Se compromete el alcalde de Zihuatanejo a enviar vigilancia a escuela de San José Ixtapa

El director de la primaria Redención Tropical, turno matutino, ubicada en el municipio de Zihuatanejo, José Refugio Solorio Huato, dio a conocer que este martes fueron atendidos por el alcalde Jorge Sánchez Allec, quien se comprometió a enviar policías para que hagan recorridos e inhibir que se metan al plantel a robar.
El lunes de esta semana, maestros de este plantel suspendieron clases para informar a los padres de familia que, debido a los constantes robos que ha sufrido el plantel, este martes y miércoles pararían labores como medida de presión para que las autoridades atiendan estos ilícitos, que se han cometido tanto en el interior como en el exterior de la escuela; los más recientes ocurridos la semana pasada, cuando robaron 500 metros de cable, por lo que desde entonces se encuentran sin electricidad.
Este martes, los maestros pararon labores, pero una comisión de ellos, acompañados por la mesa directiva de la sociedad de padres de familia, el supervisor de la zona escolar y el comisario municipal de San José Ixtapa, acudió al Ayuntamiento para tener una reunión con el alcalde Jorge Sánchez, la cual fue privada.
Al término, vía telefónica, el director José Refugio Solorio dio a conocer que Sánchez Allec les entregó parte del equipo de cómputo que fue sustraído de la escuela la semana pasada. Dijo que les entregó una computadora y una impresora, que además, hizo el compromiso de que este miércoles trabajadores del Ayuntamiento estarían en la escuela, para colocar los 500 metros de cableado que les robaron, para que de esa manera vuelvan a tener el servicio de energía eléctrica y regresen a dar clases.
Otro de los compromisos que Sánchez Allec hizo con los maestros y padres de familia es que hará la gestión correspondiente, para que haya constantes rondines policiacos en las inmediaciones de la escuela. (Brenda Escobar / Zihuatanejo).

 

A tres años de la declaración de la pandemia, recuento de las acciones ante un evento inédito

Imagen del 3 de abril de 2020 con agentes de la Guardia Nacional en la playa Icacos cerrada al público por la pandemia de coronavirus Foto: Carlos Alberto Carbajal

Emiliano Tizapa Lucena

Chilpancingo

Este 15 de marzo se cumplen tres años oficialmente de que se detectó el primer contagio de Covid-19 en Guerrero. En este periodo, el 2021 fue el año con más contagios y defunciones, al registrarse 40 mil 123 guerrerenses enfermos y cuatro mil 138 fallecidos; es decir, el 33.69 por ciento y el 60.15 por ciento respectivamente.
Como informó El Sur, el 28 de febrero de 2020 la Secretaría de Salud federal expuso se registró el primer paciente en el país con Covid-19, se trataba de un hombre de la Ciudad de México. Además, se confirmó que había un caso más en la capital del país, y otro en Sinaloa. El 1 de marzo de ese año, el entonces gobernador Héctor Astudillo Flores llamó a la población guerrerense a no caer en pánico y prepararse ante cualquier circunstancia que se presentara en el país.
El lunes 16 de marzo de 2020 se informó que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, repartió “abrazos” y “besos” en su gira de dos días por cuatro ciudades de Costa Chica, en Guerrero, y aunque no mencionó por su nombre la emergencia mundial por el coronavirus, dijo que no nos iban a hacer nada los infortunios o las pandemias.
Un día antes, el 15 de marzo de 2020, la Secretaría de Salud del gobierno del estado confirmó el primer caso de coronavirus en Guerrero. Se trataba de un ciudadano argentino que llegó con su familia a Acapulco. El entonces secretario de Salud estatal, Carlos de la Peña Pintos, precisó que había siete casos sospechosos de coronavirus, solo uno se confirmó, era un integrante de una familia proveniente de Argentina, y el hombre había tenido contacto con un enfermo positivo en la Ciudad de México.
Ante ello, la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) y la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) informaron que en el estado se adelantaría el periodo de vacaciones de Semana Santa a partir del 20 de marzo al 20 de abril para evitar la propagación del Covid-19.
El segundo contagio no tardó en surgir. El martes 17 de marzo de 2020, el gobernador, Héctor Astudillo y el secretario de Salud estatal, Carlos de la Peña lo confirmaron, se trataba de una joven que estuvo por cuestiones académicas en España y vivía en Chilpancingo. Además, anunciaron que como medida de prevención el gobierno del estado pospondría las actividades masivas.
El secretario de Finanzas estatal, Tulio Pérez Calvo, señaló que a partir del 18 de marzo de manera escalonada entrarían en receso en la mayor parte de las oficinas del Poder Ejecutivo, e indicó que las oficinas recaudadoras trabajarían con el mínimo de personas, pero estarían abiertas para pagos, y se establecerían guardias. Detalló que la medida era importante para continuar con el plan de sana distancia, pues el gobierno del estado tenía alrededor de 50 mil trabajadores y 62 mil docentes.
A pesar de que al principio se pedía calma, el 25 de marzo de 2020, el gobernador comenzó a reunirse con los alcaldes de la zona Centro, Norte y Costa Grande para coordinar acciones de la fase 2 de la emergencia sanitaria. El mandatario lamentó la caída de la ocupación hotelera y advirtió que generaría una crisis económica, aunque para esta fecha apenas se habían confirmado seis casos de Covid-19 en todo el estado.
Para ese entonces, los migrantes guerrerenses radicados en Estados Unidos comenzaron a padecer desempleo por el virus, y algunas de las primeras actividades que comenzaron a realizarse por transmisiones en Facebook fueron las misas o actividades religiosas, ya que el gobierno estatal permitió realizar las actividades de Semana Santa, pero sin público.
El 30 de marzo de 2020, el Consejo de Salubridad General declaró como emergencia sanitaria la epidemia de Covid-19 en el país, dado el aumento exponencial de los casos. Así lo informó el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, y estaría vigente hasta el 30 de abril. Advirtió fue que habría un daño económico y el impacto podría ser hasta de un año, y crecería la pobreza.
El presidente López Obrador comenzó el llamamiento a la población para que se quedara en casa y se evitara el contagio de coronavirus.
En tanto, el gobernador Astudillo Flores anunció la creación un fondo de 200 millones de pesos para enfrentar la emergencia sanitaria. Mencionó las afectaciones por la disminución de las actividades turísticas, el comercio y la disminución de la llegada de las remesas. Sostuvo que la ocupación hotelera era la más baja en siete años, pues se disminuyó un 90 por ciento, es decir, que de 10 cuartos solo uno fue ocupado.
El 1 de abril 2020, se informó que el gobernador decretó que del 2 al 30 de abril las playas estarían cerradas a todas las actividades recreativas, y que tomaba esa decisión porque optaron entre la protección a la vida o la suspensión de las actividades económicas.
El secretario de salud Estatal Carlos de la Peña indicó que se registró el primer fallecimiento por el virus en el estado, y sumaban diez los casos confirmados.

