Buscará acercarse a simpatizantes del FUSDEG, dice la UPOEG tras la toma de El Ocotito

Durante el segundo día de ocupación de El Ocotito, municipio de Chilpancingo, de policías ciudadanos de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) llegaron al pueblo 19 patrullas de la Fuerza Estatal y decenas de uniformados se pusieron cerca de la carretera.
La Policía Estatal llegó y se colocó en la entrada del pueblo rumbo a Juan R. Escudero (Tierra Colorada), municipio hacia donde se replegó el Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG).
Mientras que la UPOEG informó que buscará un acercamiento con los vecinos que simpatizan con el FUSDEG.
En tres entradas del pueblo hay retenes de la Policía Ciudadana de la UPOEG: en la que va hacia Chilpancingo y una que lleva a la Autopista del Sol y la parte serrana, mientras que la salida hacia Tierra Colorada está fuertemente reforzada con 19 patrullas de la Fuerza Estatal y decenas de policías.
En un recorrido por la población se vio a una de las patrullas circular por la calle principal de la comunidad, mientras las otras 18 permanecían en la entrada.
En el pueblo aparentemente continúan las actividades normalmente, el pequeño mercado estaba activo y todos los negocios abiertos.
Consultado el la noche el comisario Gil Ramírez Cortes (desconocido por el Ayuntamiento de Chilpancingo) afirmó que “la gente está contenta y recuperando la confianza, la pesadilla terminó para nosotros”.
Comentó que en la tarde tuvieron una asamblea en la Comisaría y los acuerdos con la UPOEG fueron “reestructurar y levantar el pueblo en todos los aspectos, porque fue muy lastimado por estos compañeros”, y enviar el mensaje a los ciudadanos de que tienen la capacidad de darles seguridad “con paz”.
Otro de los acuerdos fue que buscarían a los vecinos de la población que estaban con el FUSDEG, “porque fueron engañados” y si quieren acercarse a la UPOEG los aceptarán.
En la reunión estuvieron unas 70 personas entre consejeros y asesores de la Comisaría, quienes acordaron difundir los acuerdos entre la población.
Dijo que hasta ayer en la noche ninguna autoridad del estado ni del municipio los ha buscado para conocer la situación en la comunidad, que únicamente llegaron las patrullas.

Toman la caseta a Tixtla normalistas de Ayotzinapa; piden dinero para apoyar su movimiento

Estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa tomaron ayer dos horas la caseta de cobro del nuevo libramiento a Tixtla.
Los normalistas permitieron el paso a los automovilistas, a quienes pedían una cooperación voluntaria para el sustento de la escuela y el movimiento que encabezan los padres de los 43 estudiantes desaparecidos. También sustrajeron diesel del tanque de un camión pesado.
Desde las 11 de la mañana, los normalistas llegaron a la caseta de cobro que se encuentra a unos 4 kilómetros de la escuela, a bordo de dos autobuses de la Estrella de Oro. Todos llevaban el rostro cubierto.
Se supo que, a la llegada de los normalistas los trabajadores de la caseta dejaron sus módulos y no opusieron resistencia.
Ahí, los estudiantes permitieron el paso de todos los automovilistas a quienes les una pedían cooperación voluntaria, además se observó que a un camión pesado le sustrajeron una garrafa de diesel.
Los estudiantes explicaron que, poco antes del mediodía, cuatro patrullas se acercaron a la caseta y un oficial les preguntó si les permitirían el paso, porque más tarde se trasladarían a Chilpancingo; “les dijimos que el paso era libre para todos, no estamos bloqueando, sólo pedimos apoyo voluntario”, explicó uno de los normalistas, y aseguró que los policías estaban en Tixtla para resguardar la toma de protesta del nuevo alcalde Hossein Nabor Guillén, que se celebró en el auditorio del Ayuntamiento.
Aclararon que la actividad era solamente para pedir cooperación destinada al sustento de la Normal y al movimiento, y nada tenía que ver con la toma de posesión de Nabor Guillén.
A 2 kilómetros de la caseta, en el crucero que comunica al municipio de Apango, había un retén de la Fuerza Estatal con unos 15 uniformados armados en cuatro patrullas, pero a decir de los estudiantes no hubo un intento de desalojo.
Después de dos horas, los normalistas se retiraron del lugar.

