Abraham, de 13 años, aquejado por el mal, espera donación de médula

Después de dos estudios, le diagnosticaron leucemia aguda mieloide, “que es la más agresiva”. Le dieron la primera quimioterapia y el personal del hospital le pidió tener fuerza,...

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16 febrero,2018 8:42 am
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Acapulco, Guerrero, 16 de febrero de 2018. Hace siete meses, Abraham de 13 años empezó su lucha contra el cáncer. Es uno de los 40 casos que recibió el año pasado el Instituto Estatal de Cancerología (Iecan), de los cuales el 30 por ciento son de leucemia.

En el Día Internacional de la Lucha contra del Cáncer Infantil, la madre de Abraham, Leticia Hipólito García, invitó a la población a ser donadores voluntarios de plaquetas y sangre para ayudar a los menores a enfrentar la enfermedad.

La mortalidad por cáncer en menores de 18 años en Guerrero según cifras de 2014, es de 4.9 por cada 100 mil habitantes; la incidencia de cáncer es de más del 12 por ciento por cada 100 mil habitantes.

Ese año, de acuerdo con las cifras de la Secretaría de Salud estatal, hubo 14 muertes de menores en edad escolar por leucemia, una tasa del 1.86 por ciento por cada 100 mil habitantes y por linfomas tres casos, lo que representa una tasa del 0.40 por ciento por cada 100 mil habitantes.

En edad preescolar, por leucemia, en el 2014, que es el año con cifras concretas, se registraron 12 fallecimientos por esta enfermedad y en edad infantil fueron tres casos.

En causas de muerte por cáncer la leucemia ocupó el tercer lugar en menores en edad escolar y en preescolar el cuarto sitio.

La madre de Abraham, el segundo de cuatro hijos, Leticia Hipólito había escuchado la palabra leucemia, que era cáncer y pensó que no había cura, “nunca pensé que en mis hijos iba haber algo así”. Ahora sabe que si lo hay pero que son cinco años de tratamiento y no faltar a ninguna de sus consultas.

Los primeros síntomas de Abraham fue dolor de rodillas, después le salieron manchitas rojas y moretones, no tenía ganas de hacer nada y comenzó a tener periodos con fiebre. Un médico particular le dijo, después de un estudio, que estaba bajo de plaquetas; ingresó al hospital Donato G. Alarcón, donde lo internaron por dengue. A un mes de estar hospitalizado y no ver mejoría en su hijo, lo sacó con alta voluntaria, porque no le encontraron qué tenía.

Viajaron a la Ciudad de México, buscando una segunda opinión, pero la situación se complicó porque debía en el hospital 59 paquetes de plaquetas que le habían puesto a su hijo en el mes internado.

Tres días después de estar internado en la Ciudad de México lo dieron de alta, porque no tenían plaquetas suficientes para poner y le dieron una solicitud para que llegando a Acapulco fuera atendido en el Iecan.

Después de dos estudios, le diagnosticaron leucemia aguda mieloide, “que es la más agresiva”. Le dieron la primera quimioterapia y el personal del hospital le pidió tener fuerza, porque a lo mejor no aguantaba el tratamiento.

En enero fue calificado como apto para el trasplante de medula y este mes le harán el estudio a los parientes, para ver quién es compatible. La operación aproximadamente tiene un costo de 2 millones de pesos.

Leticia es ama de casa y su esposo peón de albañil, son de bajos recursos, el dinero para ir diariamente al Iecan es difícil para ellos.

Expuso que han tenido serias dificultades para conseguir las plaquetas que requiere su hijo, para evitar que tenga recaídas, así como estar expuesto a bacterias que le generen otros padecimientos. “Es muy difícil conseguir plaquetas porque no todos quieren donar, aunque les paguen, y para los niños muy enfermos son indispensables”.

El director del Iecan, Marco Antonio Jiménez López, informó que al año en el Instituto tiene entre 40 y 45 nuevos casos de cáncer, actualmente se atienden más de 200 pacientes en control.

El 40 por ciento de los casos son leucemias linfoblásticas, el 20 por ciento linfomas, el 13 por ciento tumores del sistema nervioso y el 5 por ciento son tumores sólidos.

Indicó que no tienen una cifra de cuántos niños al año fallecen, debido a que algunos no regresan a sus consultas y mueren en sus casas sin que los familiares reporten el hecho. Jiménez López estimó que el 30 por ciento de los casos que se atienden en el hospital fallecen.

Explicó que las causas de muerte de los menores son los sangrados e infecciones causados ambos por la baja de plaquetas en la sangre, por eso el llamado a la donación, principalmente de la sangre poco comunes para tener cuando los niños presentan una crisis y poder atenderlos con rapidez.

“Por eso la invitación a que la gente done sangre, sobre todo si se sabe poseedor de un tipo de sangre muy raro, que escuchen los llamados cuando escuchen uno para que acudan oportunamente para salvar una vida”.

Explicó que hay leucemias de alto riesgo, y en el Iecan se tiene la media a nivel nacional del 70 por ciento de pacientes que a cinco años se pueden llegar a curar. Las causas son principalmente genéticas, otros casos por pesticidas e insecticidas.

Marco Antonio Jiménez indicó que atender un cáncer infantil es de los más caros cada tratamiento tiene un costo entre los 700 a más del millón de pesos dependiente del tipo y tiempo del tratamiento. El Seguro Popular, con el seguro de gastos catastróficos, cubre entre 200 y 300 mil pesos del tratamiento; el resto lo cubre el Instituto.

Para ser donador de sangre en el Iecan se pide que sean mayores de edad, con peso mínimo de 50 kilogramos y no mayor a los 110, estatura mínima de 1.51 centímetros y tener buena salud en general. Además de no padecer epilepsia, hepatitis, sífilis, paludismo, cáncer, VIH-sida o enfermedades severas del corazón. Se tiene que acudir sin haber ingerido bebidas alcohólicas en las últimas 48 horas, no haber consumido ninguna droga en los últimos seis meses, no tener ningún tipo de cirugía en el mismo periodo, no haberse realizado tatuaje, perforación o acupuntura en los últimos tres años, en ayuno de cuatro horas, no haber ingerido medicamento en los últimos cinco días y mismos días después o antes del periodo menstrual, ni más de dos embarazos.

Texto: Mariana Labastida/ Foto ilustrativa/EFE

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