El eje emocional de la elección es el miedo

“El nuevo PRI es el nuevo PAN”, afirma Ebrard, y explica que, ante López Obrador, Meade y Anaya están actuando como lo hizo en 1988 el dictador Augusto...

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11 febrero,2018 7:35 am
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“Es un referéndum entre la expectativa de cambio y el miedo”, puntualiza en entrevista con Proceso Marcelo Ebrard, quien fuera aspirante presidencial en 2012, y advierte que el panista Ricardo Anaya, apoyado por PRD y MC, y José Antonio Meade, postulado por el PRI, Partido Verde y Nueva Alianza, representan el mismo modelo que se instauró en México hace tres décadas y ya está agotado

Álvaro Delgado y Arturo Rodríguez / Agencia Proceso
Foto: Cuartoscuro

Ciudad de México. Marcelo Ebrard ha vuelto al país y a la Ciudad de México, que gobernó un sexenio, tras una “persecución política” de los gobiernos de Enrique Peña Nieto y de Miguel Ángel Mancera, su sucesor.

“No lo digo en plan soberbio, pero soy el político que más ha sido vigilado por dos instancias al mismo tiempo: la local y la federal”, sostiene Ebrard en una oficina próxima al Zócalo, desde donde Mancera le imputó fallas y sobrecostos en la Línea 12 del Metro, que en marzo de 2014 fue cerrada parcialmente durante meses y por lo que no hay ni un proceso legal.

“No tengo ningún procedimiento administrativo ni mucho menos penal, ni por la Línea 12, ni por la casa de Río de Janeiro que tanto se manejó, ni por mis ingresos, ni por mi familia”.

–¿Está limpio? –se le pregunta

–Si no, ¿cómo estoy aquí? Además, no creo que nadie me pueda decir que fue porque simpatizan conmigo. Es porque no se encontraron elementos en mi contra que justificaran las afirmaciones que se hicieron. Si no, yo no podría estar en México y menos haciendo política de oposición.

Y es que Ebrard ha vuelto a la acción política para fortalecer el proyecto presidencial de Andrés Manuel López Obrador, quien le encomendó armar la estructura de defensa del voto en la primera circunscripción electoral, que integran estados del pacífico y norte del país, con Jalisco como el más complejo, siendo ya el tercer padrón nacional.

“Es un referéndum entre la expectativa de cambio y el miedo”, puntualiza quien fuera aspirante presidencial en 2012, y advierte que el panista Ricardo Anaya, apoyado por los partidos de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadano (MC), y José Antonio Meade, postulado por el PRI, Partido Verde y Nueva Alianza, representan el mismo modelo que se instauró en México hace tres décadas y ya está agotado.

“El nuevo PRI es el nuevo PAN”, afirma Ebrard, y explica que, ante López Obrador, Meade y Anaya están actuando como lo hizo en 1988 el dictador Augusto Pinochet en el plebiscito de Chile, porque “el eje emocional de esta elección es el miedo”.

Subraya: “Ellos están siguiendo la estrategia de Pinochet: Si votas en el referéndum a favor de la democracia va a haber desorden. Es el cambio contra miedo o esperanza contra miedo”.

En amplia entrevista con Proceso la tarde del lunes 5, Ebrard no oculta su satisfacción por haber vencido a los dos políticos que, asegura, más lo atacaron desde el 2012, cuando dejó la jefatura de gobierno de la capital del país.

De Mancera, a quien acusa de hacer una alianza con el gobierno de Peña, dice: “Miguel Ángel pensaba que iba a ser candidato del PRD a la Presidencia y acabó donde está”.

–¿Dónde está?

–¡Pues no está!

–¿En el limbo?

–No diría en el limbo. Es jefe de gobierno, pero no está. Dicen que lo están invitando a jugar diferentes roles en el Frente. No sé si va a pasar o no va a pasar, pero no fue candidato a la Presidencia.

Sobre Miguel Ángel Osorio Chong, quien como secretario de Gobernación operó para que Ebrard no se convirtiera en diputado federal, celebra que no haya sido candidato presidencial priista. Y en cuanto al PRD, cuyos grupos impidieron a Ebrard ser su presidente, sostiene que en seis años este partido cayó de más de 30 puntos de preferencia a 6 o 7 y ahora se alía al PAN. Y vaticina: “El PRD es un sector del PAN y le va a ir muy mal”.

Diego tiene razón

Con una larga trayectoria política como priista al lado del ya fallecido Manuel Camacho Solís, quien fuera regente en el sexenio de Carlos Salinas y diputado federal “independiente” postulado por el Partido Verde en 1997, Ebrard se unió a López Obrador cuando, en la elección del 2000 en la capital, declinó a su favor siendo candidato del desaparecido Partido del Centro Democrático.

En 2012, al no ser favorecido por encuestas para ser candidato presidencial, volvió a apoyar a López Obrador y, en la capital, a Mancera. Tras la elección, con Peña en la Presidencia de la República, quiso presidir el PRD, ya distanciado de su sucesor.

Es ahí cuando comienza la ruptura con el PRD, sobre todo después de que éste avaló el Pacto por México, que él rechazó, y que implicó la renuncia de López Obrador a ese partido del que fue fundador.

En la entrevista, Ebrard confirma lo que el panista Diego Fernández de Cevallos reveló a Proceso en su edición 2152, en el sentido de que él evitó “una felonía” de Vicente Fox durante su sexenio contra López Obrador en vísperas de la elección de 2006: “Es verdad lo que está diciendo.”

Y es que, ratifica, él tuvo conocimiento de que, por órdenes de Fox, se ofreció a Gustavo Ponce, secretario de Finanzas de López Obrador y procesado por lavado de dinero, salir de la cárcel a cambio de que implicara a éste en actos de corrupción.

–¿Específicamente qué le ofrecieron a Ponce para que dijera qué?

–Lo que querían era ofrecerle libertad en concreto a cambio de que dijera que Andrés Manuel había ordenado que hiciera A, B y C, casi hasta ir a Las Vegas. Detalle al cien de lo que le estaban pidiendo no lo tuvimos, pero era más o menos esto. ¿Para qué? Para golpear a López Obrador.

–Casi en la elección.

–Prácticamente en la elección.

“Es correcto lo que él (Fernández de Cevallos) dice. Así es como se enteraron, que sabíamos y que teníamos evidencias sobre ello. Era una bajeza increíble. Si se hubiese llegado a dar, se publicita en plena campaña, habría sido tremendo. Finalmente, no lo hicieron, pero estaban en esa directriz”.

–Dice Fernández de Cevallos que fue Fox. Sabe de cierto que fue así?

–Sin duda alguna. Fox era obsesivo para, por todos los medios, acabar con todo vestigio de López Obrador.

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