Marchan dos veces en un día maestros y padres de la secundaria Plan de Iguala

Padres de familia con profesores y trabajadores administrativos de la secundaria Plan de Iguala durante una de las dos marchas que realizaron para exigir a la SEG la reposición personal de intendencia y el pago del adeudos de hace cinco años Foto: El Sur

Alejandro Guerrero

Iguala

Docentes y padres de familia de la secundaria Plan de Iguala marcharon este jueves, en dos ocasiones, por calles de la ciudad para reiterar su exigencia a la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), para que reponga cinco conserjes y se paguen 84 horas adeudo en distintas materias, por lo que mantienen el paro y suspensión de clases para mil 323 alumnos.
A las 8:30 de la mañana, los docentes del turno matutino, con un contingente aproximado de cien padres de familia, marcharon del monumento de la Patria Trigarante por la avenida Bandera Nacional, una cuadra de la calle Benito Juárez y otra de Juan Aldama, hasta llegar a sus instalaciones, donde mantienen un plantón.
A las 5:30 de la tarde, ahora con padres de familia de ese turno, los docentes volvieron a salir a las calles para protestar.
En las dos movilizaciones mostraron cartulinas y mantas con sus demandas. Los padres manifestaron que ofrecen su total apoyo a los docentes de la escuela, que es la de mayor matrícula en el municipio.
Desde el martes, los docentes y administrativos iniciaron un paro de labores para exigir a la SEG la reposición de cinco conserjes y el pago de 84 horas frente a grupo, que se adeudan desde hace cinco años en distintas asignaturas: siete horas de Biología, una de Física, 24 de Geografía, 16 de Historia, cuatro de Educación Física, dos de Inglés, cuatro de Formación Cívica y Ética y 26 de Artes.
Asimismo, exigen la reposición de cinco plazas de conserjes que faltan desde 2019, dos de ellas por el fallecimiento de los trabajadores debido al Covid-19, una por fallecimiento, una por jubilación y una más por abandono de empleo.
“Exigimos a la gobernadora pronta solución al robo del techo financiero de la secundaria Plan de Iguala”, “queremos y exigimos maestros”, “exigimos pago” y “exigimos solución inmediata. Padres de familia apoyamos a la ESPI, ya basta”, se leía en alguna de las consignas.

