La sobreviviente de un ataque de Víctor Manuel Enríquez, Gloria Alejandra Mateos denuncia que a más de dos años el Poder Judicial de la Federación no resuelve un juicio de amparo, y si regresa al país quedaría en libertad. Pide a la presidenta de la Suprema Corte que no sea omisa en el caso
Acapulco, Guerrero, 16 de febrero de 2023. El ex trabajador del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), Víctor Manuel Enríquez Lezama, un agresor de mujeres que huyó a Estados Unidos después de golpear a su novia mexicana, ahora enfrenta cargos en aquel país donde golpeó a dos mujeres y busca que lo deporten para evadir nuevamente la justicia, mientras que acá en México el Poder Judicial de la Federación no le dicta sentencia.
Este miércoles, la sobreviviente del ataque de Enríquez Lezama ocurrido en abril de 2018, Gloria Alejandra Mateos Jiménez dio una conferencia de prensa para señalar que a más de dos años el Poder Judicial de la Federación no resuelve un juicio de amparo que por norma debía haber resuelto en seis meses.
Indicó que hace ocho meses, cuando acudió a preguntar del caso encontró la carpeta sepultada en un montón de expedientes.
Y pidió a la presidenta de la Suprema Corte de Justicia, la ministra Norma Piña Hernán-dez –la primera mujer en la historia de México que encabeza el máximo tribunal del país– que no sea omisa en atender este caso, pues “ya no sé qué hacer”.
Recordó que la dilación en esa resolución permitió que su agresor huyera a Estados Unidos para evadir la justicia mexicana y allá atacó a otras dos mujeres, caso que fue reportado en el diario Idaho Estate Journal y por el que está preso desde 2021, pero nuevamente busca evadir la justicia porque está en condición de ilegal y busca que lo deporten.
En conferencia de prensa afuera de los juzgados del Poder Judicial de la Federación ubicados en el bulevar Las Naciones, Gloria Alejandra Mateos relató que en 2018 tuvo una relación sentimental con Víctor Manuel Enríquez, pero la misma concluyó en abril después de poco más de 50 días porque trató de estrangularla y la golpeó hasta que la dejó inconsciente. A partir de entonces empezó a buscar justicia, y lo que encontró fue apatía de las autoridades que se negaron a tipificar el delito como tentativa de feminicidio, dejaron al agresor en libertad y a ella le otorgaron medidas cautelares.
En febrero de 2020, la jueza Tania Alfaro Zapata emitió una sentencia mediante la cual condenó al agresor a seis años y medio de prisión, una multa de 465 salarios mínimos y el pago de daños; la sentencia fue ratificada el 4 de noviembre de 2020 por el magistrado Raymundo Casarrubias Vázquez, actual presidente del Tribunal Superior de Justicia del estado.
El 9 de febrero el agresor recurrió al Poder Judicial de la Federación, solicitó un amparo al Tribunal Colegiado en materias penal y administrativa del 21 circuito de Acapulco, y así evadió la orden de aprehensión en su contra. Huyó entonces a Estados Unidos donde lo recibieron familiares en Salt Lake City y ayer el tribunal no había resuelto el caso, “lleva dos años y tres meses, su solicitud de amparo aún se encuentra en revisión”.
Con la demora de la justicia mexicana, el agresor nuevamente atacó a una mujer con quien tenía una relación sentimental en Estados Unidos, a quien también intentó ahorcar y la golpeó hasta dejarla inconsciente, también golpeó a la amiga de la novia pero fue detenido por policías estadunidenses quienes lo encarcelaron, pero Víctor Manuel Enríquez recurrió a una nueva estrategia para evadir la justicia; aceptó los cargos de los que se le acusa y de que está en condición de ilegal para que su condena se acorte y sea deportado a México, donde quedaría en libertad porque el Poder Judicial de la Federación no ha resuelto el caso en más de dos años.
“Estoy aquí, afuera del Tribunal Colegiado en materias penal y administrativa del 21 circuito de Acapulco, donde han retrasado todo, donde con su dilación al no negar aún el amparo que mi agresor inició el 9 de noviembre de 2020, insisto hace ya tres años, él no fue ingresado a la cárcel en Guerrero para que purgara su condena y tuvo todo el tiempo para irse de ilegal a Estados Unidos y reincidir, pero además ahora pretende regresar y temo que lo haga para hacer lo que no logró en abril de 2018 –cuando intentó estrangularla– todo porque este Tribunal Colegiado sigue sin negarle el amparo, todo eso ha causado que no tenga acceso a la justicia, una y otra vez me han revictimizado”.
Gloria Alejandra Mateos ayer 15 de febrero Día de la Mujer Mexicana solicitó que su caso no quede en la impunidad y que ella no sea una más en la estadística de mujeres víctimas de violencia. “¿Hasta cuándo los derechos humanos de mi agresor van a seguir siendo más valiosos que los míos? Habiendo un delito acreditado, una sentencia ratificada y un agresor reincidente, ¿cuánto tiempo más necesita este Tribunal Colegiado para negarle el amparo?”, preguntó.
Agregó que la sentencia de 2020 contra su agresor no puede hacerse efectiva porque está en proceso el juicio de amparo, y aunque actualmente esté preso en una cárcel de Estados Unidos cuando sea deportado quedará en libertad por la dilación del Poder Judicial de la Federación.
Narró que las consecuencias de los golpes que recibió de su agresor siguen manifestándose en su cuerpo y a más de cinco años del ataque todavía no hay justicia.
Texto: Daniel Velázquez / Foto: Jesús Trigo
