Texto: DPA / Erika P. Bucio / Agencia Reforma/ Foto: Twitter
Caracas, venezuela, 27 de marzo de 2018. El músico y director venezolano José Antonio Abreu, fundador del Sistema de Orquestas Infantiles y Juveniles que creó una opción de desarrollo artístico para millones de jóvenes, murió el sábado a los 79 años tras una larga enfermedad, informaron sus allegados.
Abreu fue un economista de profesión y laureado compositor e intérprete de piano, clavecín y órgano, además de director de orquesta.
El presidente Nicolás Maduro lamentó la muerte y agradeció su aporte a la labor social de la música. “Trascendió el maestro Abreu. Gracias por siempre por todo lo que nos diste”, dijo en un encuentro en la Casa de Gobierno.
El laureado compositor y gerente cultural fue reconocido en el mundo entero por sus esfuerzos por llevar la música a todos los estratos de la sociedad, creando un modelo que ha sido replicado en otros países.
Abreu nació en la localidad occidental de Valera, el 7 de mayo de 1939 y desde joven mostró habilidades para la música.
Estudió música en Caracas a fines de los años de 1950 y luego se tituló en economía en la Universidad Católica Andrés Bello.
En 1967 recibió el Premio Nacional de Música Sinfónica por sus habilidades como compositor. Entre 1989 y 1995 se desempeñó como ministro de la Cultura, vicepresidente y director del desaparecido Consejo Nacional de la Cultura (Conac).
El Sistema de Orquestas Infantiles y Juveniles fue fundado por Abreu en 1975 con el objetivo de sistematizar la instrucción y la práctica colectiva e individual de la música, además de presentar una opción para sacar de la pobreza a millones de jóvenes.
El proyecto ha perdurado por décadas y superado diferencias ideológicas de los gobiernos.
Abreu fue creyente en el poder transformador de la música: “El sistema es un proyecto social porque aspira a aplicar la música al desarrollo del hombre, y nacional porque aspira a que todo el país participe de él”, dijo en una reciente entrevista.
Abreu recibió varios reconocimientos nacionales durante su carrera, entre ellos el Premio Príncipe de Asturias de las Artes.
El director de orquestas Gustavo Dudamel, quien fue formado en el sistema musical, lamentó la muerte de Abreu. “Con todo mi amor y eterna gratitud a nuestro padre y creador del sistema”, dijo a través de Twitter.
Llevó la música a proyectos sociales
Con aquella red de orquestas y coros juveniles e infantiles de Venezuela, que creó en 1975, el compositor y director de orquesta, que antes fue diputado, asesor económico y ministro de Cultura en Venezuela, “cambió la manera de hacer música clásica”, sintetiza el compositor y director de orquesta mexicano Arturo Márquez, autor del célebre Danzón núm. 2, con su fusión de la música caribeña y de concierto, se volvió casi un himno de El Sistema desde 1995.
Lo que Abreu hizo distinto fue llevar la música a proyectos sociales. “Lo llamaba democratizar la música, el arte”, exaltó Márquez. El maestro Abreu repetía que la cultura para los pobres no puede ser una pobre cultura.
“La manera cómo enseñaba por medio de prácticas grupales, de niños y jóvenes, allá en Venezuela se iban creando nuevas técnicas de enseñanza”, dijo el compositor.
Un legado visible en jóvenes como Gustavo Dudamel y Edison Ruiz pero sobre todo, dijo, en la réplica de El Sistema en otros países. Márquez impulsa en Morelos las agrupaciones musicales comunitarias. “Es una inspiración para muchos de nosotros”.
Abreu logró llegar a un millón de niños y jóvenes con El Sistema, financiado por el gobierno y galardonado en 2008 con el Premio Príncipe de Asturias. Un proyecto que mereció el elogio de directores como Claudio Abbado y Simon Rattle.
“Logró eso y mucho más”, sentenció Márquez.