 

Suspenden clases desde el jueves en Vallecitos ante el rumor de un enfrentamiento

En la comunidad serrana Vallecitos de Zaragoza, municipio de Zihuatanejo, desde el jueves se suspendieron las clases en todos los niveles educativos desde preescolar hasta bachillerato.
Maestros que trabajan en esa localidad ubicada en la parte alta de la sierra a unas 2 horas de viaje de este puerto en vehículo particular, comentaron que se suspendieron las clases el jueves porque en la comunidad trascendió el rumor de que se enfrentarían grupos antagónicos de la delincuencia organizada, como ha ocurrido en otras ocasiones.
Uno de los maestros aseguró que “en Vallecitos se vive una psicosis muy fuerte, ya en otras ocasiones en plena luz del día y en pleno horario de clases han ocurrido enfrentamientos, por eso cuando el jueves se corrió ese rumor los padres de familia de inmediato fueron por sus hijos a las escuelas, desde el jardín de niños pasando por las dos primarias, la secundaria y el Colegio de Bachilleres”. (Brenda Escobar / Zihuatanejo).

 

Es una violencia de meses y años la que se vive en la sierra, subraya el alcalde de Zumpango

 

El coordinador de los alcaldes del PRD, Pablo Higuera Fuentes, aclaró que la violencia en comunidades de la sierra en la región Centro del estado, no es de hace días, sino de meses y años; y que confiaban en que la seguridad mejorara para hoy, a fin de que se reanuden las clases suspendidas la semana pasada, por los últimos ataques.
Sin embargo, aclaró que ante las versiones de que habrá nuevos ataques, el problema se va a revisar con las autoridades educativas, pese a la presencia de policías estatales, del nuevo Grupo Jaguar y militares, que debían estar en la zona.
El alcalde de Eduardo Neri (Zumpango), coincidió con el obispo Salvador Rangel en que pobladores de varios municipios están acorralados, incluidas tres localidades de su demarcación y que es necesaria otra estrategia para resolver la violencia.
Consultado en las oficinas del PRD, donde acompañó a otros lideres políticos para denunciar la desaparición del alcalde electo de Cochoapa el Grande, en la región Montaña, habló de la situación en la sierra, en Eduardo Neri, General Heliodoro Castillo y Leonardo Bravo.
Recordó que tres comunidades de Eduardo Neri se integraron, hace unos diez años, a la Unión de Comisarios, que se organizaron para protegerse y gestionar recursos públicos, por su cercanía con Los Morros y Filo de Caballos, donde han ocurrido las últimas agresiones armadas.
Señaló que hace unos días agredieron a la Policía Rural, que depende de la Secretaría de Seguridad Pública del gobierno del estado, que promovió la Unión de Comisarios, y asesinaron a un comandante. Destacó que, aunque son pocos, los agentes de la Policía Rural recorren desde Casa Verde, el punto de acceso a la sierra desde la carretera federal México-Acapulco, hasta la Sierra de Filo Mayor.
De acuerdo con lo documentado en los medios, los ataques ocurrieron el 4 de septiembre en La Laguna, municipio de Eduardo Neri, y en Los Morros, de Leonardo Bravo; mientras que en Xochipala fueron quemados cuatro automóviles.
Este domingo por la mañana, trascendió información de nuevos ataques en Xochipala, paso obligado al territorio que disputan dos grupos de narcotraficantes de Tlacotepec y Leonardo Bravo.
El alcalde confirmó que recibió la información “de enfrentamientos”, y añadió que le pareció extraño, porque tendría que haber presencia de la Policía Estatal, del Ejército y del nuevo Grupo Jaguar.
Precisó que la Unión de Comisarios de la sierra tiene interlocución directa con el gobernador Héctor Astudillo Flores, a quien le piden seguridad. Dijo que por su cuenta habló con el supervisor de la zona escolar 11 de primarias, quien a través de un oficio le informó también de la suspensión de clases en La Laguna, Tres Cruces y Miraval, del municipio de Eduardo Neri. Añadió que se había acordado reanudar a clases hoy, “ahora volveremos a revisar”.
Por otro lado, indicó que también suspendieron la entrega del programa Zapatitos a Niños, en el comienzo del ciclo escolar, de Xochipala a Tres Cruces, y de Mezcala a Balsas Sur, porque hay riesgos en las dos rutas.
Confirmó que en el Centro de Salud de Miraval, la enfermera reportó que no ha podido brindar el servicio y que también el servicio de transporte público está suspendido. Confió en que el próximo gobierno federal implemente una mejor estrategia de seguridad para la sierra.
También anunció que mañana, Astudillo Flores tendrá una gira de trabajo en Zumpango, a las 9 de la mañana, para inaugurar el campus universitario de Tierras Prieta; luego, inaugurará el cuartel con un Centro de Control y Comando C-4, y un centro de Desarrollo Comunitario.