Con escopetas, instalan tres retenes contra el crimen organizado vecinos de Zotoltitlán, Mártir de Cuilapan

Los vecinos de la comunidad indígena de Zotoltitlán, municipio de Mártir de Cuilapan, armados con escopetas, machetes y palos instalaron a las 7 de la mañana del domingo tres retenes en la entrada del pueblo para defenderse de los grupos del crimen organizado, que han dejado un muerto y un desaparecido en las últimas dos semanas.
El caso más reciente, que desbordó la inconformidad, ocurrió el miércoles 20 de enero, cuando hombres no identificados levantaron a un vecino y hasta la tarde de ayer no había sido localizado.
El pueblo de Zotoltitlán tiene 2 mil habitantes, y está a 25 minutos en carro al poniente de Apango, del municipio de Mártir de Cuilapan.
Las casas bordean la carretera hacia Zitlala; La Esperanza-Zotoltitlán-Apango-Atliaca-Tixtla es un corredor en disputa por los grupos criminales Los Ardillos y Los Rojos.
La tarde del miércoles en Zotoltilán hombres no identificados se llevaron al campesino Anselmo García y hasta la tarde de ayer no se sabía de su paradero; sus familiares sólo han recibido mensajes de texto de su teléfono celular, dice que ya no lo sigan buscando, porque se encuentra bien.
Los vecinos del pueblo lo empezaron a buscar el jueves, además presentaron la denuncia ante el Ministerio Público, sin embargo, hasta el sábado no habían tenido respuesta.
Por este motivo, ayer a las 7 de la mañana se armaron con escopetas, machetes y palos para instalar tres retenes, dos rumbo a Apango y otro en un camino hacia Zitlala.
Se supo que se suspendió el servicio de transporte público de Apango-Zotoltitlán, y los vecinos sólo podían llegar caminando o en carros particulares.
Los vecinos armados y encapuchados se negaron a hacer declaraciones a los medios de comunicación.
Fuentes del Ayuntamiento informaron que la presidenta municipal del Movimiento Ciudadano, Felicitas Muñiz Gómez, acudió al pueblo a las 2 de la tarde, acompañada de agentes del Ministerio Público para tomar la declaración de la esposa y los familiares del desaparecido e iniciar las investigaciones para dar con el paradero de Anselmo García.
En un recorrido por la cabecera municipal se observaron entre 18 y 20 policías de la Fuerza Estatal a bordo de tres patrullas y una ambulancia de Protección Civil, sin embargo, los policías dijeron que no sabían si fueron enviados por el conflicto en Zotoltitlán, a las 5 de la tarde aún esperaban instrucciones.
Otros funcionarios del Ayuntamiento que pidieron no ser citados, informaron que antes de la desaparición de Anselmo García, hace dos semanas, un campesino del mismo pueblo fue encontrado degollado, sin dar con los responsables.
La fuente reconoció que hay temor e indignación entre los vecinos de Zotoltitlán por los hechos de violencia que han ocurrido en los últimos días, sin que las fuerzas federales y estatales atiendan el problema a pesar de que han denunciado los hechos.
La comunidad se encuentra en el territorio que se disputan los grupos criminales Los Ardillos y Los Rojos, conflicto que inició hace dos años en Chilapa, después se trasladó a Zitlala, y ahora a Apango la cabecera de Mártir de Cuilapa, ya que hay una carretera que conecta con Zitlala, pasando por las comunidades de La Esperanza y Zotoltitlán hasta llegar a Apango, los tres pueblos de Mártir de Cuilapan y de allí retorna a Tixtla.
La violencia ha comenzado a afectar a comunidades de Mártir de Cuilapan, por eso los vecinos de Zotoltitlán se armaron, pero se rehusaron a hablar con los reporteros de los medios de comunicación.
Hasta las 7:30 de la noche se encontró vía telefónica a la presidenta municipal, pero informó que continuaba en una reunión y no precisó si seguía en esta comunidad.
Dijo que después se comunicaría con el reportero, pero ya no fue posible localizarla para conocer su postura respecto a estos hechos.
A esa hora, fuentes de la cabecera municipal confirmaron que los retenes instalados por los habitantes armados continuaban en los accesos a Zotoltitlán.

Violencia en la sierra de Chichihualco; ataque en Izotepec y enfrentamiento a balazos en Yextla

Fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública estatal informaron que hubo dos heridos en un enfrentamiento a balazos en Yextla, y en la comunidad vecina de Izotepec, municipio de Leonardo Bravo (Chichihualco), pistoleros irrumpieron y atacaron a la población.
A las 7:50 de la mañana de ayer tuvieron reportes de que más de 50 hombres armados atacaban a la población en Izotepec, y los vecinos pedían la ayuda de las autoridades, informaron.
Según otra versión, civiles armados escondidos en los cerros dispararon en contra de vecinos de la comunidad de Izotepec, y policías ciudadanos de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) repelieron la agresión.
Unos 40 minutos después, se informó que había balaceras en las calles de la comunidad de Yextla, que los habitantes estaban en pánico, se resguardaron en sus casas y solicitaron el apoyo de las policías federal y estatal.
Ayer, hombres armados irrumpieron en la comunidad de Yextla, municipio de Leonardo Bravo (Chichihualco), y se enfrentaron a balazos con vecinos de la localidad, dejando dos personas heridas. Seis horas después del enfrentamiento, llegó la Policía Estatal y militares para resguardar la zona.
Minutos antes de la 1 de la tarde, la Dirección de Comunicación Social del gobierno del estado confirmó que ayer ocurrió un enfrentamiento en la comunidad de Yextla, municipio de Leonardo Bravo (Chichihualco), luego de que durante la mañana hubo versiones de que hombres armados se enfrentaban en Yextla y en la localidad vecina de Izotepec, en la sierra.
La dependencia informó mediante las redes sociales Facebook y Twitter que la Policía Estatal ya se encontraba en Yextla, que el tiroteo había terminado y que un helicóptero del gobierno del estado sobrevolaba la zona por si fuera necesario trasladar a algún herido.
No se precisó si hubo personas muertas o heridas luego del ataque a Izotepec y el enfrentamiento en Yextla.
Las comunidades de Yextla e Izotepec se ubican cerca del poblado de Polixtepec, donde la medianoche del domingo 22 de noviembre hombres armados irrumpieron y mataron a cuatro vecinos: una mujer adulta y tres de sus hijos jóvenes, entre éstos una mujer, y se llevaron a dos campesinos.
A las 5:30 de la tarde, el secretario de Seguridad Pública, Pedro Almazán Cervantes leyó un comunicado para informar que, después de lo que ocurrió en Yextla realizaron un operativo en el que participaron 35 policías estatales destacamentados en Polixtepec, 25 de Chilpancingo y siete a bordo de un helicóptero se trasladaron a la localidad; éstos fueron apoyados por dos helicópteros de la Fuerza Aérea Mexicana y 106 militares.
Pero al entrar a la comunidad de Izotepec el convoy de los agentes de la Policía Estatal, en la carretera encontraron pinos y árboles atravesados que les impidieron el paso; los mismos policías quitaron los árboles.
Almazán Cervantes dijo que en este hecho violento no hubo muertos, y no precisó a qué organización pertenece el grupo criminal que irrumpió en Yextla, porque no hay una denuncia formal de los afectados.
Señaló que 50 hombres armados irrumpieron en la localidad y huyeron del lugar ante la presencia de los policías.
Almazán Cervantes dijo que no tenía conocimiento sobre la defensa que hicieron del poblado los policías ciudadanos de la UPOEG, y que tiene previsto un recorrido a Izotepec para investigar.
Señaló que el enfrentamiento en Yextla duró tres horas, y reconoció que en esta parte de la sierra de Guerrero, “hay rivalidad entre los grupos de la delincuencia organizada, no es el primero que se da”.

Trasladan a cuatro heridos en un helicóptero de la Fuerza Estatal a la capital

Aproximadamente a las 2:50 de la tarde, arribó al hangar de la aeropista ubicada al norte de la capital el helicóptero de Fuerza Estatal que trasladó a cuatro vecinos, dos de ellos heridos, que estuvieron en el enfrentamiento de ayer en la comunidad de Yextla, en la sierra de Chichihualco.
Aunque de los helicópteros bajaron dos hombres y dos mujeres, solamente se observó que un hombre llevaba la cabeza cubierta y una mujer rengueaba. La Dirección de Comunicación Social informó que los heridos son Isidora Gómez Romero de 38 años y Juan Carlos Nava Espinoza de 28.
Al bajar del helicóptero de la Fuerza Estatal, los heridos fueron auscultados por paramédicos de la Policía Federal, la Cruz Roja y la Secretaría de Protección Civil estatal, y a las 2:57 de la tarde fueron trasladados al Hospital General Raymundo Abarca Alarcón en ambulancias.

