En una sesión sin quórum en ninguna de sus cámaras, la legisladora alegó “la necesidad de crear un clima de paz social” en el país andino. El candidato Carlos Mesa felicitó a la nueva mandataria. EU y Brasil reconocieron a Áñez como presidenta interina. Mientras la OEA confirma “irregularidades”, algunas “muy graves”, en las elecciones presidenciales en Bolivia, analistas del CERP afirman que no hubo fraude electoral. Llaman cocaleros a defender a Evo Morales.
La Paz, Bolivia, 13 de noviembre de 2019. En una sesión irregular, la senadora de oposición, Jeanine Añez, se autoproclamó ayer como la presidenta de Bolivia de un gobierno de transición con la misión de convocar en el plazo de 90 días nuevas elecciones. No obstante, el oficialismo, que no participó de la sesión, consideró que hay muchas ilegalidades y que se consumó un golpe de Estado.
El ex presidente Evo Morales escribió en su cuenta de Twitter desde su asilo en México, que se había “consumado el golpe de Estado”.
En una jornada de tensión en Bolivia, la senadora que ostentaba la segunda vicepresidencia del Senado argumentó la decisión de proclamarse como presidenta boliviana en sujeción a los artículos 169 y 170 de la Constitución Política del Estado, sin la presencia de ningún asambleísta del Movimiento Al Socialismo (MAS).
“Aquí se está ante una sucesión constitucional originada en la vacancia de la presidencia del Estado ante la ausencia definitiva del Presidente y Vicepresidente, lo que significa que, conforme al texto de la Constitución, como presidenta de la Cámara de Senadores, asumo de inmediato como presidenta del Estado, disposición prevista en el orden constitucional y me comprometo a asumir todas las medidas necesarias para pacificar el país”, afirmó en la Asamblea Legislativa.
La presidenta interina de Bolivia en una sesión legislativa que no contaba con quórum de reglamento en ninguna de sus cámaras, alegó “la necesidad de crear un clima de paz social” en el país andino amazónico.
Añez, segunda vicepresidenta del Senado, se había autoproclamado momentos antes presidenta de la Cámara Alta, sin quórum, ante la ausencia de la titular del órgano y del primer vicepresidente, asilados en la Embajada de México en Bolivia.
Según la presidenta interina, debía asumir en línea sucesoria el vicepresidente del Estado, el titular del Senado o el jefe de Diputados, pero todos renunciaron también a sus cargos.
Ese fue el argumento, en sucesión constitucional, para declararse presidenta de Bolivia.
Me dan mucha pena los mexicanos, dice Áñez
La autoproclamada Presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, dijo ayer que le daban pena los mexicanos en una entrevista con la cadena CNN.
“A mí me dan mucha pena los mexicanos, porque de algo de lo que queremos salir, ellos decidieron entrar”, expresó Áñez.
“Ojalá que México, ojalá que los mexicanos no pasen estas situaciones tan desafortunadas que hemos pasado. Porque así son los socialistas, utilizan mecanismos democráticos y luego se aferran al poder y después engañan a la gente, cooptan instituciones”.
En tanto, la diputada del MAS, Betty Yañíquez, denunció que esa autoproclamación es ilegal y que no se han incumplido los procedimientos de reglamento interno, leyes y la Constitución.
No adelantó las acciones a seguir y dijo que más adelante dará una posición oficial de su partido, empero, consideró este como un golpe cívico, político, policial y militar, tal cual señala el ex mandatario Morales.
Manifestó que se debió definir las renuncias en primera instancia de los presidentes del Senado y Diputados, a partir de eso convocar a sesión de Asamblea Legislativa que deberá definir si acepta o rechaza la renuncia del presidente Evo Morales y del vicepresidente Álvaro García Linera.
Legisladores del Movimiento Al Socialismo (MAS), el partido del ex presidente y con mayoría en el Congreso, alegaron falta de seguridad en La Paz para que arriben los representantes de otras regiones y cuestionaron los procedimientos.
Según Juan Cala, diputado de ese grupo, la sesión sería ilegal porque “el primer paso es recomponer las directivas de las cámaras ante las renuncias”.
Agregó que sólo 20 por ciento de los 119 legisladores del MAS llegaron a La Paz y el resto no lo pudo hacer por falta de garantías.
La Asamblea tiene 136 miembros entre senadores y diputados.
Tras la autoproclamación presidencial, en varias regiones bolivianas los opositores y movimientos cívicos salieron a las calles a festejar, pues consideraron que el nombramiento de la nueva presidenta interina, consolidaba la renuncia de Morales. Anunciaron levantar los bloqueos a partir de la media noche de ayer.