 

Suman 413 protestas educativas en el pasado ciclo; falta de maestros y daños por los sismos, principales causas

La falta de maestros y los daños en la infraestructura de las escuelas de Guerrero a raíz de los sismos de septiembre pasado, fueron las dos principales demandas en las protestas relacionadas con la educación en este ciclo escolar, de acuerdo con un recuento realizado por El Sur.
Otras demandas destacadas fueron el pago atrasado de sueldos a maestros, falta de nombramientos a profesores que realizaron el examen profesional docente en años previos y la seguridad.
El ciclo escolar reciente empezó el 21 de agosto de 2017 y terminó el 9 de julio, periodo en el que se realizaron 413 protestas relacionadas a la educación en la entidad, en varios municipios del estado.
En promedio, se realizaron dos protestas por cada día de clases, de un total de 195 días, como oficialmente se señala en el calendario escolar de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
Tan sólo en nueve días laborales de agosto se realizaron 27 protestas, cifra que aumentó a más del doble para el mes siguiente, en el que se suspendieron clases por los sismos, al alcanzar las 63 protestas. En octubre las protestas aumentaron a 83, para noviembre se disminuyó a 36, en diciembre fueron sólo 17, antes de comenzar vacaciones.
Este año empezó con 42 protestas, en febrero subió sólo a 43 y un total de 35 protestas fueron realizadas en marzo. En abril fueron 39, en el siguiente mes se realizaron 20 protestas y hubo tan sólo ocho en junio. En los nueve días de julio, en los que todavía seguía el ciclo escolar, no se registraron protestas.
De entre todas estas protestas, destacan los 166 bloqueos, marchas, paros laborales y tomas de escuelas que se realizaron padres de familia para demandar que el gobierno estatal enviara maestros a los planteles donde sus hijos toman clases.
Los familiares denunciaron constantemente que sus hijos no recibían clases, debido a que los maestros se jubilaban o cambiaban de escuela, sin que la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) los sustituyera.
Tan sólo en el primer día de clases del ciclo hubo protestas por este motivo en San Jerónimo, Atoyac, Cuetzala, Taxco y Heliodoro Castillo.
En Acapulco se registraron 37 protestas por falta de maestros en todo el año escolar, principalmente en primarias de la zona suburbana, a excepción de la toma de una escuela por parte de padres de familia en el kínder Manuel Cervantes, donde faltaba un maestro porque otra docente era aviadora y faltaba a clases, y las protestas de las secundarias técnicas 129 y 153, y la 100 Álvaro Obregón.
Costa Grande fue la segunda región en donde más se protestó, porque en las escuelas no habían maestros suficientes para los salones de clases. En total fueron 42 protestas, llevadas a cabo principalmente en primarias de Atoyac, donde se contabilizaron 12, y primarias y secundarias de Zihuatanejo, en total 14.
Montaña fue la tercera región con más protestas por este motivo, al alcanzar la cifra de 23. A diferencia de las otras regiones, las protestas en esta zona se caracterizaron por el bloqueo de carreteras y demandar el envío de maestros a varias escuelas de la zona, históricamente marginada. Así fue el 11 de septiembre, en Tlapa, donde se pidieron 80 maestros para distintos niveles educativos, además de infraestructura para los planteles.
La región Norte sigue en la lista, con 17 protestas, realizadas principalmente en Iguala y Taxco.
Padres de familia de algunas escuelas de Costa Chica protestaron 10 veces por el mismo problema, donde normalmente lo hacían junto con escuelas de municipios colindantes de la Montaña.
En Tierra Caliente sólo se protestó tres veces en Coyuca de Catalán y una vez en Teloloapan.
La segunda gran demanda fue la reconstrucción de los planteles educativos que fueron dañados por los sismos de septiembre de 2017, motivo por el que los padres de familia salieron a las calles a protestar en 75 ocasiones.
Desde el primer gran sismo, del 7 de septiembre, los protestantes mostraron el problema que evidenció el fenómeno natural y que se complicó aún más a partir del segundo sismo, ocurrido el 19 de septiembre.
Tras el primer terremoto, padres de familia dijeron que sus escuelas no eran tomadas en cuentas para la reconstrucción. Desde las primeras manifestaciones, se denunciaba que los planteles no eran incluidos en la lista de 52 escuelas con daños, que dio a conocer el gobernador Héctor Astudillo el 10 de septiembre.
Entre el primer y segundo gran sismo se contabilizaron seis protestas en Chilpancingo, Atoyac, Petatlán y Tixtla.
Después del sismo del 19 de septiembre, el problema se desbordó, porque aumentó el número de escuelas dañadas y Protección Civil no se daba abasto con la revisión de las infraestructuras.
Las primeras protestas se realizaron el 25 de septiembre de 2017 en Acapulco, Chilpancingo, Zihuatanejo, Pungarabato, Coyuca de Catalán y Atoyac. A partir de entonces y hasta la última de éstas, realizada por este motivo en Tixtla el 5 de junio de 2018, se contabilizaron 69.
En la edición de El Sur del 1 de abril pasado, se informó que había 303 escuelas que no eran incluidas por el gobierno estatal para su reconstrucción tras los sismos de septiembre.
Ahí se señala que en la plataforma digital reconstruccion.mejoratuescuela.org, promovida por diversas organizaciones civiles, como el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), entre otras, se identificaban 557 escuelas guerrerenses con daños en la infraestructura, cifra superior a las 254 que reconocía el director del Instituto Guerrerense para la Infraestructura Física Educativa (IGIFE), Jorge Alcocer Navarrete, como se publicó en la edición del 19 de marzo pasado.
Otra de las demandas por las que más se protestó fue por el pago de sueldos, motivo por el que los maestros salieron a la calle 50 veces, porque se les pagaba de manera atrasada o se tenían problemas porque maestros y administrativos no estaban incluidos en el Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa y Gasto Operativo (Fone).
En este año escolar también destacaron las 14 protestas realizadas por maestros idóneos en Chilpancingo y Acapulco, quienes demandaban los nombramientos que la SEG no les entregaba, a pesar de haber realizado el examen profesional docente.
La seguridad fue la otra demanda por la que se protestó 10 veces, siendo la más importante el bloqueo de una avenida de la capital del estado, realizada por profesores de la Montaña baja, quienes señalaron que no podían ir a sus centros de trabajo en Chilapa debido a que el transporte público estaba suspendido.
Esta crisis de inseguridad y suspensión de clases duró todo octubre y parte de noviembre de 2017, y afectó a 663 escuelas, 62 mil 300 alumnos, 3 mil 400 maestros y personal de apoyo en los municipios de Chilapa, Atlixtac, José Joaquín de Herrera, Ahuacuotzingo y Zitlala, como se informó en la edición del 7 de noviembre.
El resto de las demandas fueron en contra de la reforma educativa, becas, transporte, gratuito y material didáctico.

