Confían ganaderos del municipio que entre en operación el rastro en El Salto

El tesorero de la Asociación Ganadera, Gerardo Ramos, y el Presidente de la Asociación Ganadera de Acapulco ubicada en Texca, Santos Ramos Catarino, junto al ganado que está siendo preparado para comercializar su carne Foto: Carlos Carbajal
Ganado en el corral de las instalaciones de la Asociación Ganadera de Acapulco Foto: Carlos Carbajal

Ramón Gracida Gómez

Ganaderos de Acapulco confían en que ahora sí inicie operaciones el rastro de El Salto para que puedan vender carne de calidad aquí y sin intermediarios que se llevan parte de sus ganancias como productores.
Integrantes de la Asociación Ganadera con sede en Texca indicaron que la falta de un matadero oficial ocasiona que no haya un control de los animales que entran al municipio, que luego los destazan en los rastros clandestinos y venden su carne en los mercados.
“Nos mortifica como productores y como acapulqueños, porque también tenemos familia, que comamos carne de calidad, que sepamos lo que estamos comiendo”, dijo el presidente, Santos Ramos Catarino, que representa a unos 400 ganaderos del municipio.
En entrevista con El Sur en la sede de la asociación y luego en el centro de acopio inaugurado el martes pasado por el Ayuntamiento, ambos ganaderos contaron este jueves las dificultades que enfrentan como productores, pero también las expectativas que les generan las nuevas instalaciones y la promesa de la apertura del rastro Tipo Inspección Federal (TIF).
La Asociación Ganadera con sede en Texca fue creada en 2018, después de separarse de la Asociación Ganadera Local de Acapulco Guerrero. Conglomera a unos 400 productores, de los cuales 20 por ciento son mujeres.
Su presidente, Santos Ramos Catarino, dijo que el rastro “nos beneficiaría que estuviera funcionando porque el productor haría su venta directa, ya no buscaríamos para vender lo que es ganado de gorda, vacas, que se irían directamente al rastro. Esa carne la consumirían aquí los acapulqueños, una carne de calidad porque el ganado que tenemos como productores lo tenemos identificado, está bien. Ya no saldría el ganado a otros estados o a otros países, es la carne que nosotros consumiríamos aquí en el municipio, como en el estado. Sería importante para los acapulqueños porque es un rastro TIF, de calidad, comeríamos carne limpia. Entonces trabajaríamos directo al rastro. Como lo mencioné en la reunión con la presidenta Abelina López Rodríguez, sería importante trabajar con el centro de acopio porque ahí sería la engorda del ganado. El productor primero vendería al centro de acopio y el centro de acopio trabajaría directamente con el rastro TIF”.
El tesorero, Gerardo Ramos, dijo que la realidad de los productores es “complicada porque no tenemos un lugar donde nuestro ganado se pueda recolectar y realmente lo que hacemos los productores es vender a intermediarios, que son los acopiadores que vienen a comprar el ganado, pero son ya personas terceras. Entonces no tenemos otra oportunidad que vender y vienen y dicen tanto y tenemos que venderlo”.
La mayoría de los ganaderos en Acapulco se dedican a la crianza de becerros. Centrar el ganado en un solo lugar abre dos opciones: la primera es “engordarlos y sacarlos al norte, pero ya organizados, nosotros directamente sin intermediarios, directamente nosotros a otros lugares de engorda donde el productor se vería beneficiado por incrementar el valor de su ganado. Ya no sería intermediario, que es el que realmente se está llevando el trabajo y rápido, y nosotros que le batallamos duro, duro, está más complicado y a veces se nos dificulta eso”.
La otra opción sería “engordar el animal a una etapa final y llevarlo al rastro, que posteriormente es la idea de la presidenta con apoyo del gobierno estatal. Sería importante, no sólo en el ganadero en el aspecto de becerros, sino también todo productor que se dedica a la matanza de pollos, cerdos, ya se irían a un lugar pues verificado”.
A partir del rastro TIF, aseguró el productor de 40 años, “va a haber un control de sanidad para que ya se pueda erradicar ya la brucelosis, la tuberculosis, infecciones que se transmiten a las personas. Lo que yo siempre he dicho, la sanidad es pública, no es de los ganaderos, de los agricultores, de los que producimos en el campo, entonces es algo que tiene mucha importancia en el municipio. Ya en sanidad estaría bien controlado y también el productor consumiría algo sano”.
El presidente Ramos Catarino agregó que “nos mortifica como productores y como acapulqueños, porque también tenemos familia, que comamos carne de calidad, que sepamos lo que estamos comiendo. Por eso es importantísimo”.
–La carne de supermercados es de afuera, pero ¿la que se encuentra en los mercados?
–Una parte sí, pero otra no. Hay muchos aquí, como lo comentó el presidente Atalo Niño Ramírez, aquí hay más de 200 rastros clandestinos, donde matan animales. Y como no hay caseta sanitaria que estén vigilando la entrada de ganado, llegan a los rastros y ahí los están matando y nadie está vigilando eso, contestó el tesorero Gerardo Ramos.
