El fiscal Olea Peláez acusa a López Rosas de haber ordenado el ataque contra normalistas en el 2011

El titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), Xavier Olea Peláez, arremetió ayer contra el ex procurador Alberto López Rosas, a quien acusó de ordenar el ataque que sufrieron normalistas de Ayotzinapa el 12 de diciembre de 2011 en un desalojo en la Autopista del Sol, donde fueron asesinados dos estudiantes.
También lo señaló de haber intervenido para que se integrara de manera deficiente la averiguación correspondiente a esos hechos para obtener “protección federal” y manipular las pruebas que existían en su contra.
Ayer se publicó en estas páginas un desplegado de López Rosas, quien era procurador de Justicia cuando fueron asesinados los dos estudiantes de Ayotzinapa, en el que manifestó que a cinco años de esos hechos prevalece la impunidad y exigió la reapertura de la investigación de ese caso.
También acusó a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y a la Procuraduría General de la República (PGR) “de ese tiempo” de proteger a policías federales que participaron en el desalojo y que, a diferencia de los estatales y ministeriales, no fueron detenidos ni procesados.
En respuesta, Xavier Olea calificó como “ignominioso y lamentable” lo señalado en el desplegado, y criticó que López Rosas esté exigiendo “lo que él, por su supina ignorancia en la materia de mérito, no pudo resolver”.
Olea Peláez aseguró que el ex procurador carece “de altura de miras” para demandar la reapertura de la investigación y señalar que prevalece la impunidad.
Mediante un comunicado, el fiscal aseguró que la actual administración de la FGE ha redoblado esfuerzos por la justicia, sin amiguismo ni corrupción, lo que, aseguró, sí ocurrió cuando el ahora coordinador de asesores del alcalde de Acapulco estaba al frente de lo que fue la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) en el gobierno de Ángel Aguire Rivero.
“Las averiguaciones previas y las carpetas de investigación se integran conforme a derecho, y no como antaño se hacía conforme a los intereses mezquinos de su titular”, dice el comunicado, y negó que se haya protegido a policías federales, como lo expresó en el desplegado López Rosas.
“La auténtica verdad es que el ex procurador aquél día (el 12 de diciembre de 2011) ante su ignorancia jurídica y política se equivocó y, con su manifestación en los medios de difusión, pretende lavarse las manos, cuando todo Guerrero sabe que desde su escritorio – porque de ahí no se movía–, ordenó la agresión a los estudiantes”.
El fiscal indicó que luego de ordenar el ataque, en el que perdieron la vida los estudiantes Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús, el entonces procurador se empeñó en manipular las pruebas que existían en su contra.
Explicó que si bien la justicia federal “les otorgó (a los inculpados) la protección federal”, esto ocurrió por supuestas deficiencias en la averiguación que se integró, por intervención de López Rosas.
Además expresó que la Procuraduría carecía de elementos que tuvieran preparación suficiente en materia penal y constitucional para integrar adecuadamente las indagatorias.
“Al efecto, resulta de explorado derecho, que en atención a que se juzgó a los servidores públicos que fueron oportunamente procesados, resulta hoy imposible volver a integrar una nueva indagatoria o carpeta de investigación por esos hechos, puesto que ello violentaría las garantías constitucionales de los gobernados, sean quienes sean, puesto que existe ya una resolución de amparo”, dice el boletín.
Por esta situación, Olea Peláez señaló que no se puede acusar que existe impunidad en el caso, toda vez que sólo se cumple la ley.
Finalmente, dijo que el trabajador de la gasolinera Eva II, Gonzalo Rivas Cámara, quien sufrió heridas tras el incendio de una despachadora de combustible, fue una víctima de su actuación como procurador “y un héroe” reconocido post mortem por el Senado con la medalla Belisario Domínguez.

Reacomodo en el crimen y más muertos por la detención de El Gavilán, prevé Olea Peláez

El fiscal general del estado, Xavier Olea Peláez, dijo que con la detención del presunto líder de Los Caballeros Templarios, Ediberto Bravo Barragán, alías El Gavilán, que operaba en Zihuatanejo, Petatlán y La Unión, se prevé un “reacomodo” que provocará más muertes.
“Se prevé una disminución, pero al principio evidentemente tiene que haber reacomodos y eso implicará que haya muertes”, explicó.
Este martes fue hallado un hombre decapitado en Zihuatanejo, y el fiscal general calificó el asesinato como parte de dicho reacomodo.
“Tan es así que hoy ya aparece un muerto cerca de Zihuatanejo”, agregó.
La mañana de este martes el funcionario acudió a la entrega del premio al Mérito Jurídico entregado en la Sala de la República de la Casa Guerrero, donde fue consultado minutos antes de que el acto empezara.
En los seis minutos de la entrevista, Olea Peláez dijo que no pasará de dos años para que el orden y la paz prometida en el eslogan del gobierno que encabeza Héctor Astudillo Flores lleguen al estado.