 

No reanudan clases en 32 escuelas del Valle del Ocotito; incumplen gobiernos con dar seguridad

Autoridades del Consejo Municipal, maestros y vecinos del Valle de El Ocotito acordaron no reanudar las clases en escuelas de seis pueblos, luego de que los gobiernos estatal y federal no cumplieron los acuerdos del 22 de febrero, en los que se comprometieron a garantizar la seguridad en el corredor, luego de los ataques de un grupo armado en Buena Vista de la Salud, municipio de Chilpancingo.
El comisario de El Ocotito, Fernando Rosales González informó que son 32 escuelas de todos los niveles educativos que pararon labores, lo que afecta a 2 mil 600 estudiantes.
En la comisaría municipal de El Ocotito, se llevó la reunión a las 12 del mediodía, que duró más de una hora y media, y a la que acudieron autoridades municipales de El Ocotito, Mohoneras, Dos Caminos, Buenavista de la Salud, Cajelitos y Rincón de la Vía, así como promotores de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) y maestros de distintas escuelas, que se quejaron de que el gobierno no ha cumplido los acuerdos para brindar seguridad a la población.
En su participación, Rosales González recordó que en la reunión del 22 de febrero en Acapulco fueron atendidos por el delegado estatal de la Secretaría de Gobernación (Segob), Érit Montúfar Mendoza, y por el subsecretario de Asuntos Políticos del gobierno del estado, José Martín Maldonado del Moral, luego de que la madrugada de ese día, en la comunidad de Xaltianguis, Acapulco, la Policía Federal detuvo a integrantes de la UPOEG y, en respuesta, los pobladores bloquearon las carreteras.
Comentó que en la audiencia firmaron un acuerdo de que la Secretaría de Seguridad Pública estatal y el Ejército reforzarían la seguridad en el Valle de El Ocotito y Xaltianguis, y que continuarían las mesas de diálogo de la UPOEG con los gobiernos estatal y federal para atender las demandas de seguridad ante los constantes hechos de violencia en la zona.
El comisario de El Ocotito se quejó de que las peticiones no se cumplieron y los acuerdos se quedaron a medias, porque la noche del domingo en la comunidad de Buena Vista de la Salud, hombres armados atacaron la base de la Policía Ciudadana de la UPOEG, con el saldo de un policía y un civil heridos de bala, y como medida de precaución se suspendieron las clases el lunes para resguardar la integridad física de los estudiantes y maestros.

Deben crear sus propias policías ciudadanas para acabar con el cáncer de inseguridad, dice la UPOEG

En la asamblea, el promotor de la UPOEG, Gonzalo Torres Valencia dijo que en el corredor del Valle de El Ocotito se está viviendo una situación grave a la que se debe poner atención, “todos los seres humanos tenemos derechos y obligaciones, pero aquí el derecho de libertad y seguridad no lo está brindando el gobierno, pero nuestra obligaciones si la estamos llevando a cabo”.
Dijo que la única alternativa para acabar con el cáncer de inseguridad que afecta a esta zona, es organizarse en cada comunidad y colonia para formar su propia policía ciudadana para proteger a los pobladores, “por eso ustedes, como pueblo, deben de elegir a sus policías con responsabilidad y deben conocerlos para que brinden mejor servicio”.
Torres Valencia explicó que un grupo criminal ya desintegro a la Policía Ciudadana de la UPOEG en Palo Blanco, Acahuizotla y Rincón de la Vía, y que la intensión de los criminales es apoderarse del corredor hasta Acapulco, “si estos amigos llegan a El Ocotito se van a empezar a llevar a las mujeres y a los hombres para reclutarlos a sus grupos, por eso hay que organizarnos para seguir adelante y cuidar a nuestra familia e hijos”.
Por su parte, una maestra de El Ocotito quien se reservó su nombre, dijo que desconoce la situación en Buena Vista de la Salud, “el gobierno nos dice que está tranquilo y que podemos trabajar, pero no es verdad, continúan las balaceras y así nos quieren mandar a trabajar, al gobierno no le interesa nuestra seguridad ni la de los estudiantes”.
Dijo que los padres de familia se quejan de que los maestros no dan clases a causa de la inseguridad, “entiendo su queja… pero no podemos hacer nada, porque si les pasa algo a los estudiantes, el responsable es el maestro, por eso pido consideración en este asunto”.
La maestra propuso que, si los gobiernos del estado y federal no brindan las condiciones de seguridad en el valle, continúe la suspensión de clases para presionar a las autoridades a atender sus demandas.
En su participación, el director de la Universidad Tecnológica del El Ocotito, José Luis Campos Espíritu comentó que es una situación preocupante, “lo que deberíamos hacer es cerrar filas para que ellos cumplan los acuerdos, yo me enteré de la balacera del domingo, y decidí que no hubiera clases en la escuela”.
Por su parte, un padre de familia propuso bloquear la Autopista del Sol, “así actúa el gobierno, si realizamos bloqueos carreteros luego nos atenderán ellos, por eso se necesita que hay que presionarlos”.
En la reunión acordaron suspender clases en todos los niveles educativos hasta el viernes en las comunidades de Dos Caminos, Mohoneras, El Ocotito, Buenavista de la Salud, Cajelitos y Rincón de la Vía como parte de la presión a las autoridades para que brinden seguridad en la zona, y dijeron que si el jueves las autoridades continúan sin dar la seguridad, nuevamente se reunirán para decidir si sigue el paro de labores en las escuelas o si bloquean la Autopista del Sol.
La noche del domingo hombres armados atacaron con granadas y armas de alto poder la base de la Policía Ciudadana de la UPOEG en Buena Vista de la Salud, municipio de Chilpancingo, con un saldo de dos heridos, uno de ellos agente de esa corporación, informaron fuentes de la organización.
Por este hecho se suspendieron las clases todos los niveles educativos en el Valle de El Ocotito.
Otros hechos de violencia en la zona ocurrieron el 8 de febrero, cuando tres integrantes de la organización fueron heridos a balazos en dos emboscadas, y el 21 de febrero un policía resultó herido en otro ataque con armas de grueso calibre a la base comunitaria.
Antes, el 29 de enero, integrantes del grupo criminal de Los Ardillos intentaron irrumpir en la comunidad de Buena Vista de la Salud para tomar el control de la zona para el trasiego de droga; entonces murieron calcinados un comandante, un consejero y dos peones luego de ser emboscados en los límites de Chilpancingo y Mochitlán, informaron fuentes de la UPOEG.

 

 

Que se pondere el diálogo en lugar de las sanciones, pide CETEG para los maestros que paren clases

La representante de la Comisión Política de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) en Acapulco, Adolfina Bautista Vázquez, llamó a la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) a ponderar el diálogo con los maestros en colonias afectadas por la violencia y no aplicar sanciones por la suspensión de clases.
En declaraciones por teléfono, la dirigente expresó que los maestros no están trabajando porque no quieran hacerlo, sino porque los actos de violencia pueden atentar en contra de ellos o los alumnos durante la hora de entrada y salida de clases.
La dirigente de la región, pese a no precisar el número de escuelas que han suspendido actividades escolares por la violencia, indicó que “son muchas”, y como cada año la situación se agudiza llegando diciembre, porque hay quienes son amenazados.
Informó que el pasado 1 de diciembre, en una reunión con el secretario de Educación, José Luis González de la Vega Otero, le solicitó que se les diera protección a las escuelas, que donde no pudieran regresar se comprendieran las razones que los maestros plantearan.
En este contexto la maestra llamó al secretario a buscar una solución para los planteles donde no hay clases, no aplicar sanciones porque no pararon clases “por flojos”, sino por situaciones de inseguridad y tuvieron que tomar decisiones rápidas.
El viernes pasado, 14 escuela aledañas a la colonia Sinaí pararon clases por la ola de violencia que comenzó el martes, con el asesinato de tres taxistas de la ruta de colectivos amarillos Sector 6-Centro, el asesinato de un chofer de la ruta Jarandas-Las Cruces frente a la Central de Abastos, además de balacera en la colinas Alborada 19, Sinaí y Unidos por Guerrero.

La presencia de policías y Ejército en Chilapa no ha ayudado a bajar la violencia, dice un padre

“Estamos en un juego donde ya no sabes qué es cierto o que es inventado para atemorizar a la ciudadanía”, consideró un padre de familia que ya ha dado de baja a sus hijos de escuelas ubicadas en esta ciudad y consideró que de nada sirve la presencia de las policías y el Ejército porque no ayudan a bajar la violencia.
Además cuestionaron qué pretende el gobierno de Héctor Astudillo al minimizar la situación de violencia que mantiene colapsado al sector educativo y al comercio.
“No sé qué se pretenda con toda esta situación. El gobernador dice que es nuestra imaginación, yo quisiera que se viniera a dar una vuelta una semana pero sin guaruras”, reclamó un testimonio.
El pasado miércoles, el delegado regional de servicios educativos de la Montaña Baja, Jerónimo Maurilio Morales, reveló que durante más de 40 días que lleva la suspensión de labores en el contexto de violencia y amenazas a maestros, padres de familia han empezado a dar de baja a sus hijos para trasladarlos a otras escuelas en otros municipios fuera de la región.
Informó que de las 680 escuelas de preescolar, primaria y secundaria de todas las modalidades que existen en la región educativa Montaña Baja, ubicadas en su mayoría en siete municipios (Chilapa, Ahuacuotzingo, Atlixtac, Zitlala, José Joaquín de Herrera, Acatepec y Zapotitlán Tablas), la semana pasada regresaron a laborar 17 ubicadas en la zona rural de Chilapa así como “algunas escuelas de Ahuacuotzingo, Acatepec, Atlixtac y la parte más alta ubicada en la Montaña: Zapotitlán Tablas”.
El integrante de la dirigencia regional de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG), Evelio Venancio, informó el miércoles de la semana pasada que ya había escuelas de nivel primaria trabajando, ubicadas en la colindancia de Tixtla a Chilapa.
Este fenómeno ha sido minimizado por el titular de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), José Luis González de la Vega, quien ha declarado que “unas setenta y tantas” escuelas habían cerrado por la violencia y este pasado viernes en la capital del estado dijo que eran 150 escuelas cerradas y que 42 ya habían reanudado.
Aunque el delegado regional, Jerónimo Maurilio Morales, no precisó la cifra de deserciones o traslados porque, dijo, aún no se han procesado en el sistema de la SEG, se han conocido al menos siete casos en el colegio privado Carrillo Cárdenas del nivel preescolar, secundaria y preparatoria; dos en las secundarias técnicas ubicadas en Zitlala y en la cabecera de Chilapa y una baja más en la secundaria general Benito Juárez en Chilapa.
Además, el rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Javier Saldaña, reveló que 50 alumnos de la preparatoria 26 “Albert Einstein” han emigrado a preparatorias de Chilpancingo.
Un padre de familia que dio de baja a tres de sus hijos ante la incertidumbre por el regreso a clases, el clima hostil generado por los hechos de violencia y la militarización de la ciudad, informó que amenazar al sector educativo para que no haya clases es lo último que la ciudadanía esperaba.
“Es lo último que podemos esperar de esta situación: amenazar hasta para que ya no tengamos clases. Y nos están obligando a desertar de un municipio en el cual nosotros hemos vivido siempre”.
Explicó que desde el 25 de septiembre que inició la suspensión de clases, en el colegio privado donde tenía estudiando a sus hijos en diferentes niveles, cada quince días los papás tenían que ir por tareas.
“Pero rápido, los maestros ya tienen los paquetitos de lo que te van a dejar, vas, recibes y te sales por el miedo ¿no?”.
Dijo que incluso hubo testimonios de maestros que aseguraron haber sido agredidos verbalmente para no reanudar labores.
“(Las amenazas) empezaron con licenciaturas, prepas y ahora primarias y kínder. ¿Qué pretende el gobierno del estado? Si diera solución a esta situación no estaríamos así. Para qué sirve tanta seguridad de la Policía Federal, Estatal, Ejército, (policía) Ministerial, si a la hora de pedir ayuda no la brindan”.
“A nosotros como ciudadanía no nos sirve, para mí están malgastando los recursos federales para una seguridad nula en el municipio”.
Y concluyó: “Estamos en un juego donde ya no sabes qué cosa es cierta y que es inventado para atemorizar a la ciudadanía. No sé qué se pretenda con toda esta situación”.
“El gobernador (Héctor Astudillo) dice que es nuestra imaginación, yo quisiera que se viniera a dar una vuelta una semana pero sin guaruras. Después de eso que nos diga si somos los que estamos mal”, dijo el padre de familia.

Bajan ventas en un 70 por ciento

La poca actividad que ha derivado la suspensión de labores en todas las escuelas de la ciudad ha provocado la disminución de 70 por ciento en las ventas, informaron comerciantes del centro de la ciudad.
“Ya casi no hay negocios. Para los comerciantes la suspensión de las clases significa poca venta y parando todo esto a nosotros nos están dejando sin ningún ingreso”, dijo.
–¿En cuanto han caído sus ingresos por las ventas?, preguntó este reportero a locatarios de abarrotes en el primer cuadro de la ciudad.
“El 70 por ciento, de plano, estamos por cerrar todo; por ejemplo: la luz no nos la perdonan, el agua, son gastos que tenemos que pagar, el contador; ellos no se fijan si vendemos o no, impuestos en (la Secretaría de) Hacienda igual”.

Tres casas inundadas, árboles caídos y suspensión de clases dejaron las lluvias de ayer en el estado

Tres casas inundadas, el rescate de un joven por la creciente de agua en una calle, un vehículo varado, árboles caídos, un apagón de energía eléctrica y suspensión de clases fueron las afectaciones en el estado por las lluvias que ocurrieron la noche del lunes y la mañana de ayer debido a la tormenta tropical Calvin.
La Secretaría de Protección Civil estatal informó mediante un boletín de prensa que de acuerdo con el reporte del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) la tormenta tropical Calvin se degradó a depresión tropical las primeras horas de ayer, y se localiza en la costa media de Oaxaca.
“Presenta movimiento lentamente hacia el oeste-noroeste de 11 kilómetros por hora”, agregó la dependencia.
El rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Javier Saldaña Almazán informó en su cuenta de Facebook que ante las condiciones climatológicas fueron suspendidas las clases en las preparatorias y facultades de Acapulco y de los municipios de la Costa Grande y Costa Chica, y atribuyó la decisión a recomendaciones de la Secretaría de Protección Civil del gobierno del estado.
Sin embargo, el resto de escuelas de educación básica y de los bachilleratos adscritos a la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) y a la Secretaría de Educación Pública (SEP) se mantuvieron abiertas, aunque en el caso de las primarias hubo padres de familia que no mandaron a sus hijos a las escuela.
Fuentes de la Secretaría de Protección Civil estatal informaron que tras las lluvias que ocurrieron la noche del lunes y la mañana de ayer tres casas se inundaron, un joven fue rescatado por el crecimiento de agua en una calle y un vehículo quedó varado en la cabecera municipal de Ometepec.
Detallaron que en la carretera Xochistlahuaca-La Guadalupe, en el municipio de Xochistlahuaca, dos árboles se cayeron, y otro más en la carretera federal Acapulco-Pinotepa Nacional, en el municipio de Copala.
En Zihuatanejo las lluvias sólo causaron la caída dos árboles, informó el director municipal de Protección Civil y Bomberos, José Ángel Lara Magaña consultado en su oficina.
Declaró que aunque hubo lluvias desde la noche del lunes de moderadas a ligeras, han mantenido constante comunicación a través de las redes sociales con los representantes de las colonias irregulares, ubicadas en las partes altas de los cerros de Zihuatanejo.
Aseguró que les han recordado que evacuen y se trasladen a los refugios temporales más cercanos en caso del reblandecimiento del suelo o algún riesgo causado por las lluvias, aunque dijo hasta este martes no había sido necesario.
Fuentes de la Capitanía de Puerto de Zihuatanejo informaron que a pesar de las lluvias no fue necesario suspender la navegación, aunque sí recomendaron tomar precauciones a los pescadores ribereños y a los turísticos.
En tanto, en Atoyac en la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, cerca de la comunidad de Zacualpan dos árboles se cayeron, a las 11 de la mañana los escombros fueron retirados por trabajadores de Protección Civil, informó vía telefónica el coordinador municipal de la dependencia, Irving Hernández Zamora.
En Tecpan las lluvias ocurrieron de manera moderada y sólo se reportó un apagón que duró más de media hora, informó Protección Civil municipal.
Consultado en un recorrido en el río de Tecpan, el director de Protección Civil municipal, Francisco Lira Soto exhortó a los enramaderos a evacuar la ribera del río y agregó que la zona es monitoreada por la dependencia.