El próximo martes el alcalde del municipio de Leonardo Bravo (Chichihualco), Ismael Cástulo Guzmán, se reunirá con el secretario de Seguridad Pública federal, Alfonso Durazo.
Chilpancingo, Guerrero, 3 de enero de 2018. El próximo martes el alcalde del municipio de Leonardo Bravo (Chichihualco), Ismael Cástulo Guzmán, se reunirá con el secretario de Seguridad Pública federal, Alfonso Durazo, para continuar con la mesa de trabajo en búsqueda del retorno a sus casas de las 350 personas que se mantienen refugiadas en el auditorio de la cabecera municipal.
Una de las preocupaciones urgentes del alcalde es que el dinero del Ayuntamiento es insuficiente para continuar “sosteniendo” a las familias que cumplirán dos meses de vivir en el auditorio.
En consulta vía telefónica, Cástulo Guzmán señaló que la comuna está preocupada por la falta de dinero para cubrir los gastos de agua, energía eléctrica, gas y comida de las familias que permanecen en espera de una solución para regresar a sus casas.
El 11 de noviembre del año pasado, las familias de comunidades de Leonardo Bravo fueron desplazadas por Policías Comunitarios de Tlacotepec, por lo que se mantienen hacinados en las instalaciones del auditorio.
“Es una labor muy grande estarlos sosteniendo, pero por eso me dirijo a la federación, espero en Dios en que pronto haya una respuesta favorable. Ahorita tenemos que ser claros porque no hay una respuesta favorable”.
En la consulta se le preguntó sobre la postura del gobierno del estado, que asegura que no hay condiciones para que las familias regresen a ocupar sus casas, ni una fecha exacta para su regreso.
“No me quiero meter en controversias, pero la verdad es que desconozco cómo vayan las negociaciones o con quien están negociando, porque no he sido tomado en cuenta y no sé cómo vayan. Lo que sí, es que estoy haciendo un trabajo de fondo a través de la federación”.
Dijo que de la mesa de negociación que ha montado el gobierno del estado con los policías comunitarios que operan en el corredor de la Sierra se mantendrán a la expectativa, porque en ningún momento han sido requeridos.
El alcalde insistió que el problema más urgente por resolver es seguir manteniendo la alimentación y necesidades básicas de los desplazados que están por cumplir el segundo mes en hacinamiento.
Agregó que se están gastando casi 11 mil pesos al día en alimentos para 350 personas que se mantienen en el albergue de manera permanente, porque lo gastan en tanques de gas, en la energía eléctrica, en abarrotes de aseo personal como papel de baño, pasta dental y jabones.
Además, cubren el gasto de la alimentación.
El Ayuntamiento se enfrenta a la falta de dinero para cubrir estas necesidades, por lo que necesita préstamos.
Sobre el encuentro que sostendrá con Durazo, dijo que se tiene programada una audiencia para tratar el conflicto de la Sierra.
“Vamos a tratar de hablar bien, para ver cómo va a quedar este asunto de los desplazados y puedan regresar a su casas”.
Texto: Anarsis Pacheco / Foto: Lenin Ocampo, archivo El Sur