Detiene la Policía Estatal a un hombre fuertemente armado en los límites de Izotepec

En la noche, en un comunicado de la Secretaría de Seguridad Pública, la Policía Estatal informó que detuvo a Francisco Estrada Hernández y le decomisó tres fusiles AK-47, conocidos como cuerno de chivo, una pistola calibre 9 milímetros marca Ruger y 18 cargadores para cuerno de chivo, además de un cargador de disco para fusil AK-47, cartuchos de diversos calibres, una granada de fragmentación, tres chalecos tácticos color negro, cuatro placas balísticas, un carro Nissan y otro Mazda, así como 50 gramos de marihuana en greña.
De acuerdo con el boletín, la detención fue en los limites de la comunidad de Izotepec. El detenido Francisco Estrada Hernández, las armas y el equipo decomisado fueron trasladados a Chilpancingo a bordo de la aeronave, y fueron puestos a disposición de las autoridades competentes.
En la comunidad de Yextla, en la sierra del estado han ocurrido otros hechos de violencia recientemente.
En marzo ocurrió un enfrentamiento entre grupos armados en la comunidad, que dejó cinco hombres muertos y tres heridos.
El jueves 12 de noviembre, policías ciudadanos de la UPOEG se enfrentaron a balazos contra unos 500 sicarios que vestían uniformes tipo militar, y portaban lanzagranadas y fusiles Barret, AK-47 y AR-15, en la comunidad de El Naranjo, en Leonardo Bravo.
Después del enfrentamiento llegaron soldados del Ejército, que desarmaron a los policías ciudadanos y detuvieron a unos 60, mientras que otros 15 se reportaban desaparecidos; después, uno de ellos fue hallado muerto y otro continúa desaparecido. El lugar del enfrentamiento, y de la emboscada posterior, es una cañada a orillas del río El Naranjo, ubicado a unos 4 kilómetros de esta localidad, en una brecha de terracería; ahí fueron abandonadas 12 camionetas de los policías ciudadanos, cuatro de ellas calcinadas, con múltiples impactos de bala; pero no se encontró ningún cuerpo.
La medianoche del domingo 15 de noviembre, hombres armados irrumpieron en la comunidad de Polixtepec y asesinaron a cuatro vecinos: a una mujer, a su hija y a dos de sus hijos, incendiaron tres casas y se llevaron a dos hombres, uno de ellos era pareja de la mujer y padre de los dos hombres y la joven.

Sepultan entre música y dolor a los cuatro comunitarios asesinados por sicarios en Tixtla

Los cuatro policías comunitarios de 23, 25, 32 y 40 años de edad, pertenecientes a la Casa de Justicia La Patria Es Primero, de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) en Tixtla, fueron llevados al camposanto con música de viento y guitarras.
La CRAC pidió a reporteros evitar fotografías del cortejo y de los policías comunitarios que han dado su servicio con el rostro cubierto el último año, para evitar más detenciones de sus integrantes, como ocurre desde las aprehensiones de los principales líderes en 2013.
Pronto se supo que entre los fallecidos estaban dos comandantes que dirigían la logística de la seguridad, y dos jóvenes recién incorporados.
Después de la emboscada a los policías comunitarios, este jueves volvieron a la ciudad dos retenes de la Fuerza Estatal, que se habían retirado luego de la persecución en contra de alumnos de la Normal Rural de Ayotzinapa, el 11 de noviembre, en la carretera de cuota Tixtla-Tierras Prietas.
Aquel retiro de la fuerza estatal de la cabecera municipal, según las versiones, se debió a que el retén que se encontraba cerca de la caseta de cobro les bloqueo el paso a los estudiantes, lo que provocó enojo en algunos vecinos.
La Policía del Estado sólo mantuvo permanente un retén con equipo antimotín en El Puente de El molino, en la carretera vieja a Chilpancingo, pero que desde la agresión a los comunitarios ya no está en ese lugar. Se advirtió que por esa vía entraron a Tixtla y huyeron a Chilpancingo los sicarios que emboscaron a los comunitarios.
A las 9 de la mañana, tres ataúdes fueron escoltados por unos 200 vecinos a una misa en la iglesia de la Natividad, en el barrio de El Santuario, luego de una hora, los cuerpos de dos policías comunitarios fueron llevados por la avenida principal al panteón viejo, y otro al cementerio de la Villita. Por la tarde se enterraría el último de los fallecidos. No hubo reporteros cerca para evitar la divulgación de los nombres de los policías asesinados por seguridad.
Algunas familias salieron a las calles a ver, como homenaje, el paso de los fallecidos, que al frente eran cubiertos con la fragancia de copal, seguidos por dos guitarristas y al fondo por una banda de música de viento.