“Son rastros que no se les está poniendo la atención; ¿qué estamos consumiendo? No hay ese control de vigilancia del ganado”, agregó. “Como no hay caseta ingresa cualquier ganado, llegan a las centrales de abasto o a los mercados, pero no sabemos porque no hay un control. Incluso yo he tenido la oportunidad de ver algunas situaciones donde el ganado lo traen vivo, los dejan en los corrales y ellos ahí hacen su matanza. Y yo digo, ¿éstos de dónde vienen? ¿Quién lo controla? No, nada. Puede ingresar ganado sin ningún cuidado y eso es lo que ponemos cuidado y es parte muy importante porque, como decía, es la sanidad pública. Imagínese una epidemia, no vamos a saber ni de dónde viene”.
–¿Se puede decir que no hay un control sanitario de la carne que viene?
–Exactamente, contestó el presidente Ramos Catarino.
–¿Y eso desde hace cuánto?
–Desde que no ha habido rastro.
En promedio, un ganadero acapulqueño es dueño de unas 30 cabezas, un productor entra a la asociación a partir de seis cabezas de ganado. Al pequeño ganadero, explica el presidente Ramos Catarino, “no se le debe desconocer porque somos productores. Ya tienen su pie de cría y quieren seguir, qué bueno. Qué bueno que haya más personas que quieran ser campesinos, que quieran participar como ganaderos, que esto no se pierda, que sigamos adelante”.
El tesorero explicó que una asociación ganadera lleva un control “bien sistematizado”, con respecto al areteo y el registro del padrón ganadero y de acuerdo con la unidad de producción, la UPP (Unidad de Producción Pecuaria), que es la que pide el municipio para dar algún tipo de apoyo.
Del centro de Texca, donde se ubican las oficinas de la asociación, al centro de acopio, son unos minu-tos de distancia. Está a las afueras de la comunidad, después de la Preparatoria 47 de la Universidad Autónoma de Guerrero.
En las instalaciones hay unos 20 animales, entre vacas, becerros. “No engordamos todos, si se da cuenta usted, nosotros engordamos los puros becerros. Ahí seleccionamos a los becerros y los metemos a la engorda. Un compañero trae cinco, otro 10, y entre todos ya juntamos los 150, 200 que se va a llevar la jaula”, explicó Gerardo Ramos.
El tesorero dijo que “mientras no se eche a andar el rastro no podemos tampoco engordarlos porque es un trabajo que tiene que ir a proceso. Ahorita lo que se tiene que sacar a los siete meses por la inversión que se está metiendo, no te lo pagan como es, pues”. “Entonces con esto que ya vamos a vender directo, ya va a ser diferente. Mientras no haya rastro, los vamos a tener que sacar en jaula”.
Señaló a un becerro macho, de ocho meses, “éste ya se va también, éstos son los buenos. Ya se están sacando a esa edad porque no hay todavía un rastro donde los podamos engordar ya como toros grandes. Porque un rastro ya te pide animales gordos, arriba de 700 kilos”.
“Ahorita se venden así, por ejemplo, vienen acopiadores de San Marcos, vienen acopiadores de la Costa Grande, de Coyuca, de Juan R. Escudero, de donde quieran vienen compradores. Pero pues eso le descuentan al productor. No te lo voy a pagar a tanto, entonces cuánto. No tenemos dónde, tenemos que venderlo, la necesidad nos hace pues dar las cosas. Pero con esto que ya va a estar identificado cuando comencemos, pues con más margen de recursos en el ganado, ni modo que lo vendan allá. Tienen que venderlo así como nos estamos organizando, pues aquí. Entonces ya aquí directamente con la empresa”.
Ramos Catarino mostró la báscula y narró cómo los animales son pesados y luego llevados a las camionetas. Dijo que es un avance el centro de acopio, pero faltaría otra báscula porque un productor a veces quiere pesar su ganado, pero no venderlo todavía. También se necesita la ampliación de los corrales de acopio, bodegas. Y hasta un tractor.
Una vaca mugía mientras el presidente explicaba, retomando las palabras de Atalo Niño, que el becerro tiene un precio bajo, 48 pesos el kilo. Señaló un ejemplar de unos ocho meses y de unos 220 kilos, es decir, un valor de 11 mil pesos aproximadamente. Después del proceso de engorda, el kilo sube a unos 53 pesos, entonces unos 18 mil pesos.
Los ganaderos también son agricultores porque producen maíz para vender y usarlo para consumo propio. El campo es difícil, dijo el presidente de 62 años, “se fue una cuerda de entre 10,12 compañeros que se dedicaban al campo, que el año pasado sembraron dos o tres bultos de maíz. Nada más un bulto le da ocho toneladas, así que ese productor que producía lo de 16 toneladas ya no está. ¿Esas 16 toneladas quién la va a sacar hoy? Entonces hay una baja de producción, ya no le vemos llegar”.
Eran las 10:30 de la mañana. Es temporada de secas y no hay pasto, “nada más lo vamos controlando mientras entran las aguas”, dice Gerardo Ramos mientras mostraba dónde se pone la comida. Los animales no aguantan con sólo pasto, necesitan el forraje, maíz, “si no, más flacas se caen. Y es necesario echarle comida, aunque sea en la mañana, en la tarde, echarle para que aunque sea algo coman y ya se van a recoger, ya se vienen, toman agua y otra vez. Y así las cargamos todos los ganaderos todos los días”.

