Según la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, la capital de Guerrero alcanza un porcentaje de 93.8%, apenas superada por Reynosa, con 96%; abajo de la capital guerrerense se ubican Puebla, Coatzacoalcos, Ecatepec y Villahermosa.
Ciudad de México, 16 de de enero de 2019. En el primer mes del gobierno de Andrés Manuel López Obrador la percepción de inseguridad bajó con relación a la de septiembre de 2018, encontró el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU), la vigésimo segunda que levanta el Inegi, esa percepción pasó de 74.9 por ciento en septiembre, a 73.7 por ciento en el último mes de 2018.
El Inegi mide trimestralmente el porcentaje de la población adulta que siente temor a ser víctima de un delito y considera que vivir en su ciudad es inseguro.
La percepción de inseguridad de diciembre es la más baja desde marzo de 2017, cuando registró 72.9 por ciento, sin embargo, es la octava más alta de las 22 encuestas realizadas.
Las ciudades con la sensación de inseguridad más alta fueron Reynosa, Tamaulipas, con 96 por ciento; Chilpancingo, Guerrero, con 93.8; Puebla, Puebla, con 93.4; Coatzacoalcos, Veracruz, y Ecatepec, Estado de México, con 93.4, y Villahermosa, Tabasco, con 92.3 por ciento.
A partir de junio de 2018, con el objetivo de proporcionar un dato oportuno sobre la victimización, se busca conocer la proporción de hogares en zonas urbanas víctima o con integrantes mayores de 18 años víctima de los delitos de robo y/o extorsión.
A nivel nacional, en 35.8 por ciento de los hogares en áreas urbanas, al menos uno de sus miembros fue víctima de los delitos de robo y/o extorsión.
Esta cifra se incrementa en la Región Oriente de la Ciudad de México y en Ecatepec de Morelos, al llegar a 54.2 y 54.1 por ciento, respectivamente.
El porcentaje de sensación de inseguridad de diciembre representa un cambio significativo respecto a septiembre de 2018 y con respecto a diciembre de 2017 (75.9 por ciento), agrega el Inegi en un comunicado.
En contraste, las ciudades con menor percepción de inseguridad fueron: San Pedro Garza García, Nuevo León; Mérida, Yucatán; Saltillo, Coahuila; Puerto Vallarta, Jalisco; Durango, Durango, y Los Cabos, Baja California Sur, con 23.1, 28.8, 30.5, 38.7, 39.5 y 42.3 por ciento, respectivamente.
La percepción de inseguridad entre hombres y mujeres continúa siendo significativamente mayor en el caso de las mujeres, donde en total el 77.99 por ciento de las encuestadas consideró que se sentía insegura al residir en su ciudad, mientras que los hombres acumulan un total de 68.55 por ciento de los que respondieron a dicha encuesta.
En el caso de la Ciudad de México, un total del 88.41 por ciento de los encuestados residentes del norte de la capital, donde se considera a las alcaldías de Gustavo A. Madero, Iztacalco y Venustiano Carranza, opinan que vivir en esa zona es inseguro.
La zona sur es donde se perciben menores niveles de inseguridad, incluso por debajo del promedio nacional, y el total de 70.33 por ciento de los encuestados en las alcaldías de Benito Juárez, Coyoacán, La Magdalena Contreras y Tlalpan consideran que vivir en dichas zonas es inseguro.
Además, de los hogares consultados para el periodo junio-diciembre de la ENSU, el 35.84 por ciento respondió que al menos uno de sus integrantes había sido víctima de un delito.
Baja desempeño de Marina, sube el del Ejército
La ENSU refleja un ligero aumento en la percepción de desempeño del Ejército, pero una disminución en el caso de la Marina, la Policía Federal y la Gendarmería.
Al tiempo que se discute la Guardia Nacional, el Ejército pasó de tener 82.4 por ciento en percepción de desempeño “muy o algo efectiva” en septiembre, a 82.6 por ciento en diciembre.
La Marina tuvo 85.8 en septiembre y 85.1 en diciembre; la Policía Federal pasó de 64.4 a 63.3 por ciento; y la Gendarmería Nacional, registró 69.2 el trimestre pasado y 68.9 en diciembre.
En los primeros 15 días del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el 73.7 por ciento de la población mayor de 18 años consideró que vivir en su ciudad es inseguro, de acuerdo con la ENSU.
Los resultados del vigésimo segundo levantamiento de la ENSU revelan que, durante el cuarto trimestre de 2018, el porcentaje de la población que mencionó haber visto o escuchado conductas delictivas o antisociales en los alrededores de su vivienda fue:
Consumo de alcohol en las calles (64.8 por ciento), robos o asaltos (65.2 por ciento), vandalismo en las viviendas o negocios (49.6 por ciento), venta o consumo de drogas (45.6 por ciento), disparos frecuentes con armas (42.8 por ciento) y bandas violentas o pandillerismo (33.3 por ciento).
En cuanto al cambio de rutinas o hábitos, 61.4 por ciento de la población de 18 años y más, residente en las ciudades objeto de estudio, manifestó que durante el cuarto trimestre de 2018 modificó sus hábitos respecto a “llevar cosas de valor como joyas, dinero o tarjetas de crédito” por temor a sufrir algún delito.
Además, 56.2 por ciento reconoció haber cambiado hábitos respecto a “permitir que sus hijos menores salgan de su vivienda”; 53.2 por ciento cambió rutinas en cuanto a “caminar por los alrededores de su vivienda, pasadas las ocho de la noche” y 34.6 por ciento cambió rutinas relacionadas con “visitar parientes o amigos”.
Con respecto al tercer trimestre de 2018 se tiene un descenso estadísticamente significativo de 4.4 respecto a cambio de hábitos como llevar cosas de valor, de 2.6 puntos porcentuales respecto a caminar por los alrededores de su vivienda, de 3.6 puntos porcentuales respecto a visitar parientes y de 4.9 respecto a permitir que menores salgan de su vivienda.
Durante el segundo semestre de 2018, en 15.8 por ciento de los hogares de las ciudades de interés, al menos un integrante del hogar sufrió robo o asalto en la calle o en el transporte público, mientras 13 por ciento de los hogares fue víctima de robo parcial de vehículo, y en 12.4 por ciento de los hogares al menos un integrante del hogar sufrió extorsión.
Texto: Redacción y Antonio Baranda / Agencia Reforma / Foto: Agencia Reforma