Se investiga el caso del ex secretario de Larequi Radilla

El pasado 8 de julio fue ejecutado el ex secretario particular del ex director de Transporte y Vialidad del estado, Juan María Larequi Radilla, Raúl  Arteaga Román, junto con su padre dentro de una tienda del Fraccionamiento San José Chuchululuya.
En una segunda consulta realizada al finalizar el acto de premiación, se le preguntó a Olea Peláez respecto a esta investigación, y dijo que la única línea de investigación que tiene la Fiscalía es la relacionada con el transporte, y señaló que el transporte en Chilpancingo está relacionado con el crimen organizado.
Enfatizó que el transporte público en la capital del estado está infiltrado por el crimen organizado, pero a pesar de preguntarle si su ejecución estaba relacionada con algún grupo criminal, se negó a precisar.
Respecto al caso del dentista militar que mató a balazos a un hombre presuntamente armado que pretendió extorsionarlo en su consultorio, ubicado en la colonia Cumbres de Figueroa, el fiscal dijo que fue exonerado porque actuó en su “legitima defensa”.
A la pregunta de si sabe para qué grupo del crimen organizado trabajaba el presunto extorsionado dijo que no tenía la más mínima idea porque los muertos no declaran.

Juan Francisco Camacho Mancilla

Durante la primera consulta un reportero le preguntó sobre la situación del defensor de oficio Juan Francisco Camacho Mancilla, es hermano del actual secretario ejecutivo de la comisión para la implementación de la reforma en materia de seguridad y justicia penal del estado, Luis Camacho Mancilla, quien se desempeñaba como defensor de oficio sin cédula profesional.
Olea Peláez dio a conocer que su dependencia inició una averiguación previa en la fiscalía anticorrupción, y advirtió que será consignado en el momento “oportuno”, porque en la época en que ejerció la defensoría de oficio, en el 2008, estaba en la Fiscalía y ahora ya no.
“Eso no quiere decir que aquel sujeto haya engañado a la autoridad al manifestar que tenía cédula y no contaba, hoy no hay ningún ministerio publico que no tenga cédula profesional”, agregó.
Dijo que durante un par de años estuvo ejerciendo Juan Francisco Camacho Mancilla de manera ilegal, por la falta de control de quien ingresaba a los defensores.
Urgió a que se revise quién era el encargado de esa área, porque en los documentos no aparecía ni una carta de pasante.

No se puede emitir la alerta de género porque los asesinatos de mujeres son por el narco, dice el fiscal

El fiscal general de Guerrero, Xavier Olea Peláez aseguró que no hay elementos para emitir una alerta de género en el estado porque los homicidios de mujeres “indican” que están relacionados con el narcotráfico.
Además consideró que no sólo se debe despenalizar la mariguana sino que se deben incluir “otras drogas” como la cocaína.
En declaraciones antes de la ceremonia por el 74 aniversario del Día de la Marina, previo al zarpe del buque Romero (PO-144) en el parque de La Reina, Olea Peláez comentó que no hay elementos para establecer una alerta de género en Guerrero por los feminicidios, pues aseguró que los asesinatos de mujeres “indican” que están relacionados con el narcotráfico.
“Creo que es muy importante despenalizar la mariguana hasta cierto número de gramos, porque puede significar que es para consumo personal y también se debe pensar en la cocaína y en otras sustancias”, propuso.
Cuando se le recordó que académicas y feministas han solicitado que se declare la alerta de género, el fiscal dijo que ellas carecen de estadísticas que sustenten su petición, y añadió que no le han solicitado los informes.
Señaló que la Fiscalía General del Estado (FGE) entregó a la Secretaría de la Mujer (Semujer) y a la presidencia del Tribunal Judicial las estadísticas que tiene sobre asesinatos de mujeres.
Mencionó que el año pasado hubo 40 mujeres asesinadas, que en este año van siete y solamente en un caso podría tratarse de feminicidio.
“No alcanzamos a pedir la alerta de género”, aseveró.
Afirmó que la incursión de las mujeres en la delincuencia organizada “es voluntaria” y mencionó que es un modus vivendi el vender droga.
“Tenemos una estadística, no recuerdo el número, pero sí podemos decir que no estamos dentro de los parámetros para acceder a ninguna alerta de género, (los registros) se analizaron con el presidente del Tribunal, con el señor gobernador, se ha hablado con diputados y no estamos dentro del esquema que se señala para estos efectos”, reiteró el fiscal.
Dijo que un elemento para que se considere un asesinato de mujer como feminicidio es que no se debe exhibir el cadáver.
Mencionó que el caso de una mujer que fue asesinada en la costera, “vendía pastillas, vendía mariguana y vendía cocaína, entonces no es tan fácil; hay jóvenes que pueden ser adictas también”.
De la entrada en vigor del nuevo sistema de justicia penal mencionó que la Fiscalía está lista para atender las denuncias bajo el nuevo esquema.
Incluso aseguró que ayer en Costa Azul hubo un primer caso por un delito de violencia intrafamiliar que atendió el vicefiscal, José Alfredo Bonilla.