Isaías Sánchez Nájera indica que el último caso sancionado fue la expulsión de un maestro de la Preparatoria 10 de Iguala, del que informó el rector de la UAG, Javier Saldaña Almazán, en marzo pasado.
Chilpancingo, Guerrero, 15 de enero de 2020. El magistrado presidente del Tribunal Universitario, de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Isaías Sánchez Nájera, informó que desde la creación de la instancia, en enero de 2017, hasta el cierre de 2019 se recibieron 300 denuncias, de éstas sólo un 5 por ciento corresponden a acoso sexual o verbal, y el 70 por ciento fue conciliado.
En entrevista, indicó que el último caso sancionado fue la expulsión de un maestro de la Preparatoria 10 de Iguala, del que informó el rector Javier Saldaña Almazán en marzo pasado, luego de que dos alumnos denunciaran acoso.
Sánchez Nájera dijo que el tribunal, integrado por cinco magistrados, tiene entre sus facultades atender conflictos por procesos electorales dentro de la institución, procedimientos de responsabilidades de trabajadores y conductas de violencia de género como abuso sexual, verbal o físico, entre alumnos o alumnos y trabajadores.
En este último punto, uno de los que más resuena en los medios, dijo que hay un periodo de 10 días por parte de la víctima, a partir del hecho, para interponer una denuncia ante el tribunal, que sancionaría al profesor o trabajador con la expulsión; sin embargo, esta resolución tiene que pasar por el Consejo Universitario, cuyos integrantes lo votan.
El magistrado dijo que las sanciones se aplican, siempre y cuando se demuestre que un trabajador incurrió en una mala conducta, pero que el tribunal no es un órgano inquisitivo.
Sánchez Nájera explicó que cada proceso tiene un periodo de tiempo distinto, algunos son de tres meses otros duran más tiempo, según las pruebas que se presenten y los llamados a las audiencias de las víctimas, que su mayoría menores de edad y tienen que estar acompañados de sus padres.
Resaltó que al tribunal no han llegado casos de acoso o abuso sexual entre estudiantes, que “es muy difícil que un estudiante denuncie a otro”.
Indicó que desde que se fundó el tribunal, se han recibido 300 denuncias, de éstas, un 70 por ciento logra la conciliación, por casos como quejas por excesivo trabajo por parte de un profesor, cambio de maestros, venta de calificaciones o cambio de calificaciones, pero por el tema de acoso sexual sólo es un 5 por ciento.
Indicó que sólo en 2019 se presentaron 40 quejas o denuncias por diferentes temas, entre éstos, la de venta de calificaciones de un maestro de la Preparatoria 27 de Acapulco, que también fue expulsado en marzo pasado, como el maestro de Iguala acusado por acoso sexual.
Informó que el caso de la preparatoria de Tecoanapa no llegó hasta el tribunal y sólo fue una denuncia pública, que se hizo en una protesta a finales de noviembre y aclaró que el órgano no sigue procesos de oficio.
El magistrado indicó que el tribunal no tiene competencia en conflictos de los sindicatos.
Sánchez Nájera también expresó que se necesita presupuesto para la difusión de los trabajos del tribunal y que los estudiantes de toda la UAG conozcan a qué tienen derecho y a dónde pueden recurrir, porque muchos no lo hacen por la falta de información.
Debido al tema de acoso sexual, se buscó desde diciembre pasado a la directora de la Unidad de Igualdad de Género, Olivia Álvarez Montalván, en sus oficinas e incluso se le abordó personalmente el 30 de diciembre, en el acto de conmemoración por los caídos de 1960, para conocer los casos que han llegado al área y las acciones que se realizan, pero no quiso realizar comentario alguno y sólo dijo que se preparaba un plan.
Texto: Jacob Morales Antonio / Foto: Jessica Torres Barrera
