Parten unas 100 familias de guerrerenses a EU contratados para trabajar en el campo

Por falta de oportunidades de empleo los contrató la empresa Lipman para el cultivo de jitomate, con el aval del gobierno del estado, que también los apoyó para...

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31 agosto,2018 6:27 am
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Por falta de oportunidades de empleo los contrató la empresa Lipman para el cultivo de jitomate, con el aval del gobierno del estado, que también los apoyó para el trámite de sus documentos
 
Zacarías Cervantes
 
Chilpancingo
 
Ante la falta de oportunidades de empleo, unas 100 parejas o familias completas de varios municipios de Guerrero salieron ayer a Florida, Estados Unidos, contratados por la empresa Lipman para el cultivo de jitomate, con el aval del gobierno del estado que apoyó para el trámite de sus documentos.
Se trata de apenas una remesa de guerrerenses de un total de 800 contratados por la empresa en la presente temporada, según se informó ayer durante la ceremonia en la explanada de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, con la que se inició la recepción de los datos de cada uno de los migrantes.
La mayoría son parejas jóvenes, algunos con hijos en brazos, que van en busca del empleo que no encontraron aquí. “No me voy por gusto, yo que no quisiera quedarme en mi pueblo, Chilapa, pero no tengo para darle de comer a mi familia, no encuentro trabajo y la tierra ya no da para más”, explicó Manuel Ahuixteco, de 25 años, que se va con su mujer, de 24 años, y con sus tres hijos de 4, 2 y 1 año.
Por la mañana, los migrantes recibieron un vaso de café y un pan, mientras somnolientos esperaban que se llevara a cabo la ceremonia oficial con la que se iniciaría la recepción de sus documentos.
Asistieron a la ceremonia la presidenta del DIF estatal y esposa del gobernador Héctor Astudillo, Mercedes Calvo; el secretario del Trabajo del estado, Óscar Rangel Miravete; el secretario de Asuntos Indígenas, Javier Rojas Benito, y la secretaria de la Mujer, Mayra Martínez Pineda, así como el director de la empresa Lipman, David García.
Rangel Miravete informó que las contrataciones se hicieron por medio del Programa de Vinculación Laboral con Estados Unidos, para que los guerrerenses vayan a trabajar de manera legal con un salario de 11 dólares por hora, “lo cual representa un ingreso muy superior del que podrían ganar en México”.
Informó que los primeros 100 jornaleros que se despidieron ayer van acompañados de sus esposas, y que esa modalidad fue a petición de la Secretaría de la Mujer, porque ellas van a recibir un recurso extraordinario y que con la percepción de ambos alcanzarán “la consolidación de la economía familiar”.
El director de la empresa informó que el futuro de Guerrero y de México seguirá adelante, porque esa empresa va a invertir pronto en la apertura de un nuevo centro de trabajo en California y que habrá contrataciones también en el estado.
La presidenta del DIF pidió a los migrantes que valoren el trabajo porque las percepciones que van a recibir “no fácilmente cualquier persona las tiene, y muy pocas personas en el país ganan esa cantidad. Dios permita que ustedes hagan buen uso de ese dinero que con sacrificio para ustedes y su familia lo van a ganar”.
Asimismo agradeció a la empresa por seguir tocando puertas para generar más empleos y le deseó éxito “para que podamos tener la oportunidad de que nuestra gente colabore trabajando y demostrando que la inmensa mayoría de los mexicanos somos gente de bien y tenemos ganas de hacer las cosas bien.
Una de estas familias beneficiadas con el contrato es la de Manuel Ahuixteco, quien viaja acompañado de su esposa y tres de hijos, quienes en lo que sus padres escuchaban las intervenciones jugaban en medio de las sillas, junto a los pies de sus padres.
Manuel contó que va contento porque le ofrecieron un buen salario, “aquí ni en sueños lo gano”, indicó, y reconoció que se va triste porque deja a sus padres y a sus hermanos en Chilapa. “Ellos me pidieron que no me fuera, que aquí le buscara, que aunque sea algo iría cayendo para vivir”.
Señaló que la situación se le hacía cada vez más difícil, y que: “No me voy por gusto, yo que no quisiera quedarme en mi pueblo, Chilapa, pero no tengo para darle de comer a mi familia, no encuentro trabajo y la tierra ya no da para más”.
Agregó que ojalá lo que gane le alcance para venir a poner un negocito aunque sea chiquito para que sus hijos tengan asegurada la comida diaria, “por lo pronto, tengo que buscarle, no me puedo quedar solamente viéndolos cuando tienen hambre”, indicó con una voz triste y nostálgica.
Otro de los contratados es Jonathan Tovar, originario de San Marcos. Él se va acompañado de su esposa con la que recientemente contrajo nupcias. Señaló que no ha encontrado un trabajo permanente que le garantice un salario fijo “y formar una familia, pero si me quedo aquí no lo voy a lograr nunca, por eso voy a probar suerte, ojalá y me vaya bien”.
Los contratos que les ofrece la empresa son por nueve meses y medio, y quienes se van son de los municipios de Ahuacuotzingo, Chilapa, Atlixtac, Ayutla, Buena Vista de Cuéllar, Cutzamala, Eduardo Neri, Huitzuco, Leonardo Bravo, Mártir de Cuilapan, Pilcaya, San Luis Acatlán,Taxco, Tecpan de Galeana, Tlapehuala y Tixtla.
 

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