No reparan el drenaje en Ayutla en represalia a locatarios que no dejaban el viejo mercado, señalan

Comerciantes de Ayutla que se negaban a cambiarse del mercado que fue demolido en el centro de esa población, al nuevo que se construyó a la salida sur de la cabecera municipal, denunciaron vía telefónica que el domingo pasado reventó el drenaje en el área de fondas, lo que obligó al menos a seis comerciantes a mantener sus negocios cerrados desde entonces.
Otros locatarios, según se muestra en un video enviado a El Sur, tienen que barrer debajo de las mesas las aguas negras que escurren, mientras sus clientes consumen sus alimentos.
Los comerciantes afectados, el domingo denunciaron el desperfecto en el Ayuntamiento, pero no ha acudido nadie a repararlo, en represalia porque en esa nave están los comerciantes que se negaban a salir del viejo mercado y a ocupar las nuevas instalaciones y han sido hostigados por la administración del mercado.
Una de las comerciantes, Amada Morales Cerón denunció que a partir del domingo, comenzaron a brotar aguas negras de las coladeras de tres fondas, pero que hasta este martes las fétidas aguas ya salían en seis.
“Yo tengo la fonda número 940, y desde el domingo salió mucha agua de drenaje, que apesta mucho, mero cuando está la gente comiendo”, dijo la propietaria, quien se quejó de que no tiene a quién recurrir porque el administrador no les hace caso, “el señor está en contra de nosotros”, denunció la comerciante.
Informó que las aguas negras comenzaron a brotar precisamente el domingo, cuando tienen más clientes, y se quejó de que trabajadores del Ayuntamiento “nomás vinieron a ver”, pero no repararon la coladera.
Dijo que no les hacen caso porque son los que no se querían salir del mercado que estaba en el centro de la cabecera municipal y que fue demolido para ampliar el Zócalo.
Desde el domingo se vieron afectados, además los puestos del comerciante René Gutiérrez y de otra locataria que, definitivamente cerró su negocio.
Morales Cerón informó que unos comerciantes definitivamente cerraron desde el domingo, y otros tienen que estar barriendo permanentemente el agua pestilente que sale del drenaje, mientras sus clientes consumen sus alimentos.
Dijo que no tienen a quién acudir porque si el administrador no les hace caso, mucho menos la presidenta municipal, Hortencia Aldaco Quintana, del PVEM, quien ordenó el desalojo del antiguo mercado del centro para que se fuera a las nuevas instalaciones.