Redacción

Chilpancingo

El presidente del Comité Directivo Estatal (CDE) del PRI, Alejandro Bravo Abarca, calificó de “muy lamentable lo que se está viviendo” en inseguridad en el estado, y que la iglesia tenga que pactar con grupos criminales para poder realizar las festividades religiosas, lo cual no pasaría si los tres niveles de gobierno y las instituciones responsables de la seguridad y de impartir justicia cumpliera con su deber.
En declaraciones telefónicas, al dirigente se le preguntó sobre lo revelado por el obispo emérito Salvador Rangel Mendoza en el sentido de que pactó con líder criminal para que estuviera en paz la Semana Santa en Taxco, ante las amenazas de La Familia Michoacana a penitentes.
El dirigente priista dijo que “es muy lamentable” que se haya llegado al extremo de que la iglesia tuviera que pactar con un grupo criminal para que la celebración de Semana Santa y sus tradicionales procesiones se realizara en Taxco.
“Es lamentable que se tenga que pactar con grupos de delincuentes y más aún, más grave que sea en temas religiosos. Esto demuestra que este tipo de acciones se conducen obligadas por la falta de atención al problema de inseguridad que se vive en todo el estado”.
Dijo que el llamado y la postura del PRI “porque así nos lo dice nuestra militancia, es que efectivamente exista una correcta coordinación entre las distintas autoridades y que cada autoridad en su ámbito correspondiente cumpla con su trabajo y que esto sea para el bien del estado y los guerrerenses… porque es “muy lamentable lo que se está viviendo”.
Del caso específico de Taxco, comentó que “hemos recogido comentarios de compañeros militantes del partido dónde expresan esa incertidumbre en cuestión de seguridad que viven día con día y nosotros nos sumamos y condenamos la desaparición del Servidor de la Nación”.
Bravo se refirió también a los hechos de violencia ocurridos en Semana Santa en Acapulco, la cual alcanzó a turistas son “muy lamentables”, y llamó a que “los esfuerzos de lo que se tenga que hacer en el estado, sea mucho mayor respecto a la seguridad”
Se le preguntó también sobre la posibilidad que planteó el obispo González Hernández respecto a que se están generando las condiciones para el inicio de una sublevación o levantamiento social a partir de las condiciones de violencia e inseguridad, con familias y comunidades enteras secuestradas, sobre todo en Tierra Caliente.
“Esperaríamos que eso no se dé, que no llegáramos a ese extremo de que hubiera un levantamiento” en la región Tierra Caliente que señaló el obispo.
Pero insistió que para eso es necesario que las autoridades realicen cada una lo que les corresponde “para que no tengamos la más mínima y remota posibilidad de llegar a esos extremos”.
Y del planteamiento de los obispos Salvador Rangel y José de Jesús González de que entre las acciones para pacificar el estado se incluya el diálogo con los grupos generadores de violencia, el dirigente priista consideró que si todas las autoridades hacen lo que les corresponde “no es necesario llegar a ese tipo de pactos, porque eso debilita y están por encima de la ley”.