Come Zeferino con locatarios de Chilpancingo; le piden regularizar el mercado Benito Juárez




El gobernador Zeferino Torreblanca Galindo, acompañado de algunos secretarios de despacho y funcionarios estatales comió ayer con locatarios del mercado Benito Juárez de esta capital, quienes pidieron su intervención para regularizar jurídicamente ese inmueble y que los apoye con una campaña de difusión.
Cerca de las 3 de la tarde, Torreblanca llegó a ese edificio a convocatoria de los comerciantes así como de los regidores perredistas de Comercio, Luz María Pastor López y de Gobernación, Rubén García Medina, ante la problemática que enfrentan los primeros.
Acompañado de los secretarios de Finanzas y Administración Carlos Álvarez Reyes; de Desarrollo Económico, Jorge Peña Soberanis, así como del coordinador de Enlace Político Institucional, Julio Ortega, el mandatario hizo un breve recorrido por ese lugar que está a un costado de la central de autobuses, casi frente al mercado Baltazar R. Leyva Mancilla, construido por el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero, hace 10 años.
En el área de fondas, fueron colocadas en forma de rectángulo, las mesas en que a diario comen lo mismo tablajeros, que viajeros y alguno que otro ciudadano; sobre de ellas algunos fruteros improvisados. Frente al gobernador, el más variado. A unos metros, dos pequeños de unos cuatro años, fueron amarrados de los pies y atados a un banco de mandera, para evitar que se acercaran al gobernador, porque son “traviesos”, según alcanzo a decir una comerciante.
Tras inspeccionar el menú que Torreblanca iba a degustar, dos empleadas del departamento de Coordinación de Giras y de la oficina que se encarga de su seguridad, asumieron el papel de meseras e incluso no sólo llevaron el plato al gobernador, sino al resto de los funcionarios.
Asimismo acercaban botes de agua y tortillas, mientras Torreblanca picoteaba la carne. Alcanzó a probar casi media ración y después prefirió comer verduras hervidas que una locataria le acercó a petición de sus asistentes.
Mientras eso ocurría, el ambiente era de silencio; nadie hablaba, incluso a la mesa sólo se acercaron los funcionarios municipales y estatales además de los integrantes del patronato de la Feria de Navidad y Año Nuevo.
De los comerciantes y aunque la comida era con ellos, sólo estuvo sentado a su derecha, el administrador del mercado, Pascual Morales en tanto que a su izquierda Pastor López y la directora municipal de Mercados, Josefina García. Los locatarios sólo observaban, apostados alrededor.
Yo fui abarrotero en algún tiempo
Más tarde, durante los discursos, el comerciante Leobigildo Ramírez pidió a Torreblanca a nombre de sus compañeros, que intervenga para regular jurídicamente ese inmueble y que integre una comisión en conjunto con el Ayuntamiento para dar seguimiento a los trabajos de funcionamiento integral del mercado.
También demandó que giré instrucciones al director de Transportes Ignacio Sevilla Díaz, para que asigne una nueva ruta hacía ese lugar y que designe al secretario de Desarrollo Económico, Jorge Peña Soberanis para que sea el vínculo entre comerciantes del mercado y el gobierno estatal. Asimismo solicitó apoyo para realizar una campaña de difusión en medios electrónicos e impresos, de lo que se oferta en ese lugar.
Por separado, el presidente del Patronato de la Feria de Navidad y Año Nuevo, Jesús Adame agradeció que active la economía y que haya invertido recursos para mejorar la infraestructura de la feria.
Torreblanca en su intervención dijo que ni ese mercado, ni ningún otro, “puede ser un espacio para dividir a los guerrerenses”.
“Los mercados no pueden convertirse en reducto político de ninguna organización de ninguna expresión, los mercados son espacios abiertos, para hacer negocios y para intercambiar bienes y productos y a cambio de ellos los ciudadanos obtengan productos de calidad y oportunos”, dijo.
Indicó que al municipio le corresponde la regulación de los mercados, la limpieza, “pero también le corresponde cobrar impuestos y derechos, pisaje e impuestos”.
Sin embargo, indicó que lo curioso de ese inmueble es que lo hizo el gobierno del estado, durante la administración de Aguirre Rivero “primero, no sé ni cómo lo entregó ¿eh?, ni en qué condición lo entregó, si por que eran de un partido o de otro partido o si porque les dieron un título de propiedad, si porque pagaron o porque firmaron documentos, pero lo primero que tiene que hacer es ver quiénes son los propietarios o los que aspiran a ser propietarios porque sigue siendo el propietario el gobierno estatal”.
Pidió que comiencen a explicar a Peña Soberanis cómo adquirieron los espacios para empezar a ordenar y sentarse para hacer “negociaciones, después de su contrapropuesta, yo les voy a dar todas las facilidades para que sean propietario y hagan lo que les de su regalada gana”.
Insistió que su presencia en ese inmueble que fue reinaugurado en agosto del año pasado por el alcalde Mario Moreno Arcos, no era para “cortar cabezas, quiero dar facilidades… quizás les dieron los puestos, algún líder, nomás así y que a lo mejor no son ni comerciantes; perdónenme que hable del tema, yo era abarrotero en algún tiempo y conozco de lo que estamos hablando, hoy quizá se me olvidó cuando era abarrotero, porque fui abarrotero por accidente, pero hoy estoy haciendo política y la política se trata de poder enderezar las cosas”.