El anuncio de estado de emergencia en Chile supuso un despliegue militar que ha dejado 23 muertos y mil 300 heridos desde el inicio de las protestas, el 17 de octubre. El gobierno y la oposición avanzan hacia un acuerdo sobre la reforma tributaria. El 78% de los chilenos reprueba la gestión del presidente en la crisis, según un sondeo.
Santiago, Chile, 6 de noviembre de 2019. El presidente chileno Sebastián Piñera defendió su gestión de la crisis desatada por las masivas protestas contra la desigualdad social, confiando en que, si finalmente la oposición lanza una acusación constitucional en su contra, saldrá exitoso de ella. “Por supuesto que voy a llegar al fin de mi gobierno”, aseveró en una entrevista concedida a BBC Mundo. Piñera gobierna desde 2018 para un periodo que se prevé concluya en 2022.
La oposición, que es mayoría en el Congreso chileno, sopesa presentar una acusación constitucional contra Piñera por considerar que abusó de su poder al declarar el estado de emergencia, lo que supuso un despliegue militar. De prosperar, sería cesado y podría hasta quedar inhabilitado para ejercer cargos públicos.
“Si alguien quiere hacer una acusación constitucional, está en su derecho, pero yo estoy absolutamente seguro de que ninguna va a prosperar porque la solución en democracia es respetar las reglas, no atentar contra la democracia pretendiendo desestabilizar a un gobierno que ganó las elecciones legítimamente”, sostuvo.
Piñera volvió a defender su decisión de declarar el estado de emergencia, en un país donde el golpe de Estado perpetrado por el general Augusto Pinochet contra el gobierno de Salvador Allende el 11 de septiembre de 1973 hace que la presencia de los militares en las calles sea un tema sensible.
No obstante, reconoció que en el marco del estado de emergencia se pudieron cometer abusos. Al menos 23 personas murieron, algunas a manos de las fuerzas de seguridad, y más de mil 300 resultaron heridos, de acuerdo con el Instituto Nacional de Derechos Humano que también ha denunciado torturas y otros abusos.
Piñera aseguró que “no habrá impunidad” ni para “los delincuentes que prendieron fuego al sistema de transporte, a supermercados y tiendas” ni para “los militares o policías que hayan hecho uso de la fuerza excesiva o cometido delitos”. “No aceptaré ningún tipo de violación de los Derechos Humanos”, aseveró.
Sobre las demandas de los manifestantes, que tomaron las calles el pasado 17 de octubre por la cuarta subida del precio del metro en pocos meses pero acabaron denunciando la desigualdad social, se ha mostrado comprensivo.
Por otro lado, el gobierno de Chile y la oposición están avanzando hacia un acuerdo sobre la reforma tributaria que permitiría aumentar la recaudación unos mil 100 millones de dólares (824 mil 600 millones de pesos), según ha informado ayer el diario local La Tercera.
Además, Piñera dio a conocer el programa ‘Levantemos tu pyme’, que ha descrito como “un nuevo proyecto en la agenda social” y que “beneficiará a cerca de 6.800 micro, pequeñas y medianas empresas que sufrieron en carne propia los efectos de esta brutal delincuencia, vandalismo y destrucción”.
El 78 por ciento de los chilenos reprueban la gestión del presidente del país, Sebastián Piñera, en la crisis derivada de las masivas protestas por la subida del precio del metro, frente al 16 por ciento de los consultados que respaldan al mandatario, según un sondeo.
En su encuesta de octubre, la Agenda Ciudadana Criteria pone de manifiesto el desplome de la valoración de la gestión del mandatario, que en septiembre contaba con el apoyo del 33 por ciento de los consultados y el rechazo del 55 por ciento.
Texto: Europa Press
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