Fundamentan en un libro el derecho de los ciudadanos mexicanos a portar armas para su legítima defensa

El derecho de armarse del investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM y colaborador de la revista Proceso, Ernesto Villanueva, fue presentado en la Universidad Americana.

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1 diciembre,2017 11:14 am
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Acapulco, Guerrero, 1 de diciembre de 2017. Al presentar su libro el El derecho de armarse el investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM y colaborador de la revista Proceso, Ernesto Villanueva subrayó que los ciudadanos del país están listos para ejercer su derecho fundamental del artículo décimo de la Constitución para “poseer y portar armas de fuego para legítima defensa para proteger su integridad y su familia”.

Consideró el escritor que el derecho de armarse, de poseer y portar armas “va a permitir que haya una reducción de los índices de los delitos de alto impacto y de índices delictivos en general, sin duda alguna, siempre y cuando obviamente las personas se preparen, conozcan cómo utilizar adecuadamente un arma de fuego y no vaya a ser contraproducente”.

Se le preguntó que si la situación que se vive de violencia en el país puede llevar a que se flexibilice los requisitos para obtener un arma y respondió: “Creo que debería flexibilizarse de una manera lógica, poniendo desde luego requisitos diferentes que permitieran que la solicitud, cumpliendo los requisitos, se entregara y no se tuviera que judicializar y no ir a una demanda de amparo para poder ejercer ese derecho”.

Sobre si en Guerrero se está preparado para que la ciudadanía se arme, dijo que los derechos están previstos en la Constitución y eso, “no es mi opinión, está en la Constitución y es para todos los mexicanos; no se admite discriminación de ningún tipo, sino de igualdad en el ejercicio de los derechos fundamentales”.

En un auditorio repleto de estudiantes de ambas universidades así como personas de la sociedad civil y representantes de asociaciones, los comentaristas, que fueron el líder de la Coparmex Chilpancingo, Adrián Alarcón Ríos; el rector de la UAG, Javier Saldaña Almazán y el rector de la Universidad Americana, Mario Mendoza Castañeda, felicitaron al autor y destacaron que el libro no era una convocatoria a la rebelión sino una investigación profunda de un tema de actualidad y polémico.

En su intervención, el escritor Ernesto Villanueva comentó que el libro surgió hace seis años al ver que el Artículo Décimo constitucional era un tema que no estaba estudiado y que aunque era polémico si había una ausencia de información.

Indicó que en su libro se aboca a diferenciar el derecho a la posesión de un arma de fuego menor en su domicilio, lo cual registrarla es relativamente fácil, y el monopolio de venta que lo tiene la Sedena; que si se habla de portar un arma es otra cosa, de traer el arma consigo ya requiere un permiso de portación, donde a pesar de cumplir con todos los requisitos que son muchos, y que luego son negados, pues ejemplificó que si fuera alguien de Chilpancingo dirían que “existe presencia del Estado mexicano o expresada en la Policía Estatal o Municipal razón por la cual deben sentirse seguro, porque es su obligación defenderlo y no necesita el arma”.

El escritor consideró que el país ya está preparado para ejercer un derechos de “esta naturaleza, dicen que la violencia trae violencia, sí, pero tener un arma no es necesariamente para generar violencia sino para legítima defensa”.

Destacó que su libro lo que busca es expresar que el derecho puede ejercerse o no, que no está llamando a armarse todos; “lo que estoy haciendo, lo que estoy explicando es la situación, cuáles son sus fortalezas y debilidades”.

 

No es una invitación a la rebelión

En su intervención, el dirigente de la Coparmex Chilpancingo, Adrián Alarcón Ríos, precisó que el libro no es una convocatoria a la desobediencia civil y tampoco era una invitación a la ilegalidad ni se pretende encontrar motivos y justificaciones para generar “mayor violencia de la que ya tenemos ni una apología del delito”, sino que el libro El derecho de armarse es una importante investigación y visión de nuestra cruda realidad si de inseguridad se trata”.

Agregó que en el libro se encuentran bases jurídicas, históricas, científicas y estadísticas que permiten con claridad comprender el tema de poseer y portar un arma de fuego para la legítima defensa y estamos “tratando de un derecho humano”. Motiva, dijo, al lector al análisis, la discusión y el debate tan necesario en estos tiempos de inseguridad plena en donde en Guerrero se dan de seis a siete asesinatos doloso diarios.

Precisó que no se le puede abonar a la actual administración, pues “tenemos por lo menos ocho años de esta situación que nos duele y lastima”. Señaló que el actual escenario es que se notan seis grupos armados, institucionales y los que no están bajo la ley, que son la delincuencia organizada, la delincuencia común, las policías comunitarias así como los tres órdenes de gobierno. Subrayó que Chilpancingo está sitiada por comunitarios “amparados por la ley 701”.

