Detienen vecinos y luego liberan a un reportero en un pueblo de San Luis Acatlán

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

Presuntamente por publicar una nota en la que denunció que el vivero del programa Sembrando Vida de Horcasitas, municipio de San Luis Acatlán, no está funcionando, el editor del semanario y portal Prensa del Sur, Bertín Chino González, fue detenido en esa comunidad.
En declaraciones por teléfono, denunció que su detención fue ordenada por el comisario municipal, Ángel Morales Agustín, a quien responsabilizó de su integridad física, “por si me golpean en la noche, porque aquí son medio cabrones”, dijo.
Contó que el miércoles subió a su portal una nota en la que denunció que el vivero del programa Sembrando Vida en esa localidad no está funcionando, y que ayer a las 5 de la tarde, llegaron policías rurales vestidos de azul que dependen del comisario municipal, a la casa de su esposa en esa localidad y lo detuvieron.
Dijo que cuando les preguntó por qué delito lo detenían, el comandante le respondió que “por el reportaje” de Sembrando Vida que publicó.
En el video que subió a su portal el reportero, aparecen imágenes del vivero vacío: “vemos este vivero de Sembrando Vida que está completamente desolado, no tiene nada. Esto que siempre está mencionando el presidente López Obrador que Sembrando Vida… así como aquí están los viveros de Atlamajalcingo del Monte, en Olinalá, en Xitopontla, municipio de Ahuacuotzingo, también están así los viveros. En Guerrero no funcionan”.
Por la noche, la delegación 17 del Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa (SNRP) emitió una alerta a las organizaciones de periodistas, a la Comisión de Derechos Humanos y al Mecanismo de Protección a Periodistas, así como a las autoridades de los tres órdenes de Gobierno, “para que de inmediato se revise la situación del compañero, quien se encuentra detenido por la Policía Rural de la comunidad de Horcasitas, municipio de San Luis Acatlán, en la región Costa Chica de Guerrero”.
La organización, informó que el reportero tiene 30 años ejerciendo la labor de periodista, y consideró que su detención “representa una grave violación a sus derechos humanos, además de una clara violación a la libertad de expresión, al derecho de informar y estar informado”.
El SNRP demandó al presidente Andrés Manuel López Obrador, a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda y al alcalde de San Luis Acatlán, Adair Hernández Martínez, su inmediata libertad, “y una profunda investigación que permita sancionar a los responsables de este atentado a la libertad de informar”.
A las 8 de la noche se realizaba una asamblea en la comunidad para determinar la situación del reportero.
Bertin Chino trabajó en Chilpancingo y en los últimos años en la Montaña y la Costa Chica. Estos días se encontraba en Horcasitas, de donde es originaria su esposa.
A las 9:30 de la noche, la Secretaría General de Gobierno informó que Chino González fue liberado luego que fue detenido por la policía rural de San Luis Acatlán por la mediación del director General de Gobernación, Francisco Rodríguez Cisneros.

 

Menos deserción escolar evita que jóvenes se integren al crimen, dice el delegado federal

El delegado de los programas del Bienestar en Guerrero, Iván Hernández Díaz, aseguró que los programas sociales han ayudado a disminuir la deserción escolar en educación media superior, “que es un rango de edad donde es muy proclive el joven” de participar en actividades delictivas.
El delegado respondió lo anterior a pregunta de si la estrategia de atacar las raíces de los problemas con los programas sociales fracasó, luego de que los grupos delictivos siguen funcionando con jóvenes en todas las regiones.
Asimismo, sostuvo que muchos de los programas sociales no tienen un efecto inmediato sino que como el programa Sembrando Vida se reflejará los efectos positivos en cinco años, aunque los 36 mil beneficiarios ya no ven como prioridad para sobrevivir la siembra de enervantes.
También afirmó que ante la petición de los pobladores de El Durazno, Coyuca de Catalán, les acercarán el pago de los programas a su localidad, pues ya no bajan a su cabecera municipal tras la masacre del 10 de diciembre donde fueron asesinados siete hombres.

