Faltan 2 mil casas para los damnificados de un sismo en la Costa Grande, informa la Sedatu

El delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu), José Armenta Tello declaró que están pendientes de hacer 2 mil viviendas para damnificados, principalmente en la región de la Costa Grande donde se suscitó el sismo ocurrido en Semana Santa y en Acapulco en el fraccionamiento San Agustín porque está clausurado.
En declaraciones en la colonia Emiliano Zapata, donde acudió a una gira de trabajo con el alcalde de Acapulco, Evodio Velázquez, para inaugurar la pavimentación de calles, declaró que la Sedatu está haciendo los trámites para retirar los sellos de clausura que colocó la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) a predios y continuar los trabajos de construcción que tienen más de año y medio parados.
“Aproximadamente (hay) 2 mil viviendas que están pendientes por hacerse en todo el estado, principalmente en la Costa Grande que son las que dañó el sismo de Semana Santa y su replica una semana después” dijo.
Abundó que en el caso de Acapulco hay una falta de viviendas porque (la zona de construcción) está clausurada y “habremos de retirar esos sellos para que se concluyan”, e indicó que la Sedatu esta en un proceso con instancias de Profepa para regularizarlos, porque mientras no se retiren los sellos de clausura sería un delito que se continúen con los trabajos.
“El recurso está disponible y listo para ejecutarse (en) este programa y terminarse” declaró el delegado federal y agregó que en Guerrero desde un “inicio se debió haber hecho las solicitudes de impacto ambiental y de cambio de uso de suelo y no se hicieron”.
De la queja de 18 familias de Acapulco porque la Sedatu no les ha entregado sus viviendas en San Agustín, respondió que está clausurado por la Profepa y la Sedatu “estamos haciendo los trámites para retirar esta condición de clausura y continuar los trabajos que tenían más de año y medio en pausa”.
Explicó que hay ciudadanos que consideran que con el hecho de haber sido censados son beneficiarios de una vivienda y “esto no es así, ahí revisaría el caso especifico de cada uno de ellos”. Agregó que el “folio no te hace beneficiario o recipendario de una vivienda”.
El pasado miércoles 22 de junio, 18 familias damnificadas en 2013 por la tormenta tropical Manuel solicitaron a Sedatu que terminen y les entreguen las viviendas que les prometieron y que se construirían en Barrio Tres, del fraccionamiento San Agustín.
Por otra parte, Armenta Tello dijo que en Venta Vieja la Comisión Reguladora de la Tenencia de la Tierra (Corett) está haciendo las mediciones y un trabajo técnico para hacer la certificación de las viviendas. Además adelantó que próximamente estarán en dicha comunidad porque “vamos a regresar a cumplir la palabra empeñada por Rosario Robles de un apoyo especial para enseres domésticos de la colonia”.

Sólo 22 municipios tienen el ordenamiento para prevenir riesgos, advierte la Sedatu

El director de Ordenamiento Territorial y Atención a Zonas de Riesgo de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Armando Saldaña Flores informó que sólo 22 de los 81 municipios de Guerrero tienen un Plan de Ordenamiento Ecológico Territorial (POET) para la prevención de riesgos ante fenómenos naturales.
En declaraciones a reporteros durante la entrega de viviendas a damnificados del poblado de Venta Vieja, a causa de la tormenta tropical Manuel en 2013, declaró que “necesitamos autoridad” de los presidentes municipales para que no permitan que los vecinos se asienten en zonas de riesgo y construyan sus casas cerca de ríos.
Del diagnóstico de Acapulco en la zona inundable luego del huracán Ingrid y la tormenta tropical Manuel, el funcionario federal dijo que, “es una cuestión técnica que conoce la Comisión Nacional del Agua (Conagua)”, pero que no tenía datos precisos.
Agregó que “22 municipios ya tienen el Plan de Ordenamiento Territorial, y tenemos que trabajar en los demás” y que los municipios que faltan tienen que solicitarlo en la Sedatu, aunque la institución prioriza porque es “muy poco el recurso para trabajar”.
Saldaña Flores agregó que “son 30 o 40 municipios los que requieren atención y cuidado e instrumentos que permitan salvaguardar la vida de los ciudadanos, nosotros estamos buscando partidas presupuestales que el Congreso autoriza a la Secretaría”.
Dijo que en Guerrero hace falta un Atlas de Riesgo que se actualiza cada tres años, y los municipios de Zihuatanejo, Chilpancingo, Acapulco y Tlapa también necesitan un Atlas de Riesgo municipal para conocer los problemas en sus territorios, agregó que el gobernador Héctor Astudillo Flores solicitó el Plan de Ordenamiento Estatal.
Dijo que en las regiones de La Montaña, Costa Grande, Costa Chica, además de Acapulco, Zihuatanejo, Chilpancingo y Coyuca ya tienen la experiencia de lo que ocasionó el huracán Ingrid y la tormenta tropical Manuel, y todo el estado “necesita ser observado”.
Dijo que los funcionarios deben tener autoridad y “no permitir que las familias se asienten en zonas de alto riesgo y construyan sus casas al margen de un río”.
Agregó que no podía precisar cuántas familias en Guerrero están en zonas de alto riesgo, pero “el Atlas Nacional de Riesgo habla de cerca de 10 mil o 12 mil familias en cada estado que pueden estar en esta situación y por cuestiones económicas no se pueden ubicar en un terreno sólido”.
Por otra parte dijo que, “el embate internacional y la caída del costo del petróleo ha afectado”, porque no hay recursos para la construcción, aunque están por concluir los fraccionamientos El Balzamar y El Mirador en Chilpancingo, en el último serán reubicadas más de 450 familias.

