Asesora la escuela de arquitectura de la UAG en la construcción de vivendas a igualtecos

 

 La escuela de arquitectura y urbanismo de la Universidad Autónoma de Guerrero lleva a cabo en la colonia popular de Iguala, Loma del zapatero, un proyecto denominado Taller de habitabilidad, mismo que consite en asesorar a los habitantes de esa colonia en la construcción de sus viviendas utilizando los materiales de la región, abaratando costos, respetando el contorno ecológico y mejorando sus condiciones de vida, así lo informó el coordinador del campus Taxco de esta escuela de la UAG, Néstor Salinas Rodríguez.

Indicó que este es un proyecto de vinculación popular y que consiste en proyectar conjuntamente con los usuarios un espacio habitable digno, con una mejor calidad de vida, y agregó que para esto es indispensable la participación organizada de los colonos en diversas acciones como la gestión, el estudio y la construcción.

Señaló que para el desarrollo este proyecto se llevan a cabo estudios socioeconómicos de quienes participarán en el mismo para “determinar la orientación del proyecto”.

Explicó que se trata que la gente, organizada, se construya su propia vivienda, considerando las características del suelo y de los materiales regionales, además de que garanticen la seguridad de los habitantes en el caso de que sea una zona sísmica.

Señaló que con la utilización de material de la región se garantiza un mejor confort que con la utilización de material de concreto armado “como la mayoría de la gente lo hace”.

“Con este sistema de construcción, en el que no se utiliza concreto ni varillas y se recurre al adobe, al bambú, entre otros materiales, es posible reducir la temperatura hasta 3 o 4 grados en relación a la temperatura exterior”.

Salinas Rodríguez indicó que en este proyecto están participando estudiantes de arquitectura del cuarto semestre, además de que se cuenta con el respaldo de la Academia Mexicana de Arquitectura, representada por el arquitecto José María Gutiérrez.

Agregó que la UAG es la segunda universidad del país que hace este tipo de proyectos, la otra es la facultad de arquitectura de Mérida, Yucatán; además de que ya se “han comunicado con nosotros directivos de la universidad de Colombia y de a Habana, que están interesados en este tipo de proyectos aplicables a grupos vulnerables”.

Agregó que en la colonia Loma del zapatero, se está involucrando a más de 450 familias, sin embargo solo se trabajará con alrededor de 150 familias en la construcción de sus viviendas.

Indicó que con la utilización de materiales de la región como lo es la tierra y la madera, como el bambú, el abaratamiento de la construcción de la vivienda alcanza hasta un 40 por ciento en relación a una vivienda construida con concreto.

Indicó que los estudios que se llevan a cabo por esta escuela “van a ser novedosos, porque no se han realizado en toda la región, incluyendo a los estados de México, Puebla, Morelos y Guerrero”.

Agregó que “es la primera vez que la Escuela de Arquitectura de la UAG va a implementar proyectos, no solo de vivienda, sino también de organización, de gestión y de edificación de vivienda”.

La medida de los lotes en los que se harán los proyectos de construcción de tipo ecológico es de 120 metros cuadrados y en cada una de estas se edificará una construcción de alrededor de 50 metros cuadrados, con un costo aproximado de 30 mil pesos, con diferentes modelos y sistemas constructivos, en las que no se aplicará concreto ni se utilizará el acero. “Estamos haciendo una retrospectiva milenaria de la arquitectura en la que no se utilizaba el concreto”, dijo Salinas Rodríguez.

Señaló que uno de los compromisos de la escuela de arquitectura, Campus Taxco, es la de “trabajar la vivienda popular. De formar un profesionista que resuelva no las necesidades de la realeza británica, sino de la gente que vive en lugares marginados”.

Señaló que lo que más se necesita para impulsar este tipo de proyectos es organización, y “es lo que estamos tratando de hacer con los habitantes de la colonia Loma del zapatero”, y agregó que la escuela está abierta para apoyar a otros asentamientos humanos que quieran ser partícipes de este tipo de proyectos.