Avanzan universidades Benito Juárez

Ayer se llevó a cabo en el Instituto Tecnológico de Chilpancingo una capacitación a presidentes municipales de las regiones de Tierra Caliente, Norte y Centro acerca del manejo del Fondo de Aportaciones de Infraestructura Social Municipal (FAISMUN).
Antes, a Iván Hernández se le preguntó acerca de las universidades para el Bienestar Benito Juárez García, de las que precisó que la más consolidada es la de Tierra Colorada, cabecera del municipio de Juan R. Escudero.
Dijo que la única escuela donde hubo un retraso en la construcción de sus instalaciones fue la sede de Tixtla, pero destacó que este año arrancaron actividades seis nuevas sedes, que se agregan a las ocho que ya existían.
“En Guerrero está avanzando muy bien, creo que como en todo proceso inédito, hay una curva de aprendizaje, me parece que esa curva ya se superó”, dijo.
Mencionó que de las primeras ocho universidades la mitad ya tiene instalaciones propias, tres tienen un proceso mixto con instalaciones prestadas, y solo Tixtla está en proceso de construcción de su edificio.
Detalló que el 2 de enero iniciaron actividades en Atlixtac con 117 jóvenes, en Huitzuco 263, en Quechultenango 279, Taxco 600, Tecpan 224 y Teloloapan con 139.
Hernández Díaz afirmó que este año buscarán concluir las instalaciones de las 14 sedes porque tienen el objetivo formativo a largo plazo y también de resolver las carencias que hay en el sistema de salud, “casi todas están dedicadas a medicina integral y salud comunitaria o enfermería y obstetricia”.
Expuso que las primeras generaciones deberán cumplir con su servicio social, residencia o prácticas profesionales, es decir, que uno o dos años después de que termine la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador concluirán.

Violencia no afecta entrega de programas

Al delegado se le preguntó qué tan difícil ha sido entregar los programas sociales en las zonas de alta violencia. Respondió que nunca han tenido impedimentos en la Sierra o Tierra Caliente, y que los programas sociales se han mantenido durante la pandemia de Covid.
“No nos hemos visto en la necesidad de suspender por razones de violencia, por el contrario, siempre buscamos la manera de que los programas lleguen, en algunos casos, cuando la propia localidad nos hace algún planteamiento de acercar los recursos lo hacemos”.
Aseguró que entregarán a los pobladores de El Durazno, municipio de Coyuca de Catalán, en su localidad el pago de los programas sociales, porque no pueden bajar hacia la cabecera, tras el asesinato de siete habitantes el 10 de diciembre pasado.
“Lejos de retirarnos, es acercarnos lo más posible para que los programas sociales lleguen a las personas porque muchas veces se trata de conflictos entre grupos y no tendrían por qué afectar a los campesinos o a la gente que se dedica a trabajar”, argumentó.
Se le preguntó si la estrategia de atacar la raíz de los problemas con los programas sociales fracasó, luego de que los grupos delictivos siguen funcionando con jóvenes. Respondió que se ha avanzado, al disminuir la deserción escolar, “sobre todo en educación media superior que es un rango de edad donde es muy proclive el joven de participar en actividades antisociales”.
Sostuvo que muchos de los programas sociales no tienen un efecto inmediato y Sembrando Vida hasta dentro de cinco años se reflejarán los efectos positivos.
Dijo que los 36 mil beneficiarios de Sembrando Vida han cambiado su que aspiración, antes “era que podrían salir adelante si les iba bien con la siembra de enervantes, hoy te puedo decir que la aspiración de muchos campesinos es que su siembra que tienen en su parcela pueda brindarles una estabilidad, un patrimonio, piensan en cosechar lo que en estos años están trabajando”.
Durante la capacitación, a las que sólo asistió el alcalde de Chilapa, Aldy Esteban Román –los demás enviaron a los directores de obra–, Iván Hernández afirmó que Guerrero ha registrado la mayor incidencia de fraudes a los gobiernos municipales, a quienes se les acercan presuntos técnicos o consultores que prometen obtener más recursos del FAIS. (Redacción / Chilpancingo).

