Ciudad de México, 3 de diciembre de 2017. Con mucha garra de complacer a su público, y con canciones dedicadas al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, Los Tigres del Norte se presentaron en el Auditorio Nacional.
Los primeros zarpazos musicales llegaron a las 8:50 horas del viernes. El telón se abrió, las notas de Pacas de a kilo sonaron y la ovación del público resonó.
Los hermanos Jorge, Hernán, Eduardo y Luis Hernández, acompañados de Óscar Lara en la batería, comenzaron un recital que poco a poco se desenvolvió en un gran baile, pese a que el lugar no era el más adecuado.
Y es que muchas de las 9 mil 600 personas, que de acuerdo con organizadores asistieron, no se quedaron sentadas o sólo de pie frente a sus butacas, sino que ocuparon cualquier espacio disponible para danzar y disfrutar de las canciones.
Interpretaron La banda del carro rojo, Qué tal si eres tú y Libro de recuerdos, que ya las tenían preparadas como parte de su repertorio.
“Esta noche nos sentimos muy honrados porque nos dan la oportunidad de integrarnos a la magia de este hermoso recinto y con ustedes, nuestro público”, expresó Jorge.
Sin embargo, desde muy temprano en el show la agrupación sinaloense dejó claro que cumpliría las peticiones de sus fanáticos, así que conforme escuchaban a la gente gritando algunos de los nombres de sus melodías las fueron interpretando.
Por medio de gritos, escrito en un papel o a través de algún integrante de la producción, los hombres y mujeres presentes trataron de hacer llegar sus temas demandados.
La jaula de oro, Quiero volar contigo y Allá en la mesa del rincón también se escucharon en el Coloso de Reforma.
La gente entraba y salía de la sala para comprar bebidas alcohólicas en los puestos del lobby, ya que en el interior no se permiten, y ya más entonados regresaban para corear durante el concierto.
Los Tigres no sólo complacieron con sus canciones, sino que desde el escenario posaban para que sus fans pudieran tomar la foto del recuerdo, y algunos hasta el apretón de manos de uno de ellos se llevaron.
No faltó quien llevara puesto su sombrero para estar más en el ambiente del concierto, que se prolongó poco más de tres horas.
Y es que las complacencias no pararon, con La puerta negra, La reina del sur, Corazón de oro, La meserita y Nos estorbó la ropa</>.
“(Esta canción va para ) nuestro amigo del otro país que no queremos decir ni su nombre porque nos da dolor de estómago”, expresó Jorge con referencia al presidente estadunidense Donald Trump, antes de interpretar Somos más americanos.
El momento de la despedida llegó, aunque el público no parecía dispuesto a terminar el baile. Los Tigres del Norte interpretaron América y Lágrimas del corazón en la recta final.
Nota: Fidel Orantes / Agencia Reforma/ Foto: Reforma.
