Deben transparentarse todo tipo de recursos destinados a la cultura, reclama especialista

Las instituciones del ramo, tanto del estado como del municipio, deben “hacer el reclamo propio sobre el ejercicio de esos recursos; les pasan esos presupuestos por enfrente y...

206 0
13 octubre,2018 7:57 am
206 0

En los eventos organizados “a modo” y con premura puede haber “intereses políticos y económicos detrás”, señala el especialista Javier Reyes Martínez. Las instituciones del ramo, tanto del estado como del municipio, deben “hacer el reclamo propio sobre el ejercicio de esos recursos; les pasan esos presupuestos por enfrente y ellos no los administran”.
Acapulco, Guerrero, 13 de octubre de 2018. El especialista en marketing cultural y doctorante en Bienestar Social (con línea de investigación en derechos culturales) Javier Reyes Martínez cuestionó la realización apresurada de diversos eventos culturales en Acapulco las últimas semanas y cuyo origen, forma de asignación y financiamiento no se ha aclarado.
Además, y en caso de que dicho origen se encuentre en algún rubro de los recursos federales asignados por los diputados al estado en el Presupuesto de Egresos de la Federación de este año, dichos recursos deberían transparentarse, detallando cuánto y en qué se gastó el dinero.
Lo anterior, luego de que en esta semana iniciara el llamado Festival Cultural para Jóvenes y en las últimas semanas hubiera al menos cuatro eventos de diversa índole, compartiendo en común los logos de la Secretaría de Cultura federal y de la Cámara de Diputados de la LXIII Legislatura (que terminó en agosto pasado), así como del DIF estatal en el caso del evento que concluye hoy, y que tendría como sede el Faro Zapata, recinto a cargo de la Secretaría de Cultura estatal, y quienes serían los presuntos organizadores (El Sur, edición del 12 de octubre, 2018).
La única responsable visible de los eventos, la promotora cultural Citlali Guerrero Morales, fue consultada el miércoles pasado y adujo que “sólo propongo ciertos grupos para el programa, pero de lo demás no sabría decirte”, sin mencionar ante quiénes hace las propuestas ni los presupuestos que manejan ni quién los autoriza.
En breve charla electrónica a Boston, Estados Unidos, donde estudia, Javier Reyes Martínez comentó que “lo primero que veo es una opacidad en la administración de los recursos y que estos festivales culturales se estarían utilizando para ejercer dichos recursos de manera opaca; eso es lo que parece, vez un montón de festivales hechos a modo que no entiendes qué política cultural atienden”.
Quien además fungió en 2014 como presidente del Patronato Domingo Soler, que administra el centro cultural del mismo nombre, recordó que no es obligatorio que la Secretaría de Cultura organice cada actividad cultural ya que lo puede hacer la sociedad civil o incluso los políticos, pero en ese caso, “el tema sería ver de dónde provendrían los recursos, bajo qué criterios se están solicitando, cómo se están asignando, cómo se están utilizando, cómo se están distribuyendo y cuáles son los resultados”.
Es decir, “que no haya opacidad desde de dónde provienen los recursos, ni desde quién diseña el programa ni cómo y a quién se le entregan esos recursos”, ya que de lo contrario hay suspicacias “porque podemos pensar que hay intereses políticos y económicos detrás que no son claros”.
Por ello, aconsejó que “a todos estos organizadores, artistas, políticos interesados en este tipo de cosas, si lo están haciendo con toda la buena intención, quiero pensar que es así, que transparenten todo, que transparenten la administración de los recursos,  los objetivos, los resultados de las actividades o el tipo de línea de acción cultural atienden”.
Por otro lado, llamó a la atención al hecho de que “las instituciones de cultura,  tanto a nivel municipal como estatal, tienen que hacer el reclamo propio sobre el ejercicio de esos recursos; les pasan esos presupuestos por enfrente y ellos no los administran, por lo que pregunto, ¿dónde está la capacidad política para tomar esos recursos?”, recordando las carencias de la Secretaría de Cultura del estado en materia presupuestal de los últimos meses.
Otra cosa, dijo Reyes Martínez respecto a dichos festivales, “es que los que menos responsabilidad tienen son los artistas que participan y son contratados para las actividades, aquí más bien hay que preguntarle a los que están organizando estas actividades, a los asesores, quienes deberían hacer transparentes los recursos, y no a los artistas, que al final del día son contratados, que se les paga por un servicio, que se les pagan honorarios”.
–¿Sí crees en esa ingenuidad de los artistas que no saben quién los contrata y bajo qué circunstancias?
–Por supuesto que saben quiénes los contratan, por supuesto, pero no necesariamente tienen que saber los entretejes del diseño de los festivales, del programa o quién los está financiando; creo que en la mayor parte de los casos muchos no lo saben o tampoco lo quieren saber –reiterando que el tema de la transparencia está en los organizadores.
Texto: Óscar Ricardo Muñoz Cano / Foto: Tomada del Facebook de Javier Reyes M
 

In this article

Join the Conversation