Guanajuato, 18 de octubre de 2017. La identidad de Alaclair Ensemble se basa en la posibilidad. “¿Qué hubiera pasado sí…?”, se preguntan. ¿Qué hubiera pasado si la historia de Canadá se hubiera escrito de otro modo? ¿Qué, si los derrotados hubieran sido los vencedores? ¿Qué, si se hubiera consolidado la República Soberana de Quebec?
Para entender de qué va este grupo hay que retroceder 180 años en la línea de tiempo de la historia canadiense: entre 1837 y 1838, los habitantes de la colonia británica de Baja Canadá (hoy Quebec) conocidos como “los patriotas”, se levantaron en armas, en busca de su independencia de la corona británica y su establecimiento como república independiente.
Después de varios enfrentamientos, las fuerzas armadas del gobierno colonial suprimieron la rebelión de los patriotas. Pero ¿qué tal si los patriotas hubieran logrado la independencia? Hace siete años, cuando se conformó este colectivo, sus seis miembros fantasearon con esa posibilidad.
En el universo paralelo que da sustento a la banda, la República de Baja Canadá existe y ellos son sus ciudadanos. Incluso Ogden, uno de sus integrantes, ha adoptado el sobrenombre de “Robert Nelson”, quien fue el patriota rebelde que redactó la Declaración de Independencia de Baja Canadá en 1838.
“Nosotros imaginamos una república más inclusiva”, dice Akena Lohamba, uno de los seis habitantes de Baja Canadá. Desde 1938 la lengua predominante de Quebec es el francés. Sin embargo, la declaración de independencia de Baja Canadá en 1838 también incluía a la población anglófona como parte de su comunidad. A eso se refiere Akena cuando habla de mantener vivo el espíritu inclusivo de los patriotas. “Baja Canadá no era concebido como un territorio exclusivamente francófono. Contemplaba la diversidad de lenguas”.
Alaclair Ensemble es como un espejo de feria que altera todo lo que refleja. Por ejemplo, la organización rebelde que buscaba la independencia en 1838 se llamaba Les Fréres Chasseurs (Los Hermanos Cazadores), así que este grupo de hiphoperos ha decidido titularon su cuarto disco Les fréres cueilleurs (Los hermanos recolectores). Lo hacen por juego, por no tomarse demasiado en serio, pero también para invocar la posibilidad de otras realidades y otras narrativas.
Aunque a veces pueden simplemente mandar a volar la narrativa, el mensaje y las posturas. “Más que para construir un discurso, nosotros usamos las palabras como se usan los beats: como percusión. Hacemos juegos de palabas porque nos interesa su sonido y el aporte musical que pueden representar, no tanto por su significado”, explica Maybe Watson.
La noche del miércoles, Alaclair Ensemble dio una muestra de su propuesta alternativa durante el concierto que ofrecieron en la explanada de la Alhóndiga de Granaditas, como parte de la oferta musical alternativa del Festival Internacional Cervantino en Guanajuato.
Por espacio de una hora, el colectivo interpretó energéticas rimas en francés: “Nos gusta pensar que podemos superar la barrera del idioma”, comentó Akena Lohamba antes de comenzar el concierto. Romper las barreras del lenguaje es también otra posibilidad. Y ya se sabe que la posibilidad es la patria que ellos decidieron fundar.
Nota y foto: Tatiana Maillard/ Video: @cervantino.festival (Facebook)