Indicó que con este tipo de proyectos “vamos en contra corriente en cuanto a la ideología de formar arquitectos elitistas, caros y ceñidos a la utilización de materiales industrializados; nosotros queremos hacer conciencia de que la gente vuelva los ojos a la tierra, a los sistemas constructivos de nuestros antepasados, pero con nuevas técnicas aplicadas a los sistemas constructivos”.

Asesora la escuela de arquitectura de la UAG en la construcción de vivendas a igualtecos

La escuela de arquitectura y urbanismo de la Universidad Autónoma de Guerrero lleva a cabo en la colonia popular de Iguala, Loma del zapatero, un proyecto denominado Taller de habitabilidad, mismo que consite en asesorar a los habitantes de esa colonia en la construcción de sus viviendas utilizando los materiales de la región, abaratando costos, respetando el contorno ecológico y mejorando sus condiciones de vida, así lo informó el coordinador del campus Taxco de esta escuela de la UAG, Néstor Salinas Rodríguez.

Indicó que este es un proyecto de vinculación popular y que consiste en proyectar conjuntamente con los usuarios un espacio habitable digno, con una mejor calidad de vida, y agregó que para esto es indispensable la participación organizada de los colonos en diversas acciones como la gestión, el estudio y la construcción.

Señaló que para el desarrollo este proyecto se llevan a cabo estudios socioeconómicos de quienes participarán en el mismo para “determinar la orientación del proyecto”.

Explicó que se trata que la gente, organizada, se construya su propia vivienda, considerando las características del suelo y de los materiales regionales, además de que garanticen la seguridad de los habitantes en el caso de que sea una zona sísmica.

Señaló que con la utilización de material de la región se garantiza un mejor confort que con la utilización de material de concreto armado “como la mayoría de la gente lo hace”.

“Con este sistema de construcción, en el que no se utiliza concreto ni varillas y se recurre al adobe, al bambú, entre otros materiales, es posible reducir la temperatura hasta 3 o 4 grados en relación a la temperatura exterior”.

Salinas Rodríguez indicó que en este proyecto están participando estudiantes de arquitectura del cuarto semestre, además de que se cuenta con el respaldo de la Academia Mexicana de Arquitectura, representada por el arquitecto José María Gutiérrez.

Agregó que la UAG es la segunda universidad del país que hace este tipo de proyectos, la otra es la facultad de arquitectura de Mérida, Yucatán; además de que ya se “han comunicado con nosotros directivos de la universidad de Colombia y de a Habana, que están interesados en este tipo de proyectos aplicables a grupos vulnerables”.

Agregó que en la colonia Loma del zapatero, se está involucrando a más de 450 familias, sin embargo solo se trabajará con alrededor de 150 familias en la construcción de sus viviendas.

Indicó que con la utilización de materiales de la región como lo es la tierra y la madera, como el bambú, el abaratamiento de la construcción de la vivienda alcanza hasta un 40 por ciento en relación a una vivienda construida con concreto.

Indicó que los estudios que se llevan a cabo por esta escuela “van a ser novedosos, porque no se han realizado en toda la región, incluyendo a los estados de México, Puebla, Morelos y Guerrero”.

Agregó que “es la primera vez que la Escuela de Arquitectura de la UAG va a implementar proyectos, no solo de vivienda, sino también de organización, de gestión y de edificación de vivienda”.

La medida de los lotes en los que se harán los proyectos de construcción de tipo ecológico es de 120 metros cuadrados y en cada una de estas se edificará una construcción de alrededor de 50 metros cuadrados, con un costo aproximado de 30 mil pesos, con diferentes modelos y sistemas constructivos, en las que no se aplicará concreto ni se utilizará el acero. “Estamos haciendo una retrospectiva milenaria de la arquitectura en la que no se utilizaba el concreto”, dijo Salinas Rodríguez.

