¿Hacia dónde va la Unión Europea?

Gaspard Estrada

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5 junio,2019 5:24 am
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Gaspard Estrada

 
El pasado 26 de mayo, un terremoto político sacudió a la Unión Europea. Como lo comentamos en este espacio hace algún tiempo, esta elección fue un parteaguas en la historia electoral de la Unión Europea (UE). Por primera vez desde 1979, fecha de la primera elección del parlamento europeo, que derivó en la elección de la francesa Simone Veil como primera presidenta de este congreso, la participación electoral aumentó, al superar más del 50 por ciento.
Contrariamente a las elecciones anteriores, en las cuales la mayoría de los electores votaron primordialmente en función de factores nacionales –e inclusive locales y regionales  en algunos casos–, esta vez la dimensión política del futuro de la Unión Europea estuvo presente en buena parte de las campañas que se llevaron a cabo en los 28 países de la UE –incluyendo el Reino Unido, que votó hace casi tres años a favor de la salida de la UE, pero que no ha logrado llevar a cabo el Brexit prometido por su clase política. La situación actual de la UE no da para menos.
En efecto, desde las últimas elecciones europeas, en 2014, la situación regional y mundial ha cambiado sustancialmente. Donald Trump, que busca abiertamente dividir e inclusive atacar a la UE, no había sido electo presidente de Estados Unidos, el Brexit no había ganado el referéndum en el Reino Unido, desafiando a la mayoría de los pronósticos de las encuestas de opinión, Marine Le Pen, la candidata del partido de extrema derecha en Francia no había obtenido más del 35 por ciento de los votos en la segunda vuelta presidencial de ese país frente a Emmanuel Macron. En Italia, el líder de un partido xenófobo, racista y contrario a la UE, Matteo Salvini de la Lega, llegó al poder. De tal suerte que la idea de una integración cuasi mecánica de la UE se puso en entredicho durante estos últimos cinco años, y que para Emmanuel Macron, el presidente Francés, y todos los defensores del mantenimiento y de una profundización en ciertos aspectos del sistema instaurado por Jean Monnet y Robert Schumann en los años 1950, esta elección era crucial para evitar que el proyecto integrador europeo no desapareciera.
Sin embargo, los resultados sorprendieron a más de un observador. No sólo porque éstos arrojaron números bastante favorables a los defensores de la UE, sino que estos resultados también tuvieron impacto a nivel nacional. Por lo que tiene que ver con la política comunitaria, es decir con el futuro de la UE, por primera vez los grandes partidos de derecha como de izquierda no se podrán repartir por sí solos el destino de la comisión y del parlamento europeo. Un reparto que acabó volviéndose una incitación a la parálisis, y al mantenimiento de acuerdos cupulares entre las figuras de ambos partidos. Por el contrario, el crecimiento en las urnas de los partidos verdes (en particular en Alemania y Francia, donde lograron resultados históricos) y liberales (apoyados en buena medida por el buen resultado del partido de Emmanuel Macron), permiten pensar que una nueva mayoría política progresista pueda construirse, en el caso que exista una verdadera voluntad política de parte de los líderes de los principales países de la UE. Si esta nueva mayoría, que podría incluir un abanico amplio de partidos, desde Podemos en España hasta La République en Marche! de Emmanuel Macron y los liberales alemanes, incluyendo a los centristas y los ecologistas, se conforma y logra formar un equipo sólido en la comisión y en el parlamento, la UE podría salir de la parálisis en la que se encuentra.
A nivel nacional, en Francia, los resultados electorales dejaron en evidencia la nueva configuración política del país a raíz de la elección de Emmanuel Macron, en 2017. Por primera vez, ni el partido socialista ni el partido de los republicanos, del ex presidente Sarkozy, obtuvieron más del 10 por ciento de los votos, lo cual constituye un hecho político histórico. Por primera vez, el clivaje pro y anti europeo pesa de manera central en el voto de los franceses. Esperemos que se trate de una buena noticia.
* Director Ejecutivo del Observatorio Político de América Latina y del Caribe (OPALC), con sede en París.
Twitter: @Gaspard_Estrada
 

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