Texto: Víctor Fuentes y Natalia Vitela Paredes / Agencia Reforma/ Foto: EFE
Ciudad de México, 30 de agosto de 2018. La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) rechazó este miércoles el proyecto que declaraba inconstitucionales los lineamientos de 2014 para el etiquetado nutrimental de los alimentos, por inducir a confusión de los consumidores sobre los azúcares dañinos para la salud.
Por cuatro votos contra uno, la Segunda Sala de la SCJN negará el amparo promovido por la asociación El Poder del Consumidor, y confirmará la constitucionalidad del sistema de etiquetado diseñado en 2014 por la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Fuentes de la SCJN explicaron que la mayoría de Ministros no considera que las diferencias de opinión entre posturas científicas que tienen el mismo peso técnico puedan dar lugar a que el Poder Judicial se incline por una de ellas, sustituyendo en sus funciones a la autoridad administrativa especializada en la materia.
El proyecto del Ministro Fernando Franco fue desechado y returnado a la ministra Margarita Luna Ramos para cumplir la formalidad de presentar, en una sesión futura, una nueva propuesta en el sentido de negar el amparo, que un juez federal había concedido en primera instancia en noviembre de 2017.
Franco proponía confirmar esta sentencia, con el argumento de que el etiquetado vigente agrupa indebidamente los azúcares intrínsecos de los alimentos, que no dañan la salud, con los azúcares agregados por los fabricantes, conocidos como azúcares libres.
Confían en nueva revisión a etiquetado
Luego de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) negara un amparo promovido por la asociación El Poder del Consumidor para desechar el actual etiquetado nutrimental de alimentos procesados y de que se aliste otra revisión al caso, activistas confían en que se considere que el etiquetado no sirve.
“Confiamos en que el nuevo proyecto que realice la ministra Luna Ramos tomará en cuenta la sólida evidencia científica y de la academia que demuestra que el actual etiquetado no es entendible para la población, por lo que en este caso la materia es muy sólida”, señaló Javier Zúñiga, coordinador del área jurídica de EPC
Para Alejandro Calvillo, director de la organización, las irregularidades en el diseño del actual etiquetado frontal –que derivó de la Estrategia Nacional para la Prevención y el Control del Sobrepeso la Obesidad y Diabetes– están documentadas de manera sólida, por lo que este aspecto no puede estar a discusión.
“La violación de los criterios nutrimentales de este etiquetado sobre los previamente establecidos en la propia Estrategia, el hecho de que es un etiquetado diseñado por la industria –por los propios regulados–, y el hecho de que es un etiquetado que no es entendible por la población no pudo ni puede estar a discusión en la SCJN ante la evidencia documental que tienen en sus manos los ministros”, puntualizó.
No obstante, las razones por las que los ministros desecharon el amparo promovido por la ONG se conocerán hasta que sea presentado el siguiente proyecto
Por su parte, Juan Rivera, titular del Instituto Nacional de Salud Pública, indicó que una estrategia fundamental para disminuir la obesidad es que la población tenga acceso a la información por medio del etiquetado de alimentos.
Sin embargo, dijo, el etiquetado actual en México es sumamente complejo y no cumple con el atributo de que uno de inmediato puede tomar decisiones en el punto de venta sobre la compra de alimentos.