 

Ser intransigentes para evitar el deterioro ambiental, pide la Codehum a autoridades

El presidente de la Comisión Estatal de Defensa de Derechos Humanos en Guerrero (Codehum), Ramón Navarrete Magdaleno, exhortó a las autoridades ambientales a “ser intransigentes” y evitar un mayor deterioro en el medio ambiente.
En declaraciones antes de la firma del convenio de las secretarías de Turismo y del Medio Ambiente de Guerrero con representantes de organizaciones empresariales y de profesionistas de Acapulco, Navarrete Magdaleno dijo que hay deficiencias medioambientales.
El acto protocolario se desarrolló en un salón del hotel Holiday Inn La Isla, en la zona Diamante.
El ombudsman estatal pidió que las instituciones “sean más rígidas, sean más estrictas, ahí sí hay que ser intransigentes. No hay que tocar un pulmón de las ciudades, del campo, con el objetivo de agrandar las ciudades o establecer empresas o residencias; ya hay legislación, sólo que tenemos que cumplirla”.
Aseguró que las autoridades de los municipios deben tener acciones contundentes en la preservación del medio ambiente. “El estado, los municipios, la federación, tienen una responsabilidad mediante sus instituciones, pero no hay ninguna institución eficiente cuando hay negligencia de parte de nosotros los ciudadanos”.
“Todos y a todas deberíamos estar haciendo mucho más por cuidar el medio ambiente, hay malos ejemplos de servidores públicos, en el mundo tenemos la discusión reciente con el presidente de Estados Unidos (Donald Trump)”, que se niega a participar en el acuerdo de París para reducir la emisión de gases de invernadero.
Navarrete Magdaleno dijo que, “hace falta más compromiso, no por las decisiones políticas, sino con las generaciones que vienen. Somos responsables de lo que estamos dejándoles a las nuevas generaciones. Tenemos que tomar acciones que se traduzcan en un avance, y revertir. Es una deuda que tenemos con el medio ambiente”.
Por su parte, la titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales de Guerrero (Semaren), Karen Castrejón Trujillo mencionó en su discurso que la entidad mantiene un cuarto lugar en biodiversidad en el país, y añadió que esa dependencia promovió la integración de un estudio para saber qué se tiene, dónde, y cuáles van a ser las estrategias para su conservación, aunque no precisó cuándo se darán a conocer los resultados.

