Se fortalece entre creadores la esperanza de tener un país más justo con la llegada de la nueva década

El escritor Alberto Chimal, la coreógrafa Irene Martínez, el editor Martín Solares y la promotora cultural Lorena Lozoya comparten sus reflexiones sobre las perspectivas que se abren en...

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2 enero,2020 6:38 am
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El escritor Alberto Chimal, la coreógrafa Irene Martínez, el editor Martín Solares y la promotora cultural Lorena Lozoya comparten sus reflexiones sobre las perspectivas que se abren en los próximos años.

Ciudad de México, 2 de enero de 2020. Creadores de diversas disciplinas miran a la nueva década que inaugura el 2020 e invitan con sus reflexiones a construir en los años venideros un país donde la paridad de género sea una costumbre; el amor a los libros inicie desde la primera infancia; una ciudad transitable, risueña y segura; un México donde se eduque contra la violencia en todas sus formas y la cultura esté al centro.

Más espacio a las escritoras y sus obras

El escritor Alberto Chimal dijo que “en un nivel personal, espero poder seguir escribiendo como hasta ahora en la nueva década, y tal vez completar al menos uno o dos proyectos grandes que todavía no he podido hacer pero tengo siempre presentes. Hace años escuché decir a un colega que no esperaba seguir siendo productivo más allá de los 60 años; si tiene razón, eso significa que a mí me quedan 10, 11 quizá.

“No sé si el resto de mi generación se preocupará de manera tan consciente por esto, pero tal vez sería valioso que lo hiciera: más valioso, al menos, que las polémicas que nos distrajeron durante la primera década del siglo, y que eran precisamente sobre los méritos de las generaciones literarias y sus integrantes. Va a llegar el tiempo de evaluar en serio, sin apelación posible, lo que hicimos desde nuestra posición única en la Historia (pues alcanzamos la madurez en el paso del siglo XX al XXI).

“Mirando un poco más lejos, espero que una tendencia de ahora se fortalezca y otra no. Me gustaría que se diera aún más espacio del que se está dando ahora a las escritoras y sus obras, y que se confirmara como una nueva costumbre la paridad de género en atención, difusión y reconocimientos literarios. Por otra parte, espero que los libros de influencers –gran éxito en ferias del libro recientes– no sustituyan a la literatura infantil y juvenil como “atractivo” principal para lectores jóvenes. Ya se habla de esto en las grandes editoriales, y sería una pena que la LIJ dejara de ser el espacio amplio y diverso que es en la actualidad, y por lo tanto se perdiera su influencia positiva”.

Reavivar el interés por el otro, la otra

Por su parte, la coreógraga Irene Martínez expresó que “es difícil estar de acuerdo, pero podemos hacer acuerdos. La palabra interés viene del latín interesse ‘importar’, dice la RAE. Entre varias acepciones que no me causan ninguno, está inclinación del ánimo hacia un objeto, una persona, una narración, etcétera, María Moliner precisa: Actitud o estado de ánimo de alguien a quien le importa cierta cosa, siente curiosidad por ella o dirige la atención hacia ella. Yo creo que en la década que sigue será esencial reavivar el interés por el otro, la otra, los otros, lo otro.

“Es muy grato ver entre los jóvenes de nuestro país un interés creciente por eso lo otro que es la naturaleza. Se ven dispuestos a tomar tomar serias responsabilidades para protegerla y están implementando muchas acciones que todavía son aisladas. Allá en los 70 se decía que la comodidad mata la libertad. En los próximos años será inminente modificar hábitos, paradigmas y creencias para recuperar la libertad de respirar. Para permitir a los que vienen la libertad de vivir”.

Debería ser la década de la paz

Mientras que el editor Martín Solares indicó que “aunque parezca más remota, aunque la hayan prometido y olvidado todos los partidos políticos, aunque tengamos condiciones inmejorables para incubar dictaduras prolongadas y nuevas y creativas formas del fascismo, la década que viene debería ser la década de la paz. ¿Qué van a hacer incluso los más afortunados cuando se acaben las pocas islas de seguridad que existen en este país? Si no queremos que el espanto toque a nuestros seres queridos, la década que viene deberá mejorar la incompleta idea de justicia en la que hemos vivido, al tiempo que nos educa contra la violencia en todas sus formas.

“Para dejar de ser una sociedad que sangra y consume, pero no cura ni crea, debemos aprender las ventajas del debate sobre la sordera, de la experiencia sobre los resúmenes de Wikipedia, de la crítica sobre los likes, de la escritura sobre el copy paste, del reclamo sobre las promesas incumplidas de campaña, de la cultura sobre los recortes presupuestales, del respeto a la vida humana por sobre todos los intereses, y con un énfasis especial, del respeto a los derechos de las mujeres, las minorías y los más débiles por sobre todos los prejuicios. Como hemos visto, la paz no es instantánea ni obedece a los dichos presidenciales de ninguna tendencia. Si queremos conseguirla, necesitamos educación y cultura: todos los días, en cada momento”.

Que la cultura sea una parte de la canasta básica

Dentro de 10 años mi hija tendrá 21 y deseo que para entonces la cultura sea una parte de la canasta básica para ella y sus contemporáneas”.

“En dos lustros, espero que ninguna mujer escuche improperios y descalificaciones por tener los cabellos cortos y las ideas largas. Que el amor a la lectura inicie en la infancia con relatos cercanos, vigentes y entrañables, no con tragedias remotas que llenan de espanto y desesperanza.

“Imagino en 10 años mi Ciudad de México transitable, lúdica, radiante, risueña, dichosa y segura. Que en sus calles y barrios el bien común es modo de vida, no clamor. Que mi hija transita los intersticios de esta metrópoli, donde nací, con la esperanza de un futuro promisorio y no con el temor de morir en el intento”.

Texto: Agencia Reforma, con información de Erika P. Bucio, Israel Sánchez y Yanireth Israde / Foto: Agencia Reforma

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