Tras darse a conocer la noticia de la detención de Naasón Joaquín García y de colaboradores de su “iglesia”, Bellas Artes y La Luz del Mundo se volvieron tendencia en Twitter, donde el actuar del Instituto fue altamente criticado.
Ciudad de México, 5 de junio de 2019. La renta del Palacio de Bellas Artes como escenario para celebrar un concierto en honor a un líder religioso que, un mes después, sería arrestado como presunto culpable de delitos sexuales y pederastia en Estados Unidos, debe traer una lección al INBA, coinciden especialistas.
El recinto fue solicitado al organismo por el senador Rogelio Zamora, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), quien hizo pasar como un evento artístico un festejo por el jubileo del líder de la “iglesia” la Luz del Mundo, Naasón Joaquín García, apresado este martes en California señalado por tráfico de personas, producción de pornografía infantil y violación de un menor.
Para solicitar el espacio, Zamora utilizó el nombre de organizaciones de la sociedad civil, como la Asociación de Profesionistas y Empresarios de México (APEM), cuyos vínculos con la congregación religiosa son fácilmente identificables apenas con una búsqueda de Internet.
El INBA reiteró este martes que lo sucedido en el Palacio de Bellas Artes el pasado 15 de mayo no fue un acto religioso, sino un concierto, pero —por otra parte— avaló la impresión del logo del jubileo del líder de dicha Iglesia en los programas de mano, esto según el convenio que suscribió con Zamora y que el Instituto hizo público hasta ayer.
Además, la propaganda del evento se promovió como tal tanto en redes sociales como en las congregaciones de la Luz del Mundo.
Para Arturo Saucedo, especialista en legislación cultural, la omisión más grave en el caso es la falta de pronunciamiento por parte de la Secretaría de Gobernación (Segob), dependencia rectora de las asociaciones religiosas en el país.
“Independientemente de lo que sucedió con las diferentes áreas de cultura, si mintieron, si pidieron indebidamente un recinto federal, tenía que haber habido una investigación tal y como la ordena la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público”, reflexiona.
Es la Segob, explica Saucedo, quien tiene la facultad de imponer las sanciones a quienes infrinjan este ordenamiento, tras una investigación que podría alcanzar al INBA.
Según el Artículo 29 de la Ley, las asociaciones religiosas tienen prohibido asociarse con fines políticos —Zamora mismo ha declarado que trabaja en el Senado para la congregación— y, asimismo, vulnerar los bienes de la Nación.
“(Constituye una infracción) realizar actos o permitir aquellos que atenten contra la integridad, salvaguarda y preservación de los bienes que componen el patrimonio cultural del País”, dice el numeral 11.
Adicionalmente, Saucedo expone que la Ley Orgánica del INBA y la Ley de Creación de la Secretaría de Cultura facultan adecuadamente a las dependencias del sector para denunciar y prevenir homenajes como el realizado en Bellas Artes.
Por su parte, Eduardo Cruz Vázquez, especialista en gestión cultural, opinó que no puede achacársele al INBA el conocimiento de los delitos que se le imputan a Naasón Joaquín García; no obstante, debe aprender una lección del caso.
“Son esferas distintas, pero creo que la enseñanza es: ‘Ojo, fíjense bien lo que hacen, tengan mucho cuidado’. Hay muchas formas de enterarnos de la solvencia de las organizaciones”, reflexiona.
Tras darse a conocer la noticia de la detención de Naasón Joaquín García y de colaboradores de su Iglesia, “Bellas Artes” y “La Luz del Mundo” se volvieron tendencia en Twitter, donde el actuar del Instituto fue altamente criticado por usuarios.
“A lavar Bellas Artes con cloro. A investigar en México”, criticó el escritor Antonio Ortuño.
“Bellas Artes fue utilizado para homenajear a alguien que acaba de ser detenido por pederastia y pornografía infantil”, tuiteó, por su parte, Esteban Illades: “Debe de haber consecuencias, y serias, en la secretaría de Cultura después de esto”.
La renta del Palacio, según el convenio, fue signado por Zamora y tres funcionarios del INBA: Pedro Fuente Burgos, Subdirector General de Administración, en calidad de apoderado legal; Laura Elena Ramírez, subdirectora general, y Silvia Carreño, gerente del recinto.
De acuerdo con el INBA, su Órgano Interno de Control ya revisa el caso. Por otra parte, Lucina Jiménez, la directora del INBA, informó el lunes que habrá de revisarse el reglamento del Palacio.
Texto: Francisco Morales V. / Agencia Reforma
Foto: Agencia Reforma
Entérate más:
