Ofrece Héctor Astudillo colaborar en favor de la gobernabilidad en Guerrero

El ex gobernador Héctor Astudillo responde a preguntas de los reporteros en el salón Cuicalli de Chilpancingo este viernes Foto: Jessica Torres Barrera

Emiliano Tizapa Lucena

Chilpancingo

El ex gobernador Héctor Astudillo Flores, afirmó que la seguridad nacional pasa por Guerrero, el cual primero necesita gobernabilidad para que no vuelva a estar “en llamas”. El priista expuso que no dará declaraciones en contra ni a favor del gobierno en turno, de la morenista Evelyn Salgado, pero sostuvo que Guerrero es un estado difícil y complejo para quien lo gobierne.
Tras recibir ayer en Chilpancingo a la senadora Beatriz Paredes Rangel, quien habló de sus aspiraciones presidenciales, Astudillo Flores también manifestó que ha encontrado en el país “una enorme inconformidad de muchos que apoyaron y le dieron su voto a quien gobierna, al Ejecutivo de este país”, por lo que es necesario pensar en la captación de votos de estudiantes y familias que son necesarias para la oposición en la contienda presidencial de 2024.
La mañana de este viernes, la senadora priista Beatriz Paredes Rangel se reunió con militantes y sociedad civil de Chilpancingo, en el salón Cuicalli, ubicado en el bulevar del río Huacapa, en el barrio de Santa Cruz, con los grupos del ex gobernador Astudillo Flores y del senador Manuel Añorve Baños, principalmente.
En declaraciones a los medios, al concluir el primero de dos encuentros que tuvo la senadora, Astudillo Flores afirmó que no se puede pensar que frente a la necesidad de una gran alianza “alguien pueda por sí sola o por sí solo, se requiere de la aportación de todos los que tienen aspiraciones (presidenciales)”.
Paredes Rangel es la tercera priista que visita Guerrero para hablar de sus aspiraciones a la Presidencia. En diciembre pasado estuvo el ex secretario de Turismo federal en el gobierno de Enrique Peña Nieto, Enrique de la Madrid Cordero. A finales de marzo la senadora Claudia Ruiz Massieu tuvo una gira en la entidad, y aseguró que le encantaría que en 2024 la contienda a la presidencia de la República fuera entre “Claudias”, en referencia a la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, quien busca abanderar a Morena.
El ex gobernador afirmó que Beatriz Paredes conoce el país, tiene trayectoria y es un personaje muy completo de la política nacional: “sin duda estoy con Beatriz Paredes, sin olvidar que merece todo mi respeto, personas como Claudia Ruiz Massieu que estuvo en Guerrero, mi respeto también para el licenciado De la Madrid”, a quienes dijo es necesario incorporarlos a los trabajos de una gran alianza.
Argumentó que los 30 millones de votos que tuvo Andrés Manuel López Obrador cuando ganó la presidencia, son un punto de partida, pero que él ha encontrado en las regiones del país donde se mueve “una enorme inconformidad de muchos que apoyaron y le dieron su voto a quien gobierna”.
Indicó que por eso deben trabajar “en la captación no solamente del voto de los partidos políticos, sino de muchos jóvenes que están todavía estudiando, de muchas familias que no militan en los partidos políticos y que hoy más que nunca son necesarios para que este país pueda tener otro futuro”.
Criticó que es buen momento para llamar a la unidad y detener la destrucción de instituciones o el debilitamiento, como el último intento en el que dijo participaron “las cúpulas de los partidos políticos” para retirarle facultades al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (Trife).
Manifestó que en la gran alianza se debe concentrar en un solo camino a todos los aspirantes no solo del PRI sino también del PAN y PRD, como a Santiago Creel y Silvano Aureoles, “para hacer un gran llamado al país, a quienes no están en los partidos políticos, para poder realmente competir con quien sea la figura que nos va a representar y poder darle otro cauce a este país”.
Destacó que “el candidato no va a ser Andrés Manuel López Obrador”, y que sus aspirantes a candidato presidencial no tienen fuerza, sino “están fuertes como partido político”, pero Morena no está “en las mismas condiciones de hace cinco o seis años, y contará mucho todo lo que se pueda reclutar en términos políticos electorales en favor de una posible gran alianza”.
“Vamos a caminar en la búsqueda de que quien pueda encabezar esta gran alianza, pueda dar la pelea para que este país sea un país más unido, que hable más de leyes, un país que fortalezca y recupere las instituciones que se han debilitado, que se han perdido…y que un presidente o una presidenta a futuro nunca más divida a México”, comentó.
Héctor Astudillo dijo que la elección del Estado de México será muy interesante rumbo al 2024, y espera que la priista Alejandra del Moral dé una gran batalla y gane las elecciones.
Acerca del dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, dijo que no representa la unidad, sino un gran desgaste, que el Trife afortunadamente tienen en sus manos lo que pueda suceder en agosto, “estoy convencido de que es un asunto que debe determinarse, que debe de concluir su mandato en agosto, para darle paso a quien sea, el que llegue será menos malo”.
Se le preguntó su opinión de que el obispo emerito, Salvador Rangel Mendoza. Afirmó haber pactado con un grupo criminal para que se llevara la Semana Santa en Taxco. Respondió que cuando fue gobernador siempre respetó las opiniones del obispo y seguía en esa ruta.
De que el obispo José de Jesús González mencionó que había condiciones para levantamientos armados, Astudillo Flores reiteró que respetaba la opinión de la iglesia, y que entre todos se debe contribuir para que el estado pueda mantener la gobernabilidad, porque es “lo primero que necesita”.
“Yo siempre apostaré, colaboraré para que esta tierra, que en diversas etapas recientes ha estado en llamas, en conflictos, yo contribuiré para que eso no vuelva a suceder”, afirmó.
Expuso que en este momento no estaba en condiciones de declarar en contra ni en favor del gobierno en turno, “vengo de ser gobernador… es un estado muy difícil, es muy complejo para quien lo gobierne, y quienes lo hemos gobernado, sabemos perfectamente de la dificultad de gobernar un estado con conflictos diarios”.
Expresó que se vería mal criticando o alabando al gobierno actual, y en su momento volverá a hablar. No obstante, mencionó que “Guerrero siempre es preocupante, no hoy, cuando yo fui gobernador y cuando fueron gobernadores otros, Guerrero siempre será un estado no solamente de preocupación, sino de ocupación nacional, la seguridad nacional pasa por Guerrero”.

 

 

La violencia en Guerrero, problema ancestral que lo agrava hoy el narcotráfico: Astudillo

Zacarias Cervantes

Chilpancingo

A un año y más de tres meses de que dejó el cargo, el ex gobernador Héctor Astudillo Flores declaró que el problema que daña la imagen y a la economía de Guerrero es la violencia, que en el caso de la entidad es histórica, y en la actualidad se le ha sumado el tema del narcotráfico.
Matizó, sin embargo, que el problema de la violencia no es de hace seis años, ni de ocho años, “ni es un asunto que tenga que ver o que trajo la actual gobernadora, o Héctor Astudillo, o quien me antecedió en el gobierno; la violencia es un problema verdaderamente compenetrado en la vida histórica de Guerrero”.
En entrevista en su casa el pasado martes, y mientras se conocían noticias de enfrentamientos en la Costa Grande y en la Sierra entre grupos delictivos que llevan semanas confrontados, el ex gobernador declaró que Guerrero siempre será un estado complicado para gobernar, “quien piense que por el cambio de un gobernante Guerrero va a cambiar está equivocado”, dijo cuando se le preguntó si está fallando la estrategia de seguridad en la entidad.
“Tenemos una historia de violencia, pero hoy con otro tipo de problema que es el narcotráfico, fundamentalmente”, y ahora ve al gobierno actual “con los mismos problemas que yo también tuve; ojalá y que a la gobernadora (Evelyn Salgado) y a su equipo les vaya bien”, atajó dando por cerrado el tema.
El ex mandatario estatal platicó la tarde del martes con un grupo de reporteros en su casa sobre diversos asuntos. Uno de ellos fue cómo quedó su relación con el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, de quien en su momento se dijo le ofreció un espacio en el gobierno. Se especuló que sería una embajada.
“Fue una relación que terminó bien, de manera educada, respetuosa. Recibí atenciones del presidente y yo fui siempre educado con él”, dijo.
–¿Le ofreció algún cargo, se dijo, incluso, que sería una embajada?
–Se especuló, hablamos muchas cosas, por supuesto que hubo cosas, ofrecimientos, pero al final de cuentas yo estoy complacido de que las cosas hayan quedado como quedaron.
–¿Se siente engañado por el presidente?
–De ninguna manera, yo me siento muy a gusto como estoy, estoy en paz.
“Yo siento que el presidente es un político con habilidades muy desarrolladas, no lo vi como un engaño porque yo no se lo pedí, no se lo planteé y (por) lo que él me haya ofrecido y no se dio, yo estoy a gusto como estoy”.
Explicó que lo que hablaron (sobre los ofrecimientos) “fueron asuntos como los que se hablan muchas veces en la política”.
Recordó incluso que cuando se despidió de él dos días antes de que dejara el gobierno, López Obrador lo felicitó: “me dijo que terminar los seis años en Guerrero era una hazaña y yo se lo agradecí”.

