La incursión de la UPOEG está provocando la violencia en territorio comunitario, afirma.
Chilpancingo, Guerrero, 4 de julio de 2019. Dirigentes del Movimiento por la Libertad de los Presos Políticos (Molppeg), expulsados de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria (CRAC-PC) de San Luis Acatlán, denunciaron ayer en conferencia de prensa en el Centro Nacional de Comunicación Social (Cencos), en la Ciudad de México, la ofensiva del gobierno estatal para desarticular a la organización de seguridad para fortalecer el paramilitarismo, en seguida el militarismo, e imponer después los proyectos mineros en la región.
Kenia Hernández, integrante del Molppeg, dijo que a eso obedece la persecución que están sufriendo actualmente ella, el ex asesor, Valentín Hernández Chapa y el promotor de la Policía Comunitaria en Ayutla, Arturo Campos Herrera, a quienes pretenden impedirles que hagan trabajo de base para frenar esa embestida.
Vía telefónica dijo que plantearon en conferencia de prensa con los medios de comunicación nacional, “el paramilitarismo y militarismo como estrategia del Estado para despojar a los pueblos, lo que trae como consecuencia presos políticos, persecución política, y desplazamientos forzado de los compañeros que están saliendo en defensa del territorio”.
Informó que planteó concretamente que el tema de la incursión y de la entrada de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) a territorio de la CRAC-PC, es algo que ellos ya venían previniendo desde hace aproximadamente un año, y que es lo que está provocando la violencia en el territorio comunitario.
Dijo que el 17 y el 18 de junio fue la primera irrupción de la policía de la UPOEG en San Luis Acatlán, que hubo violaciones a los derechos humanos porque se metieron a varias casas, “y después de que se estableció una alianza formal entre la CRAC y la UPOEG el domingo 30 de junio, la CRAC comenzó detenciones arbitrarias comportándose igual que la UPOEG, sin orden de cateo y sin orden de aprehensión entraron a la casa de Francisco Ramírez Estrada y lo detuvieron, sin más”.
Dijo que es la misma tónica que se sigue con el ex comandante de la Policía Comunitaria de la CRAC, Ulises Hernández, a quien ayer mantenían aislado e incomunicado, sin informar a su familia en dónde está, lo que es violatorio al reglamento de la CRAC porque este señala que a una persona, después de que ya fue enjuiciada en una asamblea comunitaria, se le puede mandar a hacer trabajo comunitario, “pero primero tiene que ser juzgada y después sentenciada y enseguida enviada a hacer trabajo comunitario”.
Denunció que en el caso de Ulises no ha sido ni juzgado ni sentenciado por una asamblea, “entonces estamos viendo violaciones al reglamento que vienen justamente después de la incursión de la UPOEG al territorio de la CRAC-PC”.
Dijo que todo esto crea un clima de violencia y de violaciones graves a los derechos humanos, “lo que va a traer como consecuencia que el Estado tenga la justificación de militarizar la zona”.
Agregó que en estas condiciones lo que urge es hacer trabajo de base en la CRAC, y que por eso están ejerciendo los actuales dirigentes que se han aliado con la UPOEG persecución en contra de Valentín Hernández, Arturo Campos y ella, para detenerlos o desplazarlos del territorio, afín de “amarrarlos de manos y de pies” para que les impidan hacer ese trabajo, “por eso tenemos órdenes de aprehensión verbales, así están actuando los que están al frente ahora de la casa matriz, en contra del reglamento”.
Informó que las decisiones las están tomando dos coordinadores, cuando el reglamento dice que deben de ser cinco, pero que no han tenido quórum para convocar a una asamblea regional en donde puedan designar a los otros tres coordinadores.
Texto y foto: Zacarías Cervantes
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http://devtest.suracapulco.mx/2019/07/03/narra-ex-coordinador-de-la-crac-pc-torturas-de-la-upoeg-y-pide-la-intervencion-de-la-cndh/
