Concesionarios, líderes del transporte público y representantes de colonias populares de Iguala protestaron ayer en la oficina de Procuración de Justicia y pidieron el cese del encargado de despacho de la Secretaría de Seguridad Pública municipal, Carlos Uri Arcos Calderón.
En el Ayuntamiento los líderes de las colonias populares, dirigentes transportistas y concesionarios encabezados por su coordinador regional, Victórico Martínez López, se quejaron de los abusos de la Policía Federal y la falta de resultados para bajar la violencia en el municipio.
Cerca de las 12:45 de la tarde unos 80 transportistas y representantes de colonias populares se reunieron con el síndico de Procuración de Justicia, Julio César Catalán Rendón, para pedir el cese del encargado de despacho de Seguridad Pública, quien ocupó el mismo cargo en la administración del alcalde interino Silviano Mendiola Pérez y fue ratificado por el priista Esteban Albarrán Mendoza.
Los manifestantes denunciaron irregularidades del encargado de Seguridad Pública municipal por supuesta complicidad con policías federales en la aplicación de infracciones de tránsito.
Trascendió que este lunes dejarán estas acciones y se les dará facultad a los agentes de Tránsito local para hacer las infracciones, quienes fueron dados de baja después de la desaparición forzada de los estudiantes de Ayotzinapa el 26 y 27 de septiembre de 2014.
“Basta de las arbitrariedades de la Policía Federal, los abusos en contra de los transportistas y los nulos resultados en materia de seguridad, principalmente en las colonias populares”, dijo Martínez López.
El representante de los transportistas pidió que los policías federales, “dejen de tener una actitud de hostigamiento hacia los transportistas”.
El síndico Catalán Rendón dijo que informará sus peticiones al alcalde y tendrán una segunda reunión hoy al mediodía para darles una respuesta a sus peticiones.
Los inconformes también reclamaron la falta de resultados de la Policía Federal para frenar la inseguridad y violencia en el municipio, denunciando “incapacidad” de los agentes federales.
Por su parte, los representantes de las colonias populares solicitaron mayor vigilancia.