Delegados de Sembrando Vida de municipios serranos se organizan para vender sus productos

Campesinos y técnicos del programa Sembrando Vida en una mesa de trabajo en la comunidad serrana La Aurora, municipio de Heliodoro Castillo Foto: El Sur

Redacción

La Aurora, sierra de Heliodoro Castillo (Tlacotepec)

Campesinos de tres municipios de la Sierra integrados a Sembrando Vida acordaron este domingo, ante sus técnicos, organizarse para exigir una carretera, mercado para sus productos y un centro de acopio, y nombraron un comité encabezado por la joven Dioseline Gervacio Nava, para que se encargue de hacer llegar las demandas de los productores a los gobiernos estatal y federal.
Al encuentro acudieron 41 delegados en representación de mil sembradores de los municipios de San Miguel Totolapan, Atoyac y Tlacotepec, que en conjunto tienen 2 mil 500 hectáreas, cada uno con 2.5.
A los vecinos de esta zona, con el estigma de la violencia, el machismo y la siembra de amapola, se les vio organizados para un objetivo en común: vivir de manera autosuficiente y erradicar la siembra de enervantes, pero tienen serios problemas para lograrlo, pues sus caminos están en terribles condiciones y no tienen mercado para sus productos.
Para contextualizar, lo agreste de la zona permitió que los vecinos se dedicaran durante décadas a la venta de la goma de opio, ante la ausencia de autoridades para erradicar la planta y para llevar los servicios básicos a la zona, pero la caída del precio de ese producto hundió a algunos en una severa crisis económica; otros, los menos, ya sembraban maíz, jitomate, aguacate, pera o manzana y resistieron sin dificultades la falta del dinero de la droga.
Algunos otros enviaron a sus hijos a estudiar, quienes llegaron a obtener títulos de maestría y doctorado, hubo profesionistas que regresaron con métodos para salir del crimen, otros, “se hicieron profesionales”, mejoraron sus métodos de producción de enervantes y se integraron a cárteles con presencia internacional, según contaron asistentes a la reunión.
Ahora, todos buscan mantener su estilo de vida sin carencias, pero el grueso de los amapoleros no sabían producir otra cosa, hasta que llegó Sembrando Vida, relataron en entrevistas.