El turismo es sensible y exigente con la sustentabilidad, asegura Rodríguez Escalona

En su oportunidad el secretario de Turismo, Ernesto Rodríguez comentó que el turismo “es muy sensible”, y más exigente con la sustentabilidad.
Dijo de que hay tres retos fundamentales para nuevos proyectos en el ramo, “el primero es cómo articulamos el desarrollo turístico con el medio ambiente, cómo hacemos inversión en los destinos turísticos sin lastimar el medio ambiente”.
Y destacó que Guerrero ocupa el tercer lugar en inversión privada en el país, con 3 mil millones de dólares.
Añadió que otro reto es “cuidar el medio ambiente, para que las empresas existentes y el propio gobierno cumplan con las normas ambientales; y el tercer reto… es generar nuevos productos turísticos, ante la demanda en el segmento de aventura y naturaleza”.
Rodríguez Escalona detalló que la conformación de un diagnóstico para el desarrollo de nuevos productos turísticos a partir de las riquezas naturales, partió de la visita de quien lo integró a los cuerpos lagunares, y aseguró que el segmento de naturaleza y aventura es el que más ha crecido en todo el mundo.
Castrejón Trujillo mencionó que, como parte del convenio están las capacitaciones en empresas vinculados con las principales actividades económicas de la entidad, entre ellos las mineras.
En su oportunidad, el presidente de la Asociación de Hoteles y Empresas Turísticas de Acapulco (AHETA), Jorge Laurel González dijo que los hoteles están enfocados en mejorar y optimizar sus servicios para reducir gastos de energía y agua.
También firmaron el acuerdo, el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Acapulco, Fidel Serrato Valdés, y la presidenta del Grupo Aca, Digna Bertha Marroquín Cisneros.

Están suspendidos los pozos de agua en El Salto y La Concepción porque no se han clorado

 