Señaló que uno de los compromisos de la escuela de arquitectura, Campus Taxco, es la de “trabajar la vivienda popular. De formar un profesionista que resuelva no las necesidades de la realeza británica, sino de la gente que vive en lugares marginados”.

Señaló que lo que más se necesita para impulsar este tipo de proyectos es organización, y “es lo que estamos tratando de hacer con los habitantes de la colonia Loma del zapatero”, y agregó que la escuela está abierta para apoyar a otros asentamientos humanos que quieran ser partícipes de este tipo de proyectos.

Indicó que con este tipo de proyectos “vamos en contra corriente en cuanto a la ideología de formar arquitectos elitistas, caros y ceñidos a la utilización de materiales industrializados; nosotros queremos hacer conciencia de que la gente vuelva los ojos a la tierra, a los sistemas constructivos de nuestros antepasados, pero con nuevas técnicas aplicadas a los sistemas constructivos”.

Solicitan atención estudiantes y profesores de Arquitectura de la UAG en Taxco

 

Podrían perder un terreno donado por la comunidad para la construcción de la escuela

Estudiantes y profesores de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, campus Taxco, de la Universidad Autónoma de Guerrero, se reunieron en las instalaciones de la Comisaría de Bienes Comunales de la comunidad de Acamixtla, para acordar que solicitarán al rector de la UAG, Nelson Valle López, y a la directora de la facultad “mayor atención y respeto” a esta extensión educativa.

Alrededor de 65 estudiantes y profesores se reunieron y dialogaron con el coordinador de la Facultad de Arquitectura del campus Taxco, que se encuentra instalado en la Casa del pueblo de Acamixtla, Nestor Salinas Rodríguez, y con el subcoordinador de la UAG en la Zona Norte, Carlos Zubillaga Ríos, para exponerles que “es indispensable que se mejoren las condiciones de estudio de esta escuela”.

Indicaron que se sienten desconcertados porque hasta el momento el rector no ha dado “una respuesta clara” a la petición de construcción de la escuela en un terreno que fue donado por la comunidad de Acamixtla y que si “en un plazo de dos años no se construye la donación se anula”.

Reclamaron que el rector los haya dejado plantados en varias ocasiones y que “sólo visite a la escuela de Enfermería 4. ¿Acaso ellos le dieron más votos y por eso nos hace a un lado? Que nos lo diga para saberlo”.

También se mostraron inconformes con la política que aplica la directora de la facultad, Osvelia Alcaraz Morales, quien –dijeron- “nunca nos ha visitado y ni siquiera la conocemos”.

Indicaron que es necesario que la directora de la facultad los visite para que escuche las propuestas y peticiones que tenemos, “no que nos traten como estudiantes de segunda o de tercera”.

Dijeron que debido a que dentro de la legalidad de la UAG no existe un Campus en Taxco, están preocupados porque sus estudios la UAG no los quiera validar, a pesar de todos los esfuerzos que han hecho por tener maestros con altos niveles académicos.

Denunciaron que “hay butacas y restiradores en bodega y nadie los usa ni nos apoyan con nada. Las butacas que tenemos nos las donó el diputado Álvaro Burgos, si no quién sabe en dónde tomaríamos clases”. La escuela de Arquitectura de Taxco estaba en las instalaciones de la Preparatoria Vicente Guerrero, sin embargo éstas ya no eran suficientes para la matrícula.

Posteriormente, en 2003, los comuneros de Acamixtla y otras comunidades cercanas, decidieron donar a la UAG un terreno para la construcción de la escuela en ese lugar, alrededor de 10 mil metros cuadrados del cerro alto. Sólo hace falta que el rector instruya a las instancias correspondientes para que se haga el trámite legal y se cumpla la condicionante de los comuneros, que es la de construir en un plazo no mayor de dos años “los inicios de la escuela”, que implicaría contar con por lo menos cuatro aulas.

Los estudiantes dijeron que se presentarán en la próxima sesión del Consejo Universitario para que se les explique cuál es su condición y “saber si nos van a apoyar o no”.