Armenta, nuevo delegado de Sedatu; se detuvo la entrega de viviendas por extorsiones, admite

Ayer tomó protesta como nuevo delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), el ex delegado de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), el renejuarista José Manuel Armenta Tello, quien sustituye a Alfredo Fernández Peri.
En el acto, en el que la Sedatu estuvo representada por Ramón Sosamontes, el nuevo delegado anunció que no se frenarán los proyectos de construcción de viviendas para los afectados por fenómenos naturales.
Armenta Tello reconoció que en la Tierra Caliente y en la Costa Grande las extorsiones a empresas constructoras detuvieron la entrega de unidades habitacionales, y afirmó que el trabajador de la Sedatu que desapareció en Ajuchitlán se encuentra en su casa desde el jueves pasado.
El cambio se llevó a cabo en las oficinas del Infonavit, en la avenida Costera, donde Armenta Tello puntualizó que cuenta con el respaldo de Rosario Robles y recalcó que la funcionaria ex perredista “ha recorrido (la región) en innumerables ocasiones, ya contadas más de 30”.
Por su parte, el representante de la Sedatu, Ramón Sosamontes expresó que también se tienen que atender problemas territoriales que colman al estado y le pidió resolverlos “con justicia”. Dijo que Armenta Tello llega con un mandato “nada sencillo, la parte urbana tiene que ver mucho para el desarrollo de las ciudades que tenemos en Guerrero, el crecimiento de Chilpancingo tiene que planificarse, con autocrítica, y no puede seguir igual que Acapulco”.
Al finalizar el acto protocolario, el ex secretario privado del ex gobernador René Juárez, consultado por los reporteros destacó que hará un inventario de los problemas existentes, porque ya se tiene un diagnóstico “trabajado previamente con el delegado (Saliente)”, se dará atención inmediata a todos los procesos y, aseguró, no se interrumpirán los proyectos.
En su diagnóstico, dijo que “rezagos con la inseguridad, el haber proporcionado predios a tiempo, el esperar dictámenes por parte del gobierno del estado de factibilidad de construir en ellos, hay pendientes con las manifestaciones de impacto ambiental”.
Sobre las entregas retrasadas de casas para damnificados de la tormenta Manuel, expuso que ayer inició pláticas con la Cámara de la Industria de la Construcción para conocer la postura de los empresarios; justificó en parte los retrasos, “yo he hablado que se han empalmado fenómenos, primero fue Manuel e Ingrid y después los sismos de semana santa, después fue Trudy, y la gente lo que pide es ser atendida”.
Precisó que de Manuel e Ingrid, el gobierno federal absorbió los gastos para la reconstrucción, “el estado no hizo aportación para que se hiciera la reconstrucción. Cosa distinta a lo que pasó a los fenómenos de los sismos y el de Trudy donde esperamos todavía una aportación del gobierno del estado”.
De las casas que todavía no se han entregado, insistió en que están en revisión y que se han entregado fianzas “por vicios ocultos”.
Armenta Tello aceptó que la inseguridad fue un factor para que se detuviera la construcción de las casas en zonas como Tierra Caliente, “en algunos casos sí, tenemos casos puntuales en Tierra Caliente, se supo de algunas situaciones en la Costa Grande, pero definitivamente tenemos oferta de instituciones dedicadas a la justicia y seguridad”. A la pregunta sobre intentos de extorsión a empresas constructoras, respondió que no se ha cuantificado el número de empresas afectadas, aunque reconoció que fue en Tierra Caliente y Costa Grande.
Resaltó que la relación con el gobierno estatal de Héctor Astudillo es “espléndida y articulada”.
Sobre la fecha de entrega de la unidad habitacional de El Mirador, en Chilpancingo, expuso que todavía no hay un día programado y se otorgarán, “cuando haya condiciones para que sean ocupadas”; precisó que no sólo es cuestión de finalizar la construcción de viviendas, sino de garantizar los servicios públicos.
Otro de los factores para la entrega de casas es un dictamen, ya sea del Cenapred o de Protección Civil, y también están a la “espera (de que) en cualquier momento” lo tengan.
Al preguntarle porqué no se hizo el dictamen previo a la cimentación de las casas, dijo que “es algo que se debió haber hecho, es algo que no te puedo garantizar o decir con seguridad, pero se debió haber hecho la factibilidad del uso del predio, y más para garantizar su uso habitacional”.
Dijo que en caso de que no se pueda seguir construyendo en ese predio, “si no son seguras, nosotros no vamos a permitir que sean habitadas, pero eso es un extremo al que no podamos llegar”.
De Azinyaualco, donde se detuvo la construcción de las 93 casas, y de San Vicente, ambas localidades de la Sierra de Chilpancingo en las que hubo damnificados por la tormenta Manuel que llevan dos años esperando a que les entreguen sus casas, Armenta Tello manifestó que todas las reubicaciones están bajo el proceso de evaluación, porque se están revisando los padrones y los predios donde se cimentan las casas, y precisó que esos predios tienen que reunir ciertas características para ser habitables.
De la comunidad de San Vicente, apuntó que tampoco están los censos de los afectados y se buscan alternativas para solucionar la necesidad de vivienda, “ya estaba dotado, pero no estaba dentro del esquema de construcción de la Secretaría, ya se están desarrollando aulas por parte del Inifed”.
Enfatizó que hasta el momento no se ha cancelado ningún proyecto.
Se le preguntó si tenía conocimiento de la investigación sobre los responsables de otorgar permisos de construcción en humedales de la zona Diamante de Acapulco que se inundaron, José Armenta Tello dijo desconocer el compromiso del presidente Enrique Peña Nieto, “Son investigaciones que no lleva la delegación, es un asunto de lo que yo no tengo en mi recepción, pero habré de informarme”.