente del 3 por ciento, con un diferencial de un punto porcentual arriba y abajo de esa cifra.
La entidad estima que el Indice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) alcanzará su objetivo hasta finales del 2018 y fluctuará alrededor de ese nivel en 2019.
Un integrante de la Junta de Gobierno del Banxico, que por regulación interna no se identifica, consideró incluso que es muy probable que la inflación en México se mantenga por arriba del 4 por ciento durante la primera mitad de 2018.
La inflación interanual en México repuntó hasta la primera quincena de diciembre a un 6.69 por ciento, la segunda más alta en 16 años.
La aceleración del índice se debe a circunstancias adversas que han alentado una depreciación del tipo de cambio, un aumento en las tasas de interés, así como por diversos choques de oferta, además de la prevalencia de importantes riesgos internos y externos.
El pasado 14 de diciembre, la entidad decidió elevar la tasa clave de interés a un 7.25 por ciento desde un 7 por ciento, en un intento por contrarrestar la aceleración de los precios.
Se trató de la primera reunión de la Junta de Gobierno encabezada por el nuevo gobernador del Banxico, Alejandro Díaz de León, quien reemplazó en el cargo a Agustín Carstens.
En este encuentro también estuvo presente el nuevo secretario de Hacienda, José Antonio González Anaya, quien asumió el cargo el 27 de noviembre pasado, en sustitución de José Antonio Meade, aspirante presidencial por el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El pasado 26 de diciembre, las autoridades financieras mexicanas anunciaron recursos adicionales para subastar en el mercado cambiario, debido a un deterioro en las operaciones en medio de un nuevo período de depreciación de la moneda.
El peso mexicano inició la sesión de este jueves con una apreciación de 0.3 por ciento o 5.9 centavos, al cotizar alrededor de 19.63 pesos por dólar, de acuerdo con el banco de inversión Base; sin embargo, desde la sesión del miércoles, el dólar había roto la barrera de los 20:30 pesos.
Texto: Xinhua / Redacción / Foto: Cuartoscuro
