Josefa González Blanco, próxima secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, reconoció que la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), estudio técnico que permite identificar impactos ambientales no estará listo para la fecha de la consulta.
Ciudad de México, 14 de noviembre de 2018. La consulta ciudadana del Tren Maya, prevista para el 24 y 25 de noviembre, se llevará a cabo sin prever los impactos ambientales que tendrá el proyecto, admitió Josefa González Blanco, próxima secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Durante su participación en el Primer Foro de Análisis de la Política Ambiental Mexicana, convocado por el Senado, reconoció que la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), estudio técnico que permite identificar impactos ambientales que tendrá la obra y las medidas de mitigación que se pueden implementar para reducir efectos negativos, no estará listo para la fecha de la consulta.
“Que no está la MIA del Tren Maya, no, estamos trabajando en ella. Vamos a hacer la consulta, esta consulta sin la Manifestación de Impacto Ambiental”, indicó.
Ésta, explicó, será sólo para conocer la opinión de la población sobre si aceptan o rechazan que se lleve a cabo el proyecto.
Por normatividad ambiental, toda Manifestación de Impacto Ambiental es sometida a un procedimiento de consulta pública.
Por lo anterior, la próxima Secretaria detalló que será tarea de la Semarnat evaluar y realizar las consultas nacionales que establece el marco jurídico aplicable al procedimiento de aprobación del impacto ambiental.
“La Semarnat emitirá la Manifestación de Impacto Ambiental y emitirá las recomendaciones necesarias que deban ser tomadas en cuenta para la conservación y protección y la conservación de los recursos naturales”, señaló.
Una vez que se ponga a consulta la MIA del Tren Maya, González Blanco aseguró que la información estará al alcance de los ciudadanos y se consultará a los pueblos indígenas en su lengua.
“Este proyecto será consultado en las comunidades. Los distintos mecanismos de consulta, información, serán integrados a un sistema de participación que será clave para asegurar el desarrollo del proyecto”, añadió.
Texto: Evlyn Cervantes, Agencia Reforma / Foto: Tren Maya (Facebook)
Pide AI a López Obrador
consultar a pueblos indígenas
El proyecto del presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, de construir el Tren Maya, una ruta turístico-comercial de mil 500 kilómetros por el sureste del país, debe ser consultado antes con los pueblos indígenas de la región, pidió hoy miércoles Amnistía Internacional (AI).
El tren pasará por los estados de Tabasco, Chiapas, Yucatán, Campeche y Quintana Roo, tocando entre otros puntos los famosos centros turísticos de playa de Cancún y Playa del Carmen o el sitio arqueológico de Chichén-Itzá, en la península de Yucatán.
“Las nuevas autoridades deben garantizar que este megaproyecto se llevará a cabo sólo si los pueblos indígenas potencialmente afectados han dado su consentimiento previo, libre e informado”, manifestó Erika Guevara Rosas, directora para las Américas en la organización defensora de los derechos humanos.
Guevara indicó que México ha firmado convenios internacionales que le obligan a realizar una consulta para determinar si los intereses y territorios indígenas pueden verse perjudicados con el proyecto de 7 mil 500 millones de dólares.
López Obrador, un político de centro-izquierda que asumirá el poder el 1 de diciembre, anunció que el 24 y 25 de noviembre hará una consulta popular para someter a votación de la ciudadanía en general este proyecto y otros de sus planes.
Sin embargo, las obras ya tienen fecha de inicio. El proyecto de Tren Maya, que recorrerá cinco estados y será uno de sus mayores proyectos de infraestructura, se pondrá en marcha el 16 de diciembre.
Ambientalistas han objetado que no se haya hecho un estudio de impacto ambiental, un requisito legal, ya que la ruta férrea pasará cerca de un área protegida, la reserva de la biosfera de Calakmul, donde hay una ciudad maya y bosques tropicales que forman parte de la Lista de Patrimonio Mudial de la Unesco.
Con este proyecto López Obrador quiere impulsar el desarrollo del sureste pobre del país.
Representantes del grupo indígena Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), que se alzó en armas en Chiapas en 1994 y después formó comunidades autogestionadas, han manifestado su rechazo.
“La consulta informada debe cumplir con los criterios y requerimientos de participación e información necesarios para la toma de decisiones, incluidos estudios de impacto ambiental, social y de ejercicio de derechos humanos”, pidió la representante de AI.
López Obrador afirma que hay mucho potencial turístico en toda la región y que el proyecto dará respuesta a las necesidades de desarrollo económico y social de sus habitantes.
Texto: DPA