Chilapa, Guerrero, 7 de enero de 2018. Las autoridades y cuerpos de seguridad en vez de ser apoyo perjudican a la ciudadanía, señaló el obispo de la diócesis de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, en referencia al caso de los siete jóvenes desaparecidos en Chilpancingo, presuntamente a manos de policías municipales.
En declaraciones al finalizar la misa en la catedral de Chilapa, dijo que los cuerpos de seguridad deben de desempeñarse como servidores públicos a beneficio de la sociedad y que “no los queremos como enemigos”.
Sin pregunta de por medio, sobre la desaparición de un aspirante del PRI a la alcaldía de San Miguel Totolapan y su hijo, y del enfrentamiento en los Bienes Comunales de Cacahuatepec de Acapulco, Rangel Mendoza dijo que lamentablemente la violencia continúa en el estado y que “el agua está media revuelta en Guerrero”.
Llamó a que en este año electoral la ciudadanía escoja personas que en verdad les ayuden y pidió ánimo para enfrentar el alza de los precios de la canasta básica a causa del gasolinazo.
Texto y foto: Luis Daniel Nava