Pide que López Obrador voltee a ver al sur, no solo al sureste

Astudillo dijo que siendo gobernador conversó con el presidente con respecto a lo que se podría hacer por Guerrero y que la conclusión a la que se llegó fue sólo avanzar en la carretera de Acapulco hacia Oaxaca, misma que ya tiene grandes avances.
“Le hice el planteamiento de que avanzáramos también hacia Zihuatanejo, pero en una ocasión que vino me planteó que si no tenía inconveniente que avanzáramos hacia Oaxaca, y yo le dije que no tenía inconveniente”.
El ex gobernador declaró que para el presidente su proyecto en Guerrero son los programas sociales, para los que la entidad tiene una “gran recepción” de dinero a través de los programas sociales, “y en todo lo demás no está Guerrero, ojalá en el último tiempo que esté como presidente pudiera poner los ojos y el corazón en Guerrero, como un día le dije”.
Y a manera de reproche, dijo: “Yo creo que el presidente ha mirado mucho al sureste y nosotros no estamos en el sureste, estamos en el sur”.
Astudillo Flores planteó, aparte, que “sería grave” si las obras que hace el presidente en otras partes del país no se terminan en su periodo de gobierno.
“El presidente se planeó durante mucho tiempo como tendría que ser su actitud cuando fuera presidente, pero a lo mejor no se planeó lo de las obras; el aeropuerto, la refinería, el Tren Maya, y al final de cuentas está en riesgo todo lo que el presidente está haciendo, y si no se termina, sería muy grave”.
Añadió que también ve que está terminando su gobierno con muchas fricciones con distintos grupos sociales.
“Hay una especie como de fricción frecuente casi diaria con muchos grupos que en su momento lo apoyaron, eso no lo invento yo, se ve todos los días: con académicos, periodistas, intelectuales, actores, con grupos sociales”.
En este ambiente habló también del destino del PRI, “en lo interno y en lo externo”.
Explicó que en lo interno está viviendo un proceso en condiciones más difíciles de lo que de por sí estaba derivado del diferendo con la dirigencia nacional, “en el cual no solamente yo participo, y no es un diferendo de asuntos personales, sino de actitudes de la persona que está al frente del PRI nacional, que no compartimos”.
Agregó que hoy más que nunca, como está la política en México, se requiere de mucha habilidad, prospectiva y mucha honorabilidad, “y estas características no las tiene ni un milímetro el presidente (nacional) del PRI (Alejandro Moreno)”.
Sin embargo, agregó que hay quienes lo defienden “y somos respetuosos de eso, creo que al final de cuentas cada quien sabe por qué está en cada una de las posiciones, yo seguiré mi ruta tratando de dar mis razones del por qué no comparto esa actitud de quien está al frente del PRI, que yo creo todavía puede dar cosas positivas al país en asuntos económicos, sociales y políticos”.