“Una inversión de 6 millones de pesos”, pero no hay mercado

La estructura del programa federal Sembrando Vida en el estado es de tres coordinadores estatales: Felipe de Jesús Sosa Garza, Mario Alberto Morlet y Omar Salinas, el primero es el coordinador de los coordinadores. En esta estructura sigue en jerarquía para la zona a la que tuvo acceso el reportero, el Territorio 24, el facilitador Gustavo Sandoval, quien es un coordinador de técnicos y cuenta con 10 técnicos que trabajan en equipos de dos, “binomios”, uno de ellos es experto en trabajo social y otro en productivo, según dijo el mismo Sandoval en entrevista.
Además, cada binomio cuenta con “becarios” a los que les paga el gobierno federal, jóvenes menores de 30 años que apoyan en las labores que requieran los técnicos y sembradores y se les pagan 6 mil 300 pesos al mes.
En su discurso de inauguración, Gustavo Sandoval informó a los campesinos que este mes recibirán 6 mil pesos por sembrar en sus parcelas, un aumento de mil pesos respecto del mes anterior, lo que significa “una inversión de 6 millones de pesos al mes, sólo para los sembradores y sembradoras. Un presupuesto que ya quisieran tener muchas dependencias del estado”. Además se les paga a los becarios, técnicos, facilitadores y coordinadores.
El facilitador, originario de la comunidad Toro Muerto, en la sierra de San Miguel Totolapan, agradeció al presidente Andrés Manuel López Obrador y advirtió que el programa empezó “en un momento crítico, fue muy oportuno, porque fue cuando se dio la crisis, cuando se está dando la emigración hacia Estados Unidos o al norte del país de muchos campesinos”, que se dedicaban a la siembra de amapola, que ahora no tiene mercado.
Llamó a “hacer equipo, echarle ganas y cumplir todas las metas, tenemos de aquí a junio para tener nuestras plantas listas en vivero y llevarlas a nuestras parcelas”.
En el Territorio 24, que comprende 50 comunidades de los tres municipios mencionados, Sembrando Vida lleva operando desde junio de 2021, así que aún no están en la parte de producción de frutos, sino en la de planta en los viveros, a diferencia de otras zonas, en las que el programa llegó al inicio de este sexenio.
Expuso que la intención de esta reunión, “es que se conozcan, que intercambien experiencias, conocimiento, porque nuestro territorio tiene condiciones muy diversas, desde La Junta de los Ríos, Nueva Dehli, Petlacala, Toro Muerto, Linda Vista y Laureles, tenemos climas muy fríos y algunos cálidos. Ahora es momento de que nos apoyemos, después habrá intercambios con otros territorios”.
Un campesino, tras la intervención del facilitador, calculó que tan sólo los productores integrados en el programa federal generan 600 toneladas de maíz al año, y se quejó de que no encuentran mercado, “en Atoyac el maíz lo están comprando en 4 mil 500 pesos por tonelada, pero vamos nosotros y nos preguntan de dónde lo llevamos, les decimos que de la sierra y nos ofrecen 3 mil pesos por tonelada, porque saben que no nos podemos regresar sin nada. Se aprovechan de nuestra necesidad, de que no hay carretera. Necesitamos mercado, que nos compren el producto, que nos arreglen la carretera”.
Un productor de jitomate informó que de cada 30 cajas que lleva de la sierra a la costa, 10 llegan dañadas, debido a que la terracería tiene muchos hoyos, lo que le genera “pérdidas importantes”.
En respuesta, el técnico David Araujo dijo que es necesario aprender el proceso de comercialización en equipo, “no es lo mismo que bajen una tonelada por separado a que bajen 600 en equipo. Sí, están mal los caminos, sí hay falta de mercado, pero yo sé que aquí la gente es muy inteligente, que pueden mover mercancía a escondidas. Entonces, no hay que esperar a que nos vengan a resolver todo. Para eso es esta reunión, para buscar una solución a nuestros problemas”.
El facilitador Gustavo Sandoval informó que hay planes para crear centros de acopio en la región, pero matizó, “está en propuesta”.
El centro de acopio de Segalmex más cercano está en la cabecera municipal de Atoyac, lo que para algunas comunidades significa 8 horas de camino agreste, cargando maíz, jitomate, manzana o pera en camionetas.

“Estamos erradicando eso que tenían los hombres”

En una actividad en la que se organizaron en grupos se planteó la pregunta: “¿Qué hemos logrado en Sembrando Vida?”. Los expositores dijeron “generamos empleos, igualdad entre hombres y mujeres, aprender a hacer composta, biofertilizantes, resolvimos problemas de la comunidad, la diversificación de productos”.
Una asistente abundó en cuanto a la igualdad entre hombres y mujeres, “hay que decirlo, antes la mujer se quedaba en casa y ahora hombres y mujeres nos vemos como iguales. Hacemos lo mismo que los hombres”.
“Estamos erradicando eso que tenían los hombres, no le quiero decir machismo, pero ahora hay mujeres que mantienen la casa”.
El siguiente equipo retomó el tema, un varón de unos 40 años dijo: “Las compañeras tienen razón, aprendimos que las mujeres pueden hacer lo mismo, pues también tienen dos manos, tienen fuerza, tienen inteligencia”.
Sin embargo, se les preguntó quiénes hacen labores del hogar, como barrer o lavar trastes, y ningún hombre alzó la mano.
Ahí mismo, se organizó un comité que representará a los mil campesinos del Territorio 24, para que “sean gestores de las necesidades” de los vecinos de la región, y quedaron Omar Santiago Gómez, de Campo Morado, del municipio de Tlacotepec; Moisés Don Juan Lucena, de La Cueva de Guerrero, del mismo municipio; Timoteo Martínez Bernal, de La Remonta, Atoyac; Reynaldo Reyes Rojas, de Petlacala, San Miguel Totolapan, y Dioseline Gervacio Nava, de Estación Toro Muerto, San Miguel Totolapan, quien quedó como presidente del comité