El director de Salud municipal, Eger Gálvez Pineda, informó ante regidores que están suspendidos los pozos de agua del poblado El Salto y La Concepción porque no se ha clorado de forma debida.
Durante la sesión de la Comisión de Salud, en la sala de Cabildo Juan R. Escudero, Eger Gálvez habló de las acciones de prevención contra el dengue, chikungunya y el zika, e indicó que la dependencia a su cargo se hará cargo de la cloración en las comunidades .
Agregó que el porcentaje de personas que utiliza agua de pozos es menor, “25 a 30 por ciento que sigue consumiendo y el resto toma de garrafones”, pero dijo que en los muestreos se ha detectado que 90 por ciento de los pozos están nulos en cantidad de cloro.
Detalló que hace un mes tomó la dependencia la responsabilidad de la cloración de los pozos y tanques, y destinó un vehículo y personal para ello, porque la estrategia que traía la CAPAMA que era dotarle a los comisarios o delegados se detectó que no se hacía.
“Se arrancó una verificación en las zonas alejadas como Apalani, Huamuchitos, Apanhuac y solamente tenemos El Salto y La Concepción los que no salieron en condiciones, y la CAPAMA acudirá a realizar una limpieza porque no se encuentran las condiciones ni para consumo ni para lavado de recipientes”, explicó.
Eger Gálvez agregó que en esa zona hay dos centros de salud que son responsabilidad del estado, “pero nosotros estamos entrando y se va a proceder a la limpieza, son los únicos que suspendimos, el resto, aunque se encuentren ausentes de cloro, no están contaminados”.
El director habló del tema luego que la regidora por el PAN, Gloria Sierra López, pidió que se atienda la cloración del agua, porque en algunas comunidades no se hace y “preocupa por las altas temperaturas que estamos pasando, no sé si se están incrementando los cuadros diarreicos o gastrointestinales”.
“Preocupa porque quizá se toma agua contaminada, las heces están ahí y podrían ocasionar un problema y quiero saber qué comunidades están en esa problemática”, dijo.
Gálvez Pineda respondió que se hace un monitoreo cada mes de los pozos y “tomamos parte del control de la cloración porque antes la CAPAMA lo daba a las comisarías y delegaciones para que ellos se hicieran responsables, pero muchas veces no lo hacen”.
Aunque no precisó cuántos son los pozos y tanques en el municipio, dijo que se la dependencia destinó dos químicos y vehículos para las revisiones.
Aclaró que hasta el momento no tiene reporte de personas enfermas de “cólera” o algún brote de dicha infección.
De los temas de dengue, chikungunya y zika, Gálvez Pineda explicó que el año pasado hubo un incremento de presupuesto y se compró material, se hicieron brigadas de limpieza, fumigación y actualmente “no tenemos ningún caso de chikungunya y de dengue son 27 casos”.
Explicó que problema de resistencia de las personas a que se fumige dentro de sus casas es de un 10 por ciento y que ya se fumigó en la Jardín.
Del caso de los canales pluviales, detalló que hace semana y media se inició la fumigación.
Gálvez Pineda justificó la tardanza porque indicó que la dirección entra cuando los canales están limpios y ya se hizo en el de Aguas Blancas y el del río El Camarón.
En ese sentido la regidora petista Alma Juárez Altamirano pidió fumigar por Pueblo Nuevo y Aguas Blancas.
Mientras que el regidor perredista Vladimir Beciez Romero preguntó si habrá reducción en eventos del programa Viernes Saludable.

Por falta de tierras la SRA indemnizará sólo a ejidatarios de El Salto y Metlapil






El comisariado ejidal de El Salto y Metlapil, Amador Olea Genchi, informó que la Secretaría de la Reforma Agraria (SRA) sólo podría indemnizar a los ejidatarios de este poblado “porque ya no hay tierras” para que les entregue las 547 hectáreas que por decreto presidencial les adeuda.
Indicó que el 12 de enero se tendrá la audiencia en el Juzgado Tercero donde se presentarán los abogados de la SRA y los ejidatarios para mostrar sus pruebas y testimonios.
Mencionó que en los límites del ejido “no hay tierras” para entregarles a los ejidatarios y las pocas que hay “están invadidas”, por ello no aceptarían estos terrenos; “ya nos hicieron así la vez pasada, nos dieron tierras invadidas y los que estaban allí se quedaron con más que nosotros”.
Olea Genchi dijo que el día de la audiencia los ejidatarios inconformes no harán plantones ni protestas, “sin escándalo, sólo los testigos”.
De acuerdo con copias de documentos oficiales que los ejidatarios entregaron a El Sur, desde 1962 no se les han entregado 547 hectáreas donde la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y el gobierno del estado construyen los accesos para la presa La Parota.
El documento agrega que el “27 de noviembre de 1957 el gobernador del estado realizó un fallo definitivo en beneficio de nuestro ejido dotándolo de una superficie de 913 hectáreas, resolución presidencial publicada el 29 de mayo de 1962 en el Diario Oficial de la Federación”.
Señala que el 16 de abril 1993 la SRA entregó “365 hectáreas guión 80 hectáreas” pero sólo a ocho ejidatarios, cuando son 88, “argumentando que no existían predios baldíos para cumplir el mandato presidencial”.
Dice que el 1 de diciembre de este año los representantes de la delegación de la Reforma Agraria les explicaron que el asunto estaba finiquitado y que sólo les hacían una dotación parcial “y al resto de los beneficiados ya no se nos entregarían nuestras parcelas”.