En lo externo, vio bueno que se estén presentando movimientos y expresiones que cobran importancia con miras a la competencia por la presidencia de la República, el Congreso de la Unión, los congresos locales, ayuntamientos y algunas gubernaturas.
“Yo creo que poco a poco se va a ir dando una mayor estructuración en todas las expresiones que se están formando en el país”, declaró.
“Y en estas estructuraciones que se están dando en el país, voy a estar con un grupo de amigos, amigas y compañeros, no para descalificar, no para denostar, no para confrontar, sino para aportar”, adelantó.
Explicó que en su caso ya fue gobernador “y no tengo interés de andarme entrometiendo en asuntos estatales, pero eso no me priva de que participe en política, porque si bien es cierto mi etapa en Guerrero como gobernador terminó, no mi vida política”.
En este ambiente de lo externo, dijo que el PRI se irá acomodando “porque el priismo es mucho mayor que cualquier dirigencia; la fuerza del priismo del país y de Guerrero es mucho mayor que cualquier dirigente.
Opinó que las expresiones políticas sociales de la sociedad que se están dando como el Colectivo por México que se presentó el martes se van construyendo poco a poco para que la elección del 2024, sea altamente interesante con la participación ciudadana”.
Opinó que hoy “más que hacerle caso a los partidos políticos que son importantes, hay que hacerle mucho caso a la sociedad civil, y ahí vería yo a priistas participando en los ecos de lo que se están aportando como ideas más frescas en lo que es la participación política del país”.
Explicó que en esta ruta, el PRI, tendrá que irse acomodando a sus circunstancias “porque yo veo más fuerza en las bases del PRI que en la dirigencia nacional porque la dirigencia nacional sola poco puede hacer, la fuerza está en las bases”.
Para el ex gobernador priista no es imposible que con estas fuerzas de la sociedad civil, derrotar a Morena en las próximas elecciones.
“En cualquier elección lo que se tiene que encontrar son causas y creo que hay causas como para competir en la próxima elección”.
Agregó que aún cuando las encuestas dicen una cosa, realmente la población está inconforme; “hay muchas voces que se expresan en contrario y esas voces se van a ir sumando, se va a ir construyendo el movimiento, y así fue como le dieron el descalabro al PRI”, recordó.
Astudillo Flores, añadió que nadie tiene comprada la historia a su favor y en su contra, al final todo cambia, y claro que se puede repetir la historia del PRI.
Celebró la alianza que se presentó el martes, en referencia al Colectivo por México; “es una alianza que está enfrente, y los tiempos que eran de partidos omnipotentes, ahora son de alianzas y creo que las alianzas van a marcar el rumbo del país”.

Su diferendo con Alito no lo llevará a una guerra con priistas de Guerrero

El ex gobernador volvió a criticar al dirigente nacional de su partido, el PRI. Dijo que “la cajita que tiene en su cabeza es no cumplir su palabra y ahí va a seguir; ya sucedió el incumplimiento con la alianza (con el PAN y PRD), y está sucediendo con muchísimos asuntos, y yo creo que por ahí va a seguir”.
Pero opinó que el peor error que cometerían los priistas es pensar que por la actitud del “famoso Alito” deben salir corriendo; “hay que dar la batalla adentro y hay que insistir en que tenemos un presidente del PRI que no está cumpliendo con las bases, que está cumpliendo con sus asuntos personales y de su grupo cercano”.
Se le preguntó cuál es su relación con los priistas que apoyan a Alejandro Moreno en Guerrero, uno de ellos el senador Manuel Añorve. “Con ellos no me meto, debo actuar con prudencia y con cuidado político, porque al final de cuentas, después de ser gobernador terminar peleado porque no le reconozco ninguna honorabilidad al presidente del PRI, sería un grave error”.
Añadió que hay algunos priistas que sí le ven algunos “destellos de honorabilidad, yo no se los reconozco, pero lo que no voy a hacer es una guerra en Guerrero por el tema de este personaje, porque al final de cuentas este personaje tarde que temprano se va a ir y los guerrerenses que estamos aquí, al final de cuentas muchos vamos a permanecer”.
Añadió que su partido tiene que cumplir históricamente con lo que todavía le corresponde hacer en este país.
Reconoció que el recurso que presentó en contra de Alito Moreno por la ampliación de su periodo al frente de la dirigencia nacional no lo ve sencillo, “porque no es fácil, pero al final va a quedar constancia que alguien dijo que es impresentable, que no cumple su palabra y públicamente ha sido acusado de muchos temas que se encuadran en delitos, y yo estoy donde tengo que estar”.

 

Espera Astudillo que el INE resuelva contra la ampliación del periodo de Alito en el PRI

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

El ex gobernador Héctor Astudillo Flores declaró que espera que el Instituto Nacional Electoral (INE) resuelva a favor del recurso que presentó en contra de la ampliación del periodo del presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas.
En declaraciones antes y después de la presentación del libro Alejandro Cervantes Delgado; congruencia entre discurso y hechos, el ex gobernador evadió opinar del trabajo de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda a la que le entregó en octubre del 2021, así como del gobierno federal que encabeza Andrés Manuel López Obrador.
El político priista sólo respondió a preguntas sobre la queja contra la ampliación del periAlejandro Moreno Cárdenas, Alito.
Declaró que la ampliación del período del dirigente de su partido “rompe con los equilibrios del sentido de la reforma y que seguramente esto será valorado por el INE para resolver a favor del recurso que presentó en contra de esa reforma.
“El INE deberá resolver seguramente en los próximos días y entiendo que ha seguido recibiendo no solamente más recursos, sino también una serie de planteamientos adyacentes y opiniones que me parecen muy importantes y que tienen que ver con el análisis de las motivaciones”, explicó el ex mandatario antes de que comentara el libro.
Agregó que el INE debe invalidar las reformas que aprobó el Consejo Político Nacional (CPN) y agregó que una de las razones es porque “fueron orientadas para favorecer a quien está en este momento presidiendo el PRI”.
Argumentó que lo aprobado rompe los equilibrios del partido y trasgrede no solo las leyes, sino los reglamentos de los organismos electorales, “que prevén que las reformas no sean en beneficio propio”.
Añadió que en contra de esta reforma ha habido una serie diálogos y acercamientos que, dijo, espera sean valorados cuando se tome la determinación por el INE, frente a las impugnaciones que se hicieron y que le fueron remitidas por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (Trife).
A pregunta expresa de otro reportero respecto a la defensa de dicha reforma por parte del senador priista Manuel Añorve Baños y de su llamado a la unidad del priismo, frente al proceso electoral que se avecina, Astudillo respondi que el problema no es entre el priismo, sino con la cúpula priista “y la cúpula de los partidos políticos en muchas partes del mundo están atravesando por una crisis de credibilidad y es lo que yo creo que está pasando aquí”.
Añadió que en Guerrero no hay un problema de división en la base, sino sólo entre las cúpulas del PRI.

Si el INE no resuelve a favor llevaría el caso al Tribunal electoral

El ex gobernador declaró que si el INE no resuelve a favor “vamos a recurrir al Tribunal, es decir, no es un asunto que vaya a terminar en los próximos días”.
Un reportero le preguntó si el recurso no es motivo de división en su partido, y respondió que “en todos los partidos políticos hay diferendos de opiniones y mi opinión está basada en que hay, como lo expresé en mi renuncia ante el Consejo Político Nacional, una acción que para mí fue un abuso, fue una reforma que no se informó ni se explicó y yo estoy convencido que estoy en lo correcto”, dijo.
Con respecto al proceso interno en Guerrero con miras a las elecciones del próximo año, sobre todo a las candidaturas para senador, en la que se le menciona como uno de los aspirantes, dijo que le parece “muy normal que haya expresiones en las que se comienzan a señalar nombres y a hacer promociones”.
Y aprovechó para referirse a la reforma electoral, en contra de la que hay recursos de inconstitucionalidad. Opinó que esa reforma tiene que ver precisamente con evitar que lo que se avanzó para regular las precampañas se retire, “porque como está planteada la reforma actualmente, una de las cuestiones que tiene es que se va a soltar mucho la reglamentación que ya se tenía para vigilar por parte del INE las precampañas anticipadas, el uso de recursos públicos y es uno de los problemas” de esta reforma, dijo.
Cuando se le preguntó que si tiene interés en ser candidato a senador, dijo que sólo le mueve el interés de que a Guerrero le vaya bien.
Astudillo evitó por otra parte hablar de la violencia. Cuando dejó el cargo, la entidad ocupaba el décimo lugar en homicidios dolosos, y actualmente, en el primer año de gobierno de la morenista Evelyn Salgado Pineda, descendió al octavo lugar, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
–¿Que ve desde afuera que está pasando, que no se ha hecho o no se hace? –se le preguntó.
–Sin comentarios –atajó, y dio por terminada la entrevista.
En una segunda entrevista después de la presentación del libro, cuando le preguntaron si ante el trabajo para la estabilidad del estado que realizó el finado gobernador Alejandro Cervantes Delgado, los gobiernos de ahora están polarizando el país, dijo que Cervantes Delgado “fue un guerrerense comprometido con Guerrero; un guerrerense con ética y con decencia política en la función pública”.
–¿Se está polarizando la política en el país? -. insistió un reportero.
–Yo siento que atravesamos una etapa de polarización diaria, por eso ya se habla que el slogan del futuro candidato, o candidata, (a la presidencia de la República) debe ser de reconciliación –expuso y volvió a cortar la entrevista.