Dijo que nada más falta la capital, pero “prácticamente estamos rodeados por policías comunitarios que hay que decirlo con mucha responsabilidad, nosotros como empresarios los veíamos sanos cuando empezaron, pero han sido contaminados por grupos de la delincuencia organizada algunos. Es un grave problema ya de encontrarnos pleitos entre ellos”. Se quejó que a pesar de ello a los empresarios no se les otorga el derecho de armarse, “es inalcanzable por los requisitos discrecional y que se mezcla el interés mercantil para no llegar a armarnos”.

Se inhibe el delito

 

Por su parte, el rector de la UAG, Javier Saldaña Almazán, comentó que ya están establecidas las reglas del derecho de armarse, ahora se tiene que discutir, pues es un tema importante porque el hecho de que una familia tenga un arma “eso inhibe el delito”. Indicó que en los últimos años se han cometido 17 mil delitos dolosos.

Saldaña Almazán indicó que la gente que tiene su arma legalmente “ante el asedio de la inseguridad lo que hacen es integrarse en policías comunitarias y eso como propósito, como inicio está bien, pero después llega un grado de contaminación de éstas y están en contrasentido ya”. Indicó que no todas, porque algunas son un gran aporte para el estado, porque muchas veces no puede garantizar la seguridad.

Añadió que menos los municipios, donde sus policías están “endebles, están contaminadas muchas veces y no tienen los elementos para cubrir esa población”. Indicó que el grado de desesperación por la inseguridad llevó a pensar en estar armados todo el tiempo para defenderse y destacó que en ese lugar había gente que tomaba decisiones, quienes “nos van a ayudar para llevarlo a la discusión a la Comuna, al Congreso estatal y federal”.

El rector lamentó que la Política Mixta no se apruebe porque “si seguimos en la misma dinámica de mantener a las policías municipales, a veces son las que trabajan para la delincuencia en muchos de los casos, es complicado, luego le queremos echar la culpa al gobernador, pero el tema está en los municipios, son los mandaderos muchas veces de los grupos delincuenciales y no crean porque ellos quieren o eligieron eso, es un asunto que lo forzan porque tienen identificada a su familia”.

El rector dijo que él tiene seguridad no porque la haya elegido, “muchos piensan que es un asunto suntuoso, es un asunto que el rector quiere traer, pero es un asunto de vida porque yo solamente sé como andar los hervores porque nadie sabe lo que he pasado; uno tiene que mantener su rol de trabajo y vida pública a pesar de todo”. Finalmente dijo que algo se tiene que hacer para tener el derechos a cuidarse, generar políticas de seguridad con el estado y federal para que los mexicanos podamos vivir en armonía y “recuperemos nuestra libertad, porque muchos literalmente vivimos entre comillas en libertad”.

Una investigación seria

 

En su intervención, el rector de la Universidad Americana, Mario Mendoza Castañeda, destacó que la obra es un estudio serio y con bases científicas donde queda claro la seriedad del trabajo, donde hace un análisis profundo del Artículo Décimo constitucional que regula el derecho de poseer armas de fuego para la legítima defensa de las personas. Indicó que el libro da un panorama completo sobre el antecedente jurídico y analiza el derecho de armarse.

El rector refirió que el escritor Ernesto Villanueva propone que se derogue la ley secundaria o reglamentaria y que se expida una nueva ley. Abundó que el libro es “producto de un análisis técnico que invita a la revisión del derecho humano a poseer un arma y la actualización de la legislación respectiva. No considerando una iniciativa a la violencia ni al uso de la autojusticia”. Precisó que en la obra no se está motivando el que todos “nos armemos o que vayamos a la calle, él está haciendo un estudio técnico sobre lo que se refiere a los derechos que tenemos para salvaguardar la seguridad” y agregó que eso debe quedar claro, porque mucha gente piensa al ver el título que se armen y salir a la calle; en absoluto. Precisa que la obra establece que el tener un arma no es la solución total al problema de seguridad, por lo que “habrá que analizar y debatir, es lo que propone, el dilema de tener arma o no para defenderse”.

En su visión personal el rector de la universidad privada subrayó que es urgente fortalecer las instituciones de seguridad y administración de justicia, “iniciando con los municipios y estados, porque corresponde a los ayuntamientos en primer término salvaguardar la seguridad de los habitantes, luego el estado y federación”. Aunque dijo que es un sueño guajiro, es necesario terminar con la impunidad y la corrupción, “es el tema fundamental”.

Habló sobre la Ley de Seguridad Interna sobre la que dijo: “es importante que legitimemos las acciones jurídicas de las autoridades que coadyuvan a la función de seguridad como el Ejército y la Armada mexicana; es importante que legitimemos esta acción porque no es militarizar las policías, ellos tienen que actuar cuando por deficiencias de las policías tienen que coadyuvar para la seguridad”.

Nota: Karina Contreras/ Foto: El Sur.

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