Unos 10 de los 24 policías municipales despedidos protestaron frente al Ayuntamiento de Chilpancingo para exigir su liquidación conforme a la ley, de acuerdo con los años laborados en la corporación y una audiencia con el alcalde priista Marco Antonio Leyva Mena.
A las 11 de la mañana los agentes despedidos llegaron a la puerta principal del Palacio Municipal frente a la avenida Ignacio Ramírez y sin obstruir el paso mostraron a los automovilistas pancartas que decían, “Nosotros no somos drogadictos”, “Exigimos la liberación de nuestras quincenas”, “Pedimos la intervención del gobernador”, “Por eso te dicen presidente MAL”.
Los manifestantes negaron que 10 de sus compañeros fueran despedidos porque reprobaron el examen toxicológico, como lo declaró el alcalde el domingo pasado, además informaron que dos de los 24 agentes ya aceptaron la liquidación de 29 mil pesos del programa de Fortalecimiento para la Seguridad (Fortaseg), la cual consideran insuficiente.
El policía despedido, Francisco Limón Tomás comentó que no han sido atendidos por el presidente Marco Antonio Leyva para tratar el problema de liquidación, ya que no toman en cuenta los años laborados en la corporación.
Dijo que la federación por medio del Fortaseg le entrega 29 mil pesos a cada policía dado de baja como liquidación mientras que el municipio no ha informado si les otorgarán el finiquito.
Agregó que el Ayuntamiento no ha respondido las peticiones del Tribunal de lo Contencioso para que continúe el proceso de la demanda laboral, “les han pedido los resultados de la evaluación de control y confianza y el tabulador del salario no nos lo han entregado”.
Limón Tomás negó las declaraciones del alcalde de que agentes municipales reprobaron el examen toxicológico y que otros 14 de ellos serán reinstalados en otras áreas del Ayuntamiento.
“El presidente de Chilpancingo no nos ha informado de lo que declaró a los medios de comunicación, y que nos hagan un examen antidoping a los policías municipales despedidos porque no somos drogadictos como lo dice el alcalde, por eso pedimos una audiencia” declaró.
Exigió al Ayuntamiento de Chilpancingo el pago de bono de vivienda de 11 mil pesos que desde el 2015 les adeudan, al igual que los policías municipales activos.
Por otro lado, una ex policía recordó que lleva nueve años en la corporación y que no ha tenido ningún arresto o faltas, “es injusto que al no cometer ninguna falta me hagan esto, ahora no tengo un trabajo para sustentar a mis hijos, ahora mi familia me apoya mientras reciba mi liquidación que me corresponde de los años laborados”.
A la protesta acudió el secretario general del Ayuntamiento, Gustavo Adolfo Morlet Berdejo, ahí los inconformes le reclamaron que en las notificaciones donde les informaban la baja no estaban los resultados del examen de control de confianza.
Después en una reunión con Morlet Berdeja los policías reprocharon que no interviene en su situación laboral para ser liquidados conforme a la ley de acuerdo a los años laborados, y lo acusaron de no informarles los resultados de la evaluación.
Los agentes consideraron que el despido fue en represalia ya que en octubre pasado en una protesta en el cuartel de la Policía Municipal amarraron al encargado del Fortaseg, Efraín Zúñiga Cortés.
Una ex policía se quejó que por su despido injustificado ha afectado el ingreso económico para su familia, “he buscado trabajo para llevar el sustento para mi familia pero desgraciadamente no hay trabajo, es muy difícil para mi y mis hijos”.
Los agentes despedidos pidieron al secretario general del Ayuntamiento que sean reevaluados en el examen de control y confianza y les entreguen los resultados.
Por su parte, Gustavo Adolfo Morlet Berdeja explicó a los inconformes que la evaluación la hizo la federación y le notificó al municipio que 24 agentes fueron dados de baja, “nosotros no intervenimos con los resultados de la evaluación, eso nos lo manda la federación”.
En cuanto a la liquidación, Morlet Berdeja señaló que el Fortaseg para cada municipal dado de baja les entrega 29 mil pesos, mientras que el municipio les pagará otra cantidad de dinero de acuerdo a los años laborados en la corporación.
Informó que les entregará a los 22 policías inconformes el formato de liquidación para verificar si están de acuerdo del pago del finiquito o no para evitar inconformidad.
Los agentes aceptaron la propuesta del funcionario municipal y acordaron que la tarde de hoy tendrán una reunión en el Ayuntamiento para tratar la liquidación que le corresponde, el pago de dos quincenas retenidas y la entrega del bono de vivienda de 11 mil pesos que se les adeuda desde el 2015.
El 28 y 29 de diciembre el Ayuntamiento entregó un oficio fechado el 15 de ese mes informando que 24 policías fueron dados de baja por reprobar los exámenes de control y confianza, sin embargo en el documento no estaban los resultados de la evaluación.
El 11 de enero, los policías municipales de Chilpancingo se quejaron de que el Ayuntamiento les notificó que están dados de baja sin explicarles el motivo y exigieron al alcalde Leyva Mena y al secretario de Seguridad Pública, Esteban Espinosa Montoya, que intervengan para resolver su situación laboral.