Los ingresos a la Plaza Murillo, donde está la sede de la Asamblea, fueron acordonados por las fuerzas de seguridad
Alrededor de 5 mil personas simpatizantes del presidente renunciante de Bolivia, Evo Morales, marcharon a La Paz, con dirección a la sede de la Asamblea Legislativa, que estaba citada para sesionar esta tarde de ayer y elegir a un sucesor en el poder Ejecutivo.
En tanto, las Fuerzas Armadas realizan sobrevuelos sobre la ciudad, como parte de las labores de seguridad en conjunto con la policía.
Así también, la Coordinadora de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba anunció que a partir de hoy iniciarán movilizaciones en rechazo a la autoproclamación de Jeanine Añez como presidenta de Bolivia. Su vicepresidente Andrónico Rodríguez advirtió además que los cocaleros continuarían con su movimiento hasta que Evo Morales regrese a la presidencia, según reporta el medio local Opinión.
Los líderes de oposición aprobaron y saludaron la designación de Añez como presidenta interina. Carlos Mesa, candidato por Comunidad Ciudadana y ex presidente de Bolivia felicitó a la nueva presidenta.
En tanto, Naciones Unidas aseguró ayer que está en contacto con “interlocutores nacionales e internacionales” para “ayudar a calmar la situación” en Bolivia, sumido en una grave crisis política tras la dimisión de Evo Morales por el supuesto fraude en las elecciones presidenciales del pasado 20 de octubre.
Por su parte, la Organización de Estados Americanos (OEA) ha difundido ayer el resumen del informe preliminar de la auditoría que ha realizado de las elecciones presidenciales celebradas el pasado 20 de octubre en Bolivia, que confirma “irregularidades”, algunas “muy graves”, tal y como avanzó durante el fin de semana su secretario general, Luis Almagro.
El informe ha sido entregado al Consejo Permanente de la OEA, en el marco de la sesión extraordinaria que ha celebrado ayer para abordar la situación en Bolivia tras la dimisión de Morales, a petición de Perú, Brasil, Colombia, Guatemala, República Dominicana y del autoproclamado gobierno de Juan Guaidó en Venezuela, así como de Estados Unidos y Canadá.
El equipo técnico de la OEA ha analizado cuatro elementos —tecnología, cadena de custodia, integridad de las actas y proyecciones estadísticas— y en todos ellos “se encontraron irregularidades que varían desde muy graves hasta indicativas”. “La razón por la cual se hizo un estudio tan profundo fue, justamente, para cruzar información y garantizar que las irregularidades encontradas no fueran superficiales”, ha subrayado.
Descartan anomalías
En tanto, investigadores y analistas del Centro de Investigación en Economía y Política (CEPR), un think tank estadunidense, señalaron en un estudio de análisis estadístico que no encontraron irregularidades que hayan afectado el resultado de las elecciones presidenciales en Bolivia.
“El análisis estadístico muestra que era predecible la victoria de Morales en primera ronda, basándose en los resultados del inicial 83.85 por ciento de votos perteneciente al conteo rápido que mostró a Morales liderando a Carlos Mesa por menos de 10 puntos”, apunta el estudio.
Los autores mencionan que la OEA no ofreció pruebas.
“Simplemente no hay una base estadística o probatoria para disputar los resultados del conteo de votos que muestran que Evo Morales ganó en primera ronda”, dijo el coautor del documento, Guillaume Long, según la página web de la CEPR.
Bolivia vive un vacío de poder desde el domingo en la tarde cuando, tras más de 13 años en el poder, Morales dimitió acorralado por las protestas luego de los polémicos comicios del 20 de octubre de los que adjudicó la victoria.
La Paz parecía una ciudad sitiada. Las patrullas del ejército en las calles evitaban los ataques de grupos violentos que la víspera quemaron varias unidades policiales en La Paz y Cochabamba y saquearan propiedades privadas y comercios. Cientos de vecinos amanecieron en medio de barricadas improvisadas en las bocacalles para protegerse de posibles ataques. El transporte público era escaso.
Las protestas estallaron hace 20 días luego de acusaciones de fraude electoral a favor de Morales, que buscaba su reelección para un cuarto mandato
Morales acusó a los opositores de haber consumado un golpe de Estado en su contra mientras éstos afirmaron que se trató de un movimiento social que se alzó en contra del fraude.
Evo Morales arribó a la Ciudad de México la mañana de ayer luego que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ofreciera asilo político para el ex Mandatario.
Por otro lado, el presidente de Argentina, Mauricio Macri, pidió ayer “diálogo y nuevas elecciones” en Bolivia, a fin de que ese país sudamericano supere la situación en que se encuentra y recupere pronto su institucionalidad.
El gobierno de Donald Trump y el de Brasil reconocieron ayer a la senadora opositora Jeanine Áñez como presidenta interina de Bolivia tras la renuncia forzada por los militares el pasado domingo de Evo Morales (Con información de agencias).
Texto: Xinhua / Agencia Reforma / Europa Press / Foto: Xinhua
