Brenda Escobar
Zihuatanejo
Habitantes de la comunidad de Vallecitos de Zaragoza, en la sierra del municipio de Zihuatanejo, celebraron que a dos años de que la localidad llegó a quedarse con sólo siete habitantes porque el resto fue desplazado por la violencia, poco a poco se recuperan y vuelven a sus actividades cotidianas, incluso ya celebraron “fiestas, 15 años, bodas, torneos de pelota, toreadas”.
Vallecitos de Zaragoza está en la parte alta de la sierra de Zihuatanejo, a 75 kilómetros que se recorren en dos horas viajando en automóvil desde el puerto de Zihuatanejo debido a lo curveado y reducido de la carretera federal Zihuatanejo-Ciudad Altamirano.
A inicios de la década del 2000, Vallecitos de Zaragoza era considerada la capital de la sierra por el auge de las actividades económicas, principalmente la agricultura, la ganadería, la producción de mezcal y el aprovechamiento maderero, así como el comercio.
Sin embargo, con el paso de los años la región se fue yendo en picada debido a la irrupción de grupos de la delincuencia organizada que trajeron violencia e inseguridad, hasta conseguir desplazar por completo a más de 3 mil habitantes, no sólo de Vallecitos, sino también de comunidades aledañas.
En noviembre de 2019, sólo siete habitantes se quedaron en esa localidad, algunos de ellos por ser personas de edad avanzada que no tenían a dónde ir, uno de los que no se fueron es el señor David Rosas, quien contó esos días en los que sólo se escuchaba el sonido de la naturaleza y de los animales que quedaron abandonados en los patios de las casas, porque sus dueños no alcanzaron a llevárselos en su prisa por salir de la zona para conservar sus vidas.
Don David cuenta que “se fue noviembre, ya vamos en diciembre y con ello se nos va un año más, pero sin duda este año nos trajo muchas alegrías porque este año sí que tuvimos fiestas, 15 años, bodas, torneos de pelota, toreadas y muchas cosas más”.
Dijo que “hace exactamente tres años que Vallecitos estaba desolado y casi abandonado, pero ahora tiene más vida que nunca, todo eso gracias a las múltiples personas que decidieron regresar al lugar que los vio nacer, o al lugar que vivieron mucha o casi toda su vida”.
Comentó que en noviembre del 2019, la comunidad estaba desolada, “pero gracias también a personas que decidieron regresar a dar los servicios que de ellos dependían para que el lugar se recuperara, como el profesor Enrique González Vázquez, la gente fue regresando poco a poco a Vallecitos”.
Agregó que Enrique González, quien es el director de la única escuela Secundaria Técnica, la número 99, Ignacio Zaragoza, “solo y contra todo pronóstico se regresó a nuestra comunidad a reanudar las clases de la secundaria, incluso, no haciendo caso al plan del resto de los maestros que ponían como condición que se reanudara el transporte público y las telecomunicaciones para reanudar las clases”.
“El profesor se vino solo, abrió la secundaria y con solamente tres alumnos reanudó clases aquel 27 de enero de 2020”, recuerda y agrega que “hoy el profesor sale al frente de 36 alumnos de la secundaria”.
Enseguida reconoce también a “las maestras del kínder que también se incorporaron a la causa y se vinieron contra viento y marea, igual, a dar sus clases, hoy están en servicio las ya cinco escuelas: kinder, primarias, secundaria y preparatoria”.
Don David Rosas asegura que, “falta mucho por hacer pues aún no somos ni la mitad de la población que fuimos allá por el 2015, pero por algo se empieza, por mientras, por estas fechas ya se vio un desfile que tenía años que no se veía así en Vallecitos, y otros años más que de plano ni los teníamos”, en referencia al recién pasado desfile por el Día de la Revolución Mexicana.
Comentó que ese día, “por la mañana hubo el desfile por la calle principal, luego, el bailable en la cancha municipal y en la tarde la becerreada, y eso no es todo, que al año todavía le queda poquito y para cerrarlo, déjense venir para el 18 de diciembre porque se viene la toreada buena, la estelar, con los mejores toros de la región y con los mejores grupos musicales de la región para el bailazo, ah, pero eso sí, aguas con el mezcal porque ese luego se va a